Ganas de Feria

La Feria del Libro de Madrid figura en el calendario de la ciudad como una de las fechas señaladas con más cariño por los madrileños, que quieren a la feria y confían en ella porque es una más entre las instituciones de esta ciudad. Tenemos muchas ganas de pasear por ese recorrido de más de un kilómetro de historias encuadernadas, como si fuera nuestro particular camino de baldosas amarillas, el que conectaba las diferentes regiones de la Tierra de Oz. Y, en esta edición, lo haremos sabiendo que el escenario, el hermoso parque del Retiro, está enclavado en el Paisaje de la Luz, Patrimonio Mundial de la Unesco.

El gran parque de Madrid es la casa de los libros y de los lectores en estas fechas del año y sin él, no se entiende esta celebración anual de la lectura. Por eso, entre otros motivos, el Ayuntamiento de Madrid decidió en 2020 por unanimidad otorgar el título de especial significación ciudadana y de interés general para la ciudad a la Feria del Libro de Madrid. Su permanencia en El Retiro está garantizada.

Alumbrada por libreros, de la mano de editores y distribuidores, la Feria del Libro es uno de los momentos estelares de la primavera cultural de Madrid. Desde el Área de Cultura, Turismo y Deporte, trabajamos para que las cuatro estaciones del año tengan su propia programación cultural, en la que cada madrileño pueda encontrar un rincón para sus inquietudes y curiosidades.

Madrid es todo un personaje literario en el que se inspiraron Benito Pérez Galdós, Pío Baroja, Emilia Pardo Bazán o Almudena Grandes, entre tantos otros. Y aún más, Madrid convierte en protagonista de una historia a todo aquel que pisa la ciudad. Lo saben bien los madrileños y todos aquellos que nos visitan.

Esta 81ª edición de la Feria tiene además el mérito añadido de que se ha preparado en tiempo récord. La nueva directora, Eva Orúe, y todo su equipo han conseguido en una carrera contra el reloj preparar un acontecimiento que mejora cada año y se va adaptando a las nuevas exigencias medioambientales. Entre todos, administraciones, patrocinadores, pero sobre todo libreros y editores, tratamos de conseguir la mejor versión de la Feria teniendo en cuenta todas las sensibilidades, que son muchas y conforman un público masivo. Porque la feria es también una fiesta popular.

Disfruten estos días de la Feria del Libro, paisaje de civilización y república de las letras, donde autores y lectores se conocen e intercambian impresiones antes o después de la lectura de un libro, que es ese acto íntimo de concentración y reflexión tan necesario en estos tiempos de dispersión. Les deseo que tengan todos una buena feria.

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