El Ayuntamiento de Vigo retira el premio al pederasta al que galardonó cuando ya estaba denunciado
El gobierno local asegura que desconocía la condena firme por abusos a menores que recibió en junio y expresa su “más enérgica repulsa”
El Ayuntamiento de Vigo ha acordado este lunes retirar el galardón que otorgó al pederasta condenado por abusar de dos niñas en el colegio en el que trabajaba y contra el que han aflorado más acusaciones de abusos sexuales a menores en el baloncesto infantil donde era árbitro. Jorge G. M. fue premiado en la Gran Gala del Deporte de Vigo y Comarca en agosto de 2020, cuando ya había sido despedido del centro escolar por tocamientos a dos pequeñas entre 2018 y 2020 y denunciado en los tribunales.
El concejal de Deportes y presidente del jurado, Manel Fernández, ha expresado su “más enérgica repulsa y condena” de los hechos que el premiado confesó ante la justicia y de los nuevos testimonios recogidos por EL PAÍS. Fue la Federación Gallega de Baloncesto la que propuso a Jorge G. M. para recibir el premio, señala. El edil de Deportes asegura que “la nominación corresponde única y exclusivamente” a la entidad deportiva y que el Ayuntamiento no fue alertado cuando Jorge G. M. recibió una condena en firme por abusos sexuales continuados el pasado junio.
El gobierno local sostiene que no tuvo conocimiento de los graves hechos que reconoció el árbitro ante el juez hasta que este lunes EL PAÍS publicó las nuevas denuncias en el baloncesto infantil. La Federación Gallega de Baloncesto sí estaba al tanto. Jorge G. M. le comunicó el 25 de mayo a la entidad deportiva en la que trabajaba que iba a ser juzgado por abuso sexual a dos niñas del colegio donde era administrador. Seis días después fue despedido. La alerta de que estaba siendo investigado judicialmente por un delito sexual la había recibido la federación en octubre de 2020.
En la vista judicial que se celebró el pasado 23 de junio, Jorge G. M. llegó a un acuerdo con la Fiscalía, que le pedía ocho años de prisión. Confesó los tocamientos a las alumnas del colegio en el que trabajaba y la pena le fue rebajada a dos años. Como no tiene antecedentes, ha esquivado la cárcel. Tras su condena, varias jóvenes vinculadas al baloncesto aseguran que fueron víctimas de Jorge G. M. cuando eran menores. Sus testimonios han sido puestos en conocimiento de la Fiscalía de Menores y algunas afectadas estudian emprender acciones legales.
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