El Ayuntamiento no descarta cambiar la Tarjeta Familias para que sea compatible con el Ingreso Mínimo

El Gobierno municipal que lidera José Luis Martínez-Almeida no descarta que una de sus medidas estrella, la conocida como Tarjeta Familias, cambie su actual configuración y sea finalmente compatible con el Ingreso Mínimo Vital (IMV). Así lo ha manifestado la vicealcaldesa Begoña Villacís durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno de este miércoles. En esa comparecencia ambos responsables municipales han hecho balance del año de la pandemia y han coincidido en destacar el logro de haber firmado todos los grupos municipales por consenso los Acuerdos de la Villa que marcan la senda para salir de la crisis social y económica generada por el coronavirus. Un ambiente que poco tiene que ver con el que despiden las diferentes fuerzas el año en Cibeles.

La Junta de Gobierno ha dado el visto bueno al texto de la nueva ordenanza que regirá los Servicios Sociales municipales y sus ayudas a los ciudadanos. Es una de las medidas recogidas en los Acuerdos de la Villa y esperan que pueda aprobarse el próximo mes de marzo, según Villacís. A nivel social una de las medidas estrella en el Madrid de la pandemia ha sido la Tarjeta Familias, con las que se pretende hacer frente a las colas del hambre. Su impacto en la calle ha sido sin embargo mucho menor del anunciado cuando se presentó a finales de agosto, cuando se habló de que se iban a beneficiar 27.000 familias y, por el momento, solo la han entregado en torno al millar.

Una de las principales críticas realizadas por la oposición es que la Tarjeta Familias recoge entre sus incompatibilidades la del Ingreso Mínimo Vital o la Renta Mínima de Inserción. Villacís ha dicho que están estudiando cambiarlo pues “no queremos que una familia se quede sin el Ingreso Mínimo Vital por la Tarjeta Familias”. Esta herramienta, que supone entre 125 y 630 euros al mes, permite a los que tienen acceso a ella adquirir alimentos y productos de primera necesidad.

Año de “dolor” y “muerte”

José Luis Martínez-Almeida ha querido huir de triunfalismos y se ha referido al hacer balance de 2020 como un año “para olvidar”, de “dolor” y “muerte”. Al mismo tiempo ha habido logros como los Acuerdos de la Villa o la aprobación de los presupuestos “donde estuvimos a la altura de lo que nos demandaban los ciudadanos” porque “nosotros estamos aquí para servirles y darles soluciones en momentos tan dramáticos”. El alcalde ha querido separarse de balances “triunfalistas” como los que entiende hizo ayer el presidente Pedro Sánchez.

Para Villacís, estamos despidiendo “el año más difícil que hemos vivido en democracia” y ha hecho referencia a las “sillas vacías” de los ausentes en estas fiestas. Trabajar en una pandemia “no lo esperábamos ninguno de nosotros cuando empezamos a gobernar” y “hemos visto cosas que no se nos van a olvidar en la vida”. También ella ha querido destacar el consenso obtenido con los pactos.

El clima en el que fueron refrendados por los cinco grupos municipales el pasado verano ya no es sin embargo el mismo y la oposición da por enterrado aquel consenso. Ese ambiente no ha podido repetirse en la negociación del proyecto de los presupuestos presentado por el ejecutivo de coalición de PP y Ciudadanos, que salió adelante en un pleno extraordinario el pasado día 23 solo con el apoyo de Vox.

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