Cataluña incrementa un 5% la oferta de Formación Profesional el próximo curso

Continúa creciendo la oferta de plazas de la Formación Profesional y el próximo curso habrá 8.129 nuevas vacantes (un 5%) para dar respuesta al aumento de demanda que estos estudios están viviendo en los últimos años. El Departamento de Educación ha presentado este lunes la oferta de estos estudios postobligatorios, así como las novedades en la preinscripción, que arrancará el 12 de abril. Este año, los alumnos de 1º de Bachillerato, los que han cursado un programa de formación e inserción (PFI) o los que se han sacado el título de la ESO en una escuela de adultos también tendrán prioridad -junto a los de 4º de ESO- a la hora de elegir plaza.

En concreto, de cara al próximo curso se ofertarán un total de 171.028 plazas de FP. De las 8.129 nuevas, 3.927 son de grado medio, 2.937 de grado superior, 270 de PFI, 300 de itinerarios formativos específicos (IFE), 400 de FP de grado básica y 295 del Institut Obert de Catalunya. Esto comportará la creación de 273 grupos, y la necesidad de contratar 698 profesores, que se sumarán a la actual plantilla de 9.390 docentes.

Sobre el profesorado, o más concretamente sobre la falta de profesores en algunas especialidades, el consejero de Educación Josep Gonzàlez-Cambray, ha recordado las medidas paliativas que ya se están llevando a cabo actualmente -como ampliar la jornada a los profesores de Informática o relajar los requisitos de acceso-, pero no ha anunciado nuevas medidas, a pesar de admitir “que el problema todavía existe”. “Iremos a buscar profesores donde sea necesario”, ha aseverado Cambray.

El próximo curso se implantará la titulación de grado superior en Formación para la movilidad segura y sostenible, así como nuevos cursos de especialización en Auditoría energética, Robótica colaborativa, Mantenimiento de coches híbridos o una relacionada con los drones.

Prioridad en la preinscripción

Este curso se estrenó la novedad de dar prioridad a los alumnos que finalizan 4º de ESO para que puedan elegir plaza en un grado de FP, y así facilitar su continuidad de los estudios e intentar luchar así contra el abandono prematuro de los estudios. La medida se impuso después de que miles de alumnos se quedaran sin plaza el año anterior, debido a la gran demanda.

El año pasado se aumentaron las plazas y se priorizó a los alumnos que finalizaban secundaria, pero ello no evitó la crítica de muchos colectivos que se estaban quedando fuera. Educación ha decidido incorporar en esta prioridad otro tipo de alumnos, también con el objetivo que no abandonen antes de tiempo. Concretamente, son los que hayan cursado 1º de Bachillerato y decidan cambiar a la FP, los que fan finalizado un FPI (alumnos sin la ESO) y ahora quieran proseguir con un grado medio, o aquellos que han obtenido el título de la ESO en una escuela de adultos.

El calendario de preinscripción también se ha avanzado este año para evitar que se demore el proceso de matrícula y de repesca, que este curso se alargó hasta septiembre y octubre, provocando que miles de alumnos se incorporaran a las aulas con el curso ya iniciado. “Garantizaremos que todo el alumnado del proceso ordinario tenga plaza antes de que empiece el curso”, se ha comprometido Cambray.

Retraso en la FP integrada

Los departamentos de Educación y Trabajo, junto a las patronales y los sindicatos de UGT y CC OO han escenificado este lunes un acuerdo sobre la planificación conjunta de la FP tradicional con los cursos de formación ocupacional, es lo que se conoce como la FP integrada, y que en un futuro debe plasmarse en la creación de institutos específicos que impartan ambos tipos de estudio. La Generalitat planeaba poner en marcha unos 40 centros a principios de este año, pero de momento no hay fecha prevista para ello.

Estudio sobre la salud mental en la Universidad

Por otra parte, el Departamento de Universidades y los 12 campus catalanes, públicos y privados, han impulsado un estudio sobre la salud mental de estudiantes y profesores. Así, en los próximos días se enviará una encuesta a toda la comunidad universitaria con el objetivo de detectar problemas de salud mental, a raíz de la pandemia. Se trata del primer estudio de esta magnitud que se realiza en las universidades, y que contará con la asistencia de 21 expertos en la materia.

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