Tres detenidos en Orihuela por retener y apuñalar a un menor al que exigían dinero o que asesinase a otra persona

Los responsables de un centro de acogida de Orihuela, en Alicante, denunciaron a principios del pasado mes de mayo que uno de sus tutelados no había acudido a dormir, tal como tenía establecido. Cinco días después, el menor, de 16 años, apareció en el mismo centro herido de gravedad, con una puñalada que le había perforado un pulmón. Tras ser operado, contó que había estado retenido contra su voluntad, amenazado y coaccionado, que le asestaron un navajazo cuando trató de huir y que sus captores le pidieron como rescate 27.000 euros o que asesinara a una persona. La Policía Nacional ha detenido a tres personas, de edades comprendidas entre los 21 y los 23 años, acusados de detención ilegal, lesiones, robo con violencia, extorsión, omisión del deber de socorro y omisión del deber de impedir o perseguir delitos. Uno de los arrestados ya está en prisión.

La víctima conoció a dos de sus captores unos días antes de su desaparición y consiguieron convencerle de que fuera con ellos a la vivienda en que residían. Una noche no volvió al centro tutelado y sus responsables tramitaron una denuncia ante la Unidad de Familia y Mujer de la comisaría de Orihuela, que activó el protocolo de búsqueda. El menor apareció cinco días después, con una herida de arma blanca en el costado que le había producido un neumotórax por perforación de un pulmón. Tuvo que ser ingresado y operado en el Hospital Vega Baja de la ciudad alicantina.

Tras recuperarse de la intervención quirúrgica, el menor declaró que había pasado unos días en un piso del centro de la ciudad, junto a tres personas que le habían acogido en principio, pero que después le señalaron que estar con ellos no le iba a “salir gratis”. O colaboraba con sus pretensiones o, de momento, le iban a quitar el móvil, relató a la policía.

Ante la escalada de coacciones y amenazas, el menor trató de huir del lugar en el que se encontraba. Llegó hasta el descansillo de la escalera pero, una vez allí, recibió un navajazo por la espalda. Los captores lo arrastraron otra vez hacia el interior de la vivienda, lo ataron con cuerdas a una silla y le explicaron sus verdaderas intenciones. Para quedar libre, la víctima debía conseguir que su madre reuniera 27.000 euros o debía matar a una persona, también residente en la localidad alicantina, a quien la Policía investiga en estos momentos y de quien no constan más datos. En ese momento, el menor se desvaneció y sus secuestradores lo arrojaron al suelo de una habitación en la que permaneció encerrado. Cinco días después de su desaparición, y en circunstancias que las fuentes consultadas no han aclarado, el menor volvió al centro de acogida.

La víctima dio indicaciones sobre la posible ubicación del inmueble en el que había estado retenido y los agentes desplegaron un operativo de vigilancia en el que cayó, el pasado 12 de mayo, el principal investigado, presunto autor material del navajazo, y con antecedentes policiales, algunos de ellos, según la policía, órdenes de alejamiento de diferentes personas. El arrestado, tras pasar a disposición judicial en el Juzgado de Instrucción de Guardia de Orihuela, fue enviado a prisión.

Los otros arrestados fueron atrapados el 17 de mayo, y se encuentran en libertad en espera de juicio. Tras las detenciones, los agentes procedieron al registro de la vivienda en la que se habían producido los hechos, donde localizaron la navaja con la que presuntamente se había atacado a la víctima y restos biológicos. La investigación sigue abierta, principalmente, para tratar de establecer qué relación existe entre los agresores y la persona a la que intentaron que la víctima asesinara.