La Pasión de Olesa se publicita con el espóiler “hacia el final matan al protagonista”

La Pasión de Olesa, el tradicional espectáculo teatral sobre los episodios finales de la vida de Jesucristo en el Nuevo Testamento que se monta por Semana Santa en el municipio de Olesa de Montserrat (Baix Llobregat), alcanza este año nuevas cotas de modernización, un empeño constante en las últimas ediciones para adaptarse a los tiempos que corren. Tras haber resaltado “el conflicto de poderes” que aparece en la historia, la Passió, que se ofrece ya a partir de este domingo el Nou Teatre de la Passió, a las 11 horas (hasta el 1 de mayo), “consolida la transversalidad del conflicto político que queda entrelazado con la vida pública de Jesús durante el primer acto”, y da mayor protagonismo a las figuras femeninas.

En ese sentido, explican los responsables del espectáculo, María “ya no es la madre resignada que acompaña a su hijo hasta el final”, sino que es “una madre coraje” —en alusión al personaje de Bertolt Brecht— que comprende el camino tomado por Jesucristo. Magdalena “consolida el protagonismo de la temporada pasada” entre el grupo de apóstoles y seguidores de Cristo, y sale desde el principio. Mientras que la mujer de Poncio Pilato, sin nombre en el Evangelio de Mateo, el único en que aparece, y denominada Claudia en la función (afortunadamente no Incontinentia Buttocks), toma más relevancia en su papel en la decisión del prefecto romano de cómo proceder con Jesús.

Con todo, lo más sorprendente este año es la campaña de comunicación de la Passió, con un toque humorístico y basada en la idea de espóiler. Así, uno de los carteles ideado para publicitar el espectáculo reza: “Hacia el final matan al protagonista”. Y otro: “Amor, envidia, odio, traición… Como una telenovela del mediodía, pero sin sobreactuaciones”.

La idea, según sus creadores, es romper con la imagen clásica de la Passió, de la que hay referencias desde 1538, e intentar acercarla a un público más amplio y diverso. En la representación, que se realiza con suntuosos decorados y vestuario, participan medio millar de actores y figurantes. El récord se consiguió en 1996 con 729 intérpretes en escena al mismo tiempo.

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