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Carlos Mazón elige un camino rural, lejos del núcleo urbano de Utiel, para regresar a la zona cero al cumplirse un mes de la dana

El presidente de la Generalitat se justifica por no haber planteado un tributo a las víctimas por el mes de la dana: “Nuestro mejor homenaje es nuestro trabajo y sudor”

El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón (con cazadora), junto alcalde de Utiel, Ricardo Gabaldón (a su derecha) y el consejero de Agricultura, Miguel Barrachina, este viernes en una camino rural de Utiel.Foto: Jaime Villanueva | Vídeo: EPV
Ferran Bono

Conforme el coche avanzaba entre trompicones hacia el punto de encuentro, un puente dañado de un camino rural, más se alejaba el núcleo urbano de Utiel, la primera población en padecer el castigo de la dana del 29 de octubre. Allí, entre campos de viñedos delimitados por pinos y carracas, con el olor de la tierra mojada y sin vecinos a la vista, el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, había convocado este viernes sobre el mediodía a los medios de comunicación a una visita a las obras de restauración de una vía agraria, coincidiendo con el mes que se cumple de la mayor catástrofe del siglo en España, que ha causado 222 muertos y por ahora cuatro desaparecidos. Posteriormente, en el Ayuntamiento se ha mantenido un minuto de silencio por las seis víctimas mortales localizadas en la población valenciana. Mazón, advertido o no del acto, ya se había ido.

Desde la visita del 19 de noviembre a Chiva en compañía de los Reyes, Mazón no había visitado de manera pública ninguna población damnificada. La vez anterior, fue abucheado e insultado en un breve paseo que realizó por Torrent, dos días después de la manifestación del 9 de noviembre que congregó a cerca de 135.000 personas para pedir su dimisión por la gestión. Hoy, solo el trino de los pájaros, el zumbido de las moscas y el ruido de las excavadoras han acompañado su mensaje de que hay que reconstruir y normalizar la actividad económica en todos los frentes y eso pasa por el entorno rural, por restaurar los caminos que dan acceso a las explotaciones agrarias y ganaderas, un proyecto para el que la Generalitat ha destinado 20 millones de euros.

Su pretensión, no obstante, ha chocado con la fecha y el paisaje escogido, muy distinto al de los centenares de sótanos aún con agua y fango de la poblaciones destrozadas de l’Horta Sud de Valencia. Preguntado sobre si unos caminos rurales son el mejor escenario para este primer mes de la tragedia, cuando arrecian el malestar en muchos damnificados y las protestas para pedir su dimisión, Mazón ha respondido que no ve esta fecha “en clave de aniversario”, sino en clave de hacer su labor. “Creo que el mejor homenaje es nuestro trabajo y nuestro sudor en la frente para ser rápidos, para ser eficaces, para ser lo más rápidos posible, porque todavía hay mucha gente a la que todavía no le ha llegado nada y por tanto no podemos descansar”, ha apuntado a propósito de si la Generalitat ha organizado algún homenaje a las víctimas, como sí han hecho algunos municipios. “No nos hemos planteado una cuestión de aniversario, ni tan simbólica. Creo que el mejor simbolismo es el trabajo y restaurar la normalidad lo antes posible”, ha sostenido. Se podría haber hecho un acto, “quizás no desde el ornato de una efeméride”, ha admitido, pero la prioridad es avanzar en la reconstrucción “dentro del dolor y dentro de la profunda empatía de todo lo que está sintiendo la gente”.

Mazón ha asegurado que ha visitado poblaciones afectadas, sin referirse a las fechas, como Algemesí, Paiporta, Utiel, Guadassuar o Chera, si bien la última vez que se anunció a los medios su presencia fue en la jornada real en Chiva, hace 10 días. En muchas de estas poblaciones hay previstas concentraciones de protesta esta tarde, además de otra manifestación el sábado en Valencia. Al respecto, ha sostenido la necesidad de mostrarse “extraordinariamente comprensivos” con las manifestaciones, pues “la gente es libre de sentir y hay que comprenderla después de una de las desgracias más importantes de la historia” de la Comunitat Valenciana, si bien ha recordado las lesiones sufridas por algunos policías por algunos enfrentamientos aislados al término de la manifestación anterior.

Balance de las ayudas

Por lo demás, Mazón ha anunciado que la Administración autonómica ha resuelto ya 10.000 ayudas directas de primera necesidad para familias afectadas por la dana, que suman un total de 60 millones de euros que han sido ingresados en sus cuentas, y ha agradecido la labor que están llevando los funcionarios para la tramitación. El president ha incidido en que la Generalitat es “la primera administración que ya está efectuando los pagos para poder empezar a ver algo de camino, empezar algo de recuperación directa” y ha aprovechado para incidir en su línea de crítica al Gobierno de Pedro Sánchez. Mazón ha recordado que las estimaciones iniciales realizadas por el Consell indican que se requerirán unos 31.000 millones de euros para reconstruir toda la zona afectada pero que, “hasta la fecha, el Gobierno ha respondido con 14.000, de los cuales casi la mitad son créditos a devolver con intereses”, si bien fuentes del Gobierno han desmentido esas afirmaciones. Mazón sostiene que los valencianos tendrán que devolver 900 millones de euros en intereses.

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón (centro), durante su visita a los campos agrícolas de Utiel para valorar los efectos causados por la dana.
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón (centro), durante su visita a los campos agrícolas de Utiel para valorar los efectos causados por la dana.Jaime Villanueva

Mazón ha pasado de puntillas sobre las discrepancias manifestadas por el presidente de su partido, Alberto Núñez Feijóo, en la gestión de la dana y ha asegurado que se siente respaldado y que tienen una “muy buena interlocución”. El president ha estado acompañado en su visita rural por el consejero de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina, y el alcalde de Utiel, Ricardo Gabaldón, del PP, que ha llegado a tiempo al minuto de silencio con los vecinos de su municipio.

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Sobre la firma

Ferran Bono
Redactor de EL PAÍS en la Comunidad Valenciana. Con anterioridad, ha ejercido como jefe de sección de Cultura. Licenciado en Lengua Española y Filología Catalana por la Universitat de València y máster UAM-EL PAÍS, ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria periodística en el campo de la cultura.
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