El cineasta Martí Guarch sale de prisión pese a que los jueces ven “indicios sólidos” de que agredió a una actriz de 12 años

Tres meses después de ingresar en prisión provisional por la presunta agresión sexual a una niña de 12 años, el joven cineasta Martí Guarch ha quedado este jueves en libertad provisional. Guarch ha abonado la fianza de 25.000 euros que le ha impuesto la Audiencia de Tarragona para quedar libre a la espera de juicio. Las magistradas que firman la resolución concluyen que ha disminuido el riesgo de fuga, puesto que Guarch tiene arraigo familiar y social y está empadronado en Alcover (Tarragona). La resolución a la que ha accedido EL PAÍS, señala, sin embargo, que existen “indicios sólidos” de que cometió los hechos de los que se le acusa: agredir sexualmente de forma continuada, durante dos años, a una actriz menor de edad a la que había hecho partícipe de algunos de sus proyectos.

Guarch, de 23 años, estaba inmerso en su nuevo proyecto (Bichos raros) cuando fue detenido por los Mossos d’Esquadra a principios de marzo. La jueza ordenó su ingreso en prisión provisional sin fianza tras escuchar su declaración y practicar la exploración de la menor, que denuncia agresiones continuadas. Desde entonces, Guarch permanecía en la prisión de Mas d’Enric (Tarragona). Allí, argumenta su abogada, su salud mental se ha deteriorado: sufre ansiedad, ha intentado quitarse la vida en dos ocasiones y toma psicofármacos.

La Audiencia de Tarragona ha accedido en parte a la petición del cineasta de modificar su situación personal y ha decretado la prisión eludible bajo fianza de 25.000 euros, que según fuentes cercanas a la defensa ya ha hecho efectiva, lo que le permitirá abandonar la celda este mismo jueves. Tanto los padres de la menor como la Fiscalía se habían opuesto a la medida.

Su salida de prisión no significa que los hechos no hayan ocurrido. Las magistradas subrayan que hay indicios “suficientes y sólidos” para mantener la imputación por la agresión continuada a la menor. “Existe una base indiciaria suficientemente sólida” acreditada por la investigación judicial, que incluye la declaración de la víctima y las testificales de las amigas, pero también capturas de pantalla y fotografías. Los hechos “presentan caracteres de un delito particularmente grave” como es la agresión sexual a una persona menor de 16 años, insisten. En el caso de Guarch, incluye presuntamente “tocamientos en las zonas genitales, pechos, glúteos, masturbaciones, felaciones, besos en la boca e intentos de penetración”, recoge la resolución.

Las magistradas señalan que, aunque el riesgo de fuga persiste (los hechos que se le atribuyen pueden conllevar penas de hasta 15 años de cárcel), ha disminuido de forma notable. Tampoco aprecian riesgo de reiteración delictiva. Sí creen necesario proteger a la niña, que además es menor de edad. Y por ello han prohibido a Guarch “residir o acudir” a Alcover durante al menos un año para evitar encontrarse con ella. El director no podrá, de hecho, acercarse a menos de 500 metros de la niña o de su casa.

El investigado ha aportado un certificado de empadronamiento en Alcover, donde también viven sus padres y su hermana, como prueba de su arraigo. La resolución señala que tiene “trabajo estable como cineasta” y es “profesor de artes escénicas y literatura”, además de regentar una escuela de artes escénicas en el pueblo que, según su defensa, se ha visto obligado a cerrar a raíz de su detención y encarcelamiento. Guarch, que dirigió la película Zamorana todo por su hija (2021) y la obra de teatro Carita de Ángel, niega los hechos.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal