Ximo Puig hace autocrítica y carga contra el marco del debate nacional impuesto en la campaña autonómica

El todavía presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha abogado este lunes por hacer autocrítica “desde la serenidad” tras los resultados electorales del 28M, que le han hecho perder el Consell, porque “todos habremos cometido algún error”. Ha aseverado que el presidente del Gobierno central y líder de su partido, Pedro Sánchez, no le ha llamado tras conocerse los resultados de los comicios: “No he hablado con él, no he tenido oportunidad aún. No nos hemos llamado”, ha comentado, antes de quitarle importancia al asunto. Dos horas después, Sánchez ha anunciado el adelanto de las elecciones generales al 23 de julio, tras el fracaso de la izquierda en los comicios municipales y autonómicos.

Puig, en una entrevista concedida esta mañana en el programa Hoy por hoy, de la cadena SER y recogida por Europa Press, ha asegurado que tras los resultados electorales no ha podido dormir mucho aunque ha resaltado que tiene la conciencia “muy tranquila” porque “han sido unos años muy importantes para el futuro de la Comunitat, que está mucho mejor que hace ocho años. Al final, misión cumplida”, ha subrayado.

Preguntado por si entiende lo que ha pasado en estos comicios, ha afirmado que “todo tiene explicación seguro”. “Seguro que con errores, por nuestra parte, pero se ha impuesto un marco que no tenía nada que ver con lo que se estaba jugando, debatiendo. No obstante, estas cosas suceden en política, esta futbolización de la política”, ha expuesto.

Dentro de esos “errores”, interpelado por si considera que si está el hecho de que Sánchez entrara en el marco nacional, ha respondido: “Es difícil salirse de ese marco. Tenemos una agenda política muy centralizada, con una dinámica perversa de una confrontación estéril y habrá que analizar en profundidad todas las cuestiones. Todos habremos cometido algún error”, ha aseverado.

Las críticas en el seno de los socialistas valencianos por la campaña en clave nacional que también ha planteado Sánchez, como respuesta a la del PP, se habían extendido antes de las elecciones. Tras los resultados, se han multiplicado. Los anuncios del presidente de Gobierno durante los mítines opacaban los mensajes locales y autonómicos y acaparaban la atención de los medios de comunicación perpetuando el marco del relato nacional. Ahora, la decisión de Sánchez de adelantar las elecciones abre un nuevo escenario.

Los socialistas valencianos, por otro lado, no han sabido darle la vuelta a este relato, a pesar de la buena valoración de la gestión de la Generalitat. “El resultado”, ha continuado Puig, “ha sido positivo porque hemos aumentado cinco diputados y la gente ha valorado muy bien la gestión, pero efectivamente al final ha habido también a nuestra izquierda errores de manifiesto. Pero no quiero evadir mi responsabilidad. Al final nosotros éramos los que liderábamos este gobierno de progreso en la Comunitat y yo debo asumir su responsabilidad”, ha destacado.

Preguntado por si cree que los resultados son un castigo a Sánchez, Puig ha manifestado: “No sé si es un castigo a Sánchez. Es una situación que venía alargándose desde hace mucho tiempo. Esto del antisanchismo después de salir de la crisis con una cohesión social como la que hay en España... Habrá que analizar bien cómo esta dicotomía tan extraña está sucediendo. Cómo un gobierno que hace muchas cosas en positivo, tiene una respuesta tan visceral”, ha dicho.

En este sentido, interpelado por cómo se sale de esta situación, el todavía president ha manifestado que “no hay soluciones mágicas ni atajos para conseguir el cambio de marco pero creo que al final las cosas cambian más rápidamente. Nosotros estamos en buenas condiciones de recuperar dentro de cuatro años un espacio de progreso porque se han hecho las cosas bien y si nos alejamos de la vorágine tan perversa que hay en la política española, hay esperanza de recuperación”, ha aseverado.

“En España habrá un día en que supongo que se parará el balón y cambiarán algunas circunstancais que hacen respirables algunas conversaciones políticas”, ha añadido. En este sentido, interpelado por si se ve víctima de la descomposición del espacio de la izquierda del PSOE, ha dicho: “No me siento víctima de nada. No se han hecho las cosas de manera adecuada para ellos y para el conjunto de una coalición de progreso. Y lo digo sin interés de hacer ninguna crítica. Las cosas son complejas, cada uno hace lo que puede y yo me he sentido confortable con un equipo plural”, ha afirmado.

Puig opina que “siempre hay margen” para enderezar la situación en seis meses, cara a las elecciones generales: “Además, los gobiernos de derecha y ultraderecha que se van a conformar pueden evidenciar también esa realidad electoral diversa y creo que puede haber recuperación. Dependerá de la capacidad que se tenga en el propio espacio político”, ha señalado.

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