Ayuso aún no ha cumplido compromisos clave del programa electoral con el que ganó en 2021

La victoria fue como el pistoletazo de salida de una carrera. Hace un año, Isabel Diaz Ayuso ganó las elecciones a la presidencia de la Comunidad de Madrid, e inmediatamente se puso a preparar los siguientes comicios. Así, la minilegislatura regional que se abrió en mayo de 2021, de tan solo dos años de duración por la convocatoria adelantada del 4-M, ha sido diseñada por los estrategas que aconsejan a la presidenta autonómica como un feroz sprint que sirva de presentación para la cita con las urnas de mayo de 2023. Y el momento de la verdad se acerca: Díaz Ayuso tiene hasta la próxima primavera, cuando se disolverá la Asamblea, para sacar adelante todo lo que pueda de su programa electoral de 2021. El balance consecuente dependerá de Vox, su único socio posible en el Parlamento regional, y marcará la fuerza con la que la baronesa se presente ante las urnas.

Díaz Ayuso acudió a los comicios de 2021 con 100 medidas nuevas para ampliar el programa de 2019, que la convirtió en la primera candidata del PP en perder una autonómicas madrileñas desde 1987. En total, eran 450 propuestas. Ahora, la Comunidad declina detallar su grado de cumplimiento, y se remite a un acto de balance que celebrará este miércoles. Estas son sus grandes promesas pendientes:

• Bajada en los impuestos de Sucesiones y Donaciones. Ayuso se comprometió a que las bonificaciones en los impuestos de Sucesiones y Donaciones se ampliarían del 15% al 25% entre hermanos, y del 10% al 20% entre tíos y sobrinos. La consejería de Hacienda, que dirige Javier Fernández-Lasquetty, confirma que aún no se ha ejecutado la reforma correspondiente, y explicita que se hará con toda seguridad antes del final de la legislatura. No es casual: los políticos suelen reservar anuncios que afectan al bolsillo de los ciudadanos para los meses previos a sus campañas de reelección. En este caso, supondría reducir la recaudación en unos 30 millones de euros, y beneficiaría a unos 11.000 contribuyentes, según cálculos del PP.
• Reducción de diputados. Fue una de las propuestas estrellas del programa de 2021, y en seguida se vio como un guiño a Vox. Los dos partidos han tardado casi un año en ponerse de acuerdo sobre el número de representantes que debería tener, a su juicio, la Asamblea: 91, 43 menos de los actuales. No obstante, la iniciativa no saldrá adelante sin la colaboración de la izquierda: para aprobarla hay que reformar el estatuto de autonomía, y eso implica una mayoría reforzada. Más Madrid y Podemos ya han anunciado su voto contrario. El PSOE sí se ha abierto a negociar, pero reclamando contrapartidas difícilmente aceptables por PP y Vox.
• Ayudas a los jóvenes para acceder a una vivienda. El programa electoral del PP recogía un nuevo programa de ayuda a la compra de vivienda, denominado “mi primera vivienda”, para facilitar el acceso de los jóvenes a la financiación hipotecaria “cuando sean solventes, pero carezcan del ahorro previo necesario para poder pagar completamente la entrada y hasta la entrega de llaves”. En estos meses, el Gobierno ha encontrado dificultades a que su ayuda consistiera en un seguro, y se ha inclinado por la posibilidad de un aval. En este momento, el programa aún no se ha presentado oficialmente, aunque ya tiene su partida presupuestaria recogida en las cuentas públicas. Beneficiaría a unos 4.000 menores de 35 años y se hará “a lo largo de 2022″, según detalló la consejera Paloma Martín en enero.
• Línea de metro con tres estaciones en Madrid Nuevo Norte. La conexión del gran desarrollo urbano de la región con la estación de Chamartín no estará lista esta legislatura, porque en realidad no se iniciará la obra civil hasta la siguiente (mediados de 2024), en consonancia con el ritmo del resto del proyecto. La redacción del programa electoral, sin embargo, transmitía el mensaje de que sería una acción inmediata.
• Ley del Mecenazgo. No hay noticias de esta norma, que busca promover la inversión privada en la cultura, el deporte no profesional y la investigación científica. Es previsible que el Ejecutivo intente forzar la máquina para sacarla adelante, ya que en su producción legislativa está el ejemplo que quiere ofrecerle a los ciudadanos de las virtudes de gobernar en solitario. Si la dupla de PP y Cs no aprobó ninguna ley nueva de calado entre 2019 y 2021, y ni siquiera presentó los Presupuestos, el nuevo Ejecutivo monocolor de la formación conservadora ha sacado adelante las cuentas públicas, dos modificaciones de la ley de Telemadrid, una educativa, la supresión de sus impuestos propios, la rebaja del IRPF o la creación de una nueva universidad privada. En la recámara, por ejemplo, la ley de mercado abierto.
• Reconocimiento de las familias monoparentales. El decreto para poner en marcha esta medida llegó a estar elaborado en la anterior legislatura, pero quedó paralizado al merecer la opinión “desfavorable” de la Comisión Jurídica Asesora del Gobierno. Pese a ello, Ayuso lo recogió de nuevo en el programa del PP de 2021. El frenazo afecta a 250.000 familias madrileñas en las que un único adulto se hace cargo de la descendencia, con todo lo que implica en cuanto a carga económica, emocional y de tiempo. La regulación de un procedimiento de acreditación y reconocimiento debía servir para facilitar su acceso a ayudas.
• Estudiar la Constitución en Secundaria. Tras convertir la confrontación con los independentistas catalanes y vascos en uno de los pilares de su estrategia política, Ayuso prometió incorporar “en el desarrollo de los nuevos currículos un bloque de contenidos obligatorios en ESO de Constitución y Democracia, que pongan en valor los valores democráticos de nuestro Estado de Derecho”. La página oficial de la Comunidad no recoge hoy esas materias. Y tampoco los sindicatos, que permanecen atentos desde hace meses, tienen noticias al respecto.

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