La nueva presidenta de Modacc pone el foco en la sostenibilidad

La nueva presidenta del Modacc, Arancha Algás, va a poner el foco del Clúster catalán de la Moda en acompañar a las empresas en su camino hacia la sostenibilidad, “un reto que es difícil de abordar porque tiene muchas áreas y muchos focos”, que van más allá de usar algodón orgánico, apunta. Directora de la firma infantil Bóboli, junto a su hermana Mónica Algás, va a centrar su año de presidencia de esta asociación en el impulso de un departamento de sostenibilidad, que junto a Acció y el sello B Corp, ayudará a las empresas a hacer un diagnóstico de cómo virar hacia una producción más sostenible. Además, otro de los retos es la transformación digital, que necesita una aceleración, tal como ha evidenciado el cierre de comercios por la pandemia de coronavirus.

Justo unos días antes del estado de alarma, Modacc puso en marcha un departamento para ayudar a las empresas asociadas, que son casi 150 con 6.000 trabajadores y 2.000 millones de euros de facturación agregada, a introducir la sostenibilidad en su cadena de producción y venta. Después de este parón, la necesidad de aportar nuevos valores a las marcas se hace más necesario. Pero Algás tiene claro que “el camino de la sostenibilidad no se puede hacer de un día para otro”, sino que es un proyecto largo.

Para empezar, este departamento va a hacer un diagnóstico de unas cuantas empresas asociadas junto a la agencia Acció de la Generalitat y la certificación B Corp, que garantiza el impacto positivo social y ambiental de las empresas que lo consiguen. La idea es formar a una persona dentro de Modacc, que pueda ayudar a otras empresas interesadas a hacer el mismo camino. “Nos ilusiona y creemos que puede ser de mucha utilidad” para las empresas, dice Algás sobre el proyecto.

Pero esto empieza en un momento complejo. “La pandemia ha sido un desastre absoluto para todas las empresas, hemos estado tres meses cerrados”, reconoce resignada Algás, que también apunta que “la reapertura ha sido mucho mejor” de lo que esperaban. “Aun no somos capaces de valorar exactamente el alcance de la crisis”, admite, porque están pendientes de la recuperación de la normalidad y del turismo. “En Barcelona, todos dependemos más de lo que nos creemos del turismo”, dice, “por toda la riqueza que crea”. Por eso, espera que la recuperación del sector no llegue hasta la primavera-verano de 2012.

En esta recuperación, asegura que “la transformación digital es todavía más urgente” y reclama “líneas de ayuda muy claras y enfocadas a proyectos que ayuden a las empresas en la transformación digital”. Uno de los retos que tienen por delante es transformar el showroom que celebran en cada edición de la 080 Barcelona Fashion en un modelo virtual. “La nueva pasarela tiene unas ideas muy nuevas y rompedoras, que pueden dar un giro a la 080”, defiende. Para el salón comercial, que será como la pasarela del 14 al 17 de septiembre, van a apostar por lo digital apoyándose en “alguna plataforma existente” donde se puedan ver los productos y los fabricantes y los compradores puedan encontrarse.