Colau propone una rebaja temporal del 50% de la T-Usual, la tarjeta de transporte de Barcelona, por la subida de precios
El consejero del Govern Jordi Puigneró tacha la propuesta de “electoralista” y avisa de que costaría 50 millones de euros
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha propuesto este miércoles rebajar temporalmente un 50% el precio de la tarjeta T-Usual, el título más utilizado, para ayudar a la “gente trabajadora” que viaja en transporte público ante el aumento del coste de la vida. “Trasladaré esta reflexión a las otras administraciones que tienen estas competencias”, ha dicho Colau en una entrevista de TV3, en la que ha celebrado las medidas aprobadas por el Gobierno para afrontar a la escalada de los precios.
Desde el Govern, mayoritario en la Autoridad Metropolitana del Transporte (ATM) el organismo que decide las tarifas del transporte, el vicepresidente Jordi Puigneró ha acusado a Colau de hacer “electoralismo” y le ha preguntado si dispone de los 50 millones de euros que costaría el descuento. La T-Usual tiene una validez de un mes y un precio de 40 euros en la primera corona metropolitana, la Zona 1, que corresponde a Barcelona y su entorno inmediato.
A primera hora de la mañana la alcaldesa de Barcelona ha dicho que quiere ser “prudente”, puesto que la decisión no depende solo del Ayuntamiento. Colau ha destacado que al igual que el Gobierno bonificará parte del precio de los carburantes, debería hacerlo con el transporte público en un momento de emergencia climática, apuntando que el coste de la rebaja podría financiarla el ejecutivo de Pedro Sánchez con ayudas.
La decisión sobre las políticas tarifarias depende de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM), de la que forma parte también la Generalitat. La entidad ha respondido advirtiendo del elevado coste que tendría este descuento y que no depende de una sola administración.
En una respuesta rápida, la ATM ha enviado a mediodía un breve comunicado: “Esta propuesta es de naturaleza política y no técnica. Corresponde a las administraciones consorciadas determinar su eventual implantación”. El texto finalizaba: “En cualquier caso, es una medida con efectos operativos muy importantes que habrá que evaluar y cuantificar. Obviamente, la ATM no puede aplicar esta medida sin la compensación económica oportuna.”
Más tarde ha comparecido Puigneró y ha recordado que la subida del precio de la energía también ha impactado en el transporte público y que las tarifas llevan dos años congeladas. “Pediría a Colau que cuando haga estas propuestas lo haga con un cheque”, ha dicho y le ha reprochado no hacer la propuesta en el ámbito de la ATM sino en televisión. “Que nos diga si se costeará vía presupuesto municipal o del gobierno, porque hemos calculado que tendría un coste de 50 millones de euros”, ha avisado. “No es el momento de propuestas electoralistas, sino responsables, de consenso y razonadas”, ha pedido.
El primer mes de guerra en Ucrania ha tenido un notable impacto sobre los precios. La inflación ascendió en marzo un 9,8% respecto al año pasado, según el dato adelantado del Instituto Nacional de Estadística, frente al 7,6% de febrero. Es la cifra más alta desde mayo de 1985.
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