Detenida en Girona una mujer que coleccionaba en su jardín un arsenal de guerra
Los seis cañones y las armas incautadas pertenecían a su marido, recientemente fallecido y aficionado a los utensilios bélicos
La Guardia Civil de Girona ha detenido a una vecina de Maçanet de la Selva (Selva), de unos 60 años, como presunta autora de un delito de depósito de armas de guerra y tenencia ilícita de armas. La mujer tenía, alrededor de la piscina de la finca, dos grandes cañones del Ejército y otros cinco de menores dimensiones. También han incautado munición y armas largas y cortas. Según fuentes cercanas al caso el armamento era de su marido, fallecido recientemente. Las piezas grandes estaban en el jardín y las armas de avancarga y cortas las usaba como decoración en el interior del domicilio.
Según ha informado este viernes la Benemérita, una vez tuvieron constancia de la existencia de diverso armamento en esta propiedad, situada en la zona del Molí, agentes del Servicio de Información de la Comandancia de Girona iniciaron una investigación para averiguar su procedencia. Una vez en la finca, los agentes intervinieron todo el armamento y las piezas de artillería porque la propietaria no pudo documentar ni la posesión ni el estado en el que se encontraban. En el interior de la vivienda. también localizaron cartuchería, armas y otro tipo de proyectiles que no disponían de ninguna documentación.
En total, la Guardia Civil halló 13 piezas, dos grandes cañones del Ejército español, otros cinco pequeños, munición y diversas armas largas y cortas. Según Guardia Civil, algunas de ellas podían haber sido destinadas al tráfico ilegal. Por todo ello este jueves la dueña de la casa fue detenida y poco después quedó en libertad, a la espera de juicio. El armamento ha sido retirado de la finca entre ayer y hoy y llevado a un cuartel de la demarcación bajo custodia del Ministerio de Defensa.
Según fuentes cercanas al caso, el armamento comisado pertenecía al marido de la mujer detenida, fallecido hace más de un año. No sólo le gustaba coleccionar piezas, sino que incluso había encargado hacer réplicas. También era amante de la caza, pero las armas que utilizaba para ello ya habían sido entregadas a la Guardia Civil y dadas de baja tras su fallecimiento.
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