La empresa reclama más sanidad

“La desescalada ha de ir acompañada de más inversiones públicas en sanidad”, demandó el presidente del Círculo de Economía, Javier Faus, en las jornadas telemáticas organizadas por la entidad el pasado jueves ante la imposibilidad de celebrar en plena crisis sanitaria las que los últimos años celebraba en Sitges y que este año tenían que trasladarse a Barcelona. “No cometamos otra vez los mismos errores que en 2008. [...] Reforcemos la inversión en conocimiento y protejamos el gasto sanitario”, remachó al final Cristina Garmendia, exministra y vicepresidenta de la institución.

El Círculo recetaba así sus fórmulas para salir de la crisis, en las que también incluía otras más conocidas: unir los proyectos más pequeños para darles envergadura e impulsar la iniciativa público-privada. Pero en esta ocasión, la pandemia del coronavirus mandaba y sus recetas iban de la mano de la comunidad científica, y no tanto de la empresarial. “Las infraestructuras se pueden prever con tiempo y una de nuestras limitaciones son el espacio”, afirmó en la última de las sesiones Àlex Soriano, jefe del servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Clínico de Barcelona, pendiente desde hace años de una ampliación. En ese momento, la audiencia telemática del acto convocado por el Círculo estaba en 340 espectadores, muy lejos del pico de 650 personas en audiencia que habían escuchado las críticas de la vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, al pacto entre PSOE, Podemos y Bildu sobre la derogación de la reforma laboral. “Sería absurdo y contraproducente abrir un debate de esa naturaleza”, dijo, en la que se convertiría en la frase de la convocatoria.

Una hora después, Soriano, junto al virólogo Carlos Payá, emprendedor en el campo de la biotecnología, defendía el papel de la medicina para salir de esta crisis y de las que vendrán con casos diferentes “en cinco o en diez años”. “La ciencia y la medicina es lo más importante que tenemos ahora. Invertir en innovación, en sanidad, en medicina... y aprender de los errores cometidos, sobre todo en Estados Unidos”, defendió Payá, confinado en su domicilio en San Francisco. Soriano reivindicó el papel de las pequeñas biotecnológicas en la actual crisis para encontrar soluciones contra la covid-19 frente al papel que han tenido las tradicionales y grandes farmacéuticas.

Garmendia defendía para España mayor colaboración entre instituciones y criticó el “desaprovechar recursos en pequeños proyectos”. Faus optó al final por reclamar recuperar la soberanía perdida “en productos sanitarios industriales e invertir en infraestructura clave”. Los dos expertos asentían con la cabeza, pero de momento apostaban por el aislamiento o el uso de la mascarilla para rebajar los casos de contagio. “La próxima será diferente”.