Un menor, herido grave de una paliza en Parla

Un grupo de jóvenes ha propinado una paliza a un menor de 17 años en Parla, lo que le ocasionó graves heridas y tendrá que ser operado en los próximos días para reconstruirle el rostro. La policía pide que si alguien presenció la paliza acuda a comisaría por su pudiera aportar datos que faciliten la detención de los agresores.

La agresión se produjo en torno a las diez y media de la noche del pasado sábado en la calle Real del municipio de Parla, según ha adelantado Telemadrid y han confirmado fuentes policiales a Efe. El joven, de nombre Timo, iba andando solo después de despedirse de sus amigos y hablaba con uno de ellos por teléfono cuando, sin mediar palabra, un joven lo golpeó con un ladrillo en la cara mientras otros le propinaban patadas y puñetazos.

Minutos antes se había producido una reyerta en un lugar cercano y todo apunta a que este grupo confundió a la víctima con uno de los participantes en el enfrentamiento. Un testigo citado por la cadena asegura que, tras la agresión, vio huir a un grupo de entre 10 y 15 jóvenes que fueron hacía él con palos y un ladrillo que utilizaron para golpearle en la cabeza.

El menor fue asistido por los sanitarios y trasladado al hospital 12 de Octubre de Madrid, donde será operado en los próximos días de maxilofacial y de oftalmología. La Comisaría de la Policía Nacional de Parla se ha hecho cargo de la investigación para tratar de identificar a los agresores.

Para ello los investigadores revisan las cámaras de seguridad del entorno del suceso y toman declaración a testigos. También ha pedido colaboración ciudadana por si algún transeúnte presenció la paliza y pudiera dar más datos que faciliten las pesquisas.

El menor, que todavía no pueda abrir un ojo según su familia, no conocía a sus agresores y solo sabe que varias personas se lanzaron a pegarle. Según Telemadrid, otro joven de Parla ha contactado con el menor para contarle que también fue objeto de una agresión similar.

“Se trata de un grupo que va disperso por la calle, entonces alguien da un grito y se acercan todos para pegar a una presa que va sola para atacarle. Uno va de frente y los otros dos por detrás. Quizá no fuera una confusión ni venganza, sino simplemente violencia gratuita”, explica Valentina. “Siempre nos preguntan si ha estado vinculado con la banda, pero no es cierto. Nunca se ha metido en ninguna pelea”, añade la madre del afectado.