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¿Dónde están los 1.232 profesores de refuerzo de la Junta de Andalucía?

Interinos y sindicatos denuncian que el Gobierno andaluz no ha aumentado las plazas vacantes ofertadas pese a que prometió mantener los docentes extra de la pandemia con fondos propios

Profesores Junta de Andalucía
La consejera andaluza de Desarrollo Educativo, Patricia del Pozo, en un centro de San Juan de Aznalfarache (Sevilla), el pasado 5 de octubre.
Eva Saiz

Aroa Castillo es profesora interina de Infantil. Desde que comenzó el curso escolar, los martes y jueves no se despega del ordenador. Son los días en los que en la plataforma SIPRI (Sistema de Provisión de Interinidad) de la Consejería de Desarrollo Educativo y FP de Andalucía se publican las vacantes. No contaba con estar en esta situación a mediados de octubre porque la Junta había anunciado que este año incorporaría 1.235 docentes más como refuerzos pedagógicos, los antiguos refuerzos covid, solo que sufragados por las arcas autonómicas. Más de un mes y medio después de su aprobación en Consejo de Gobierno, los docentes y los sindicatos denuncian que esas plazas se han difuminado entre la oferta ordinaria para cubrir el resto de vacantes. Entienden que no se han sumado nuevos profesores, sino que se han utilizado como parte del reajuste ordinario de la plantilla en el arranque de curso. Los interinos han traslado su malestar a la consejera, Patricia del Pozo, a través de una carta y han convocado una manifestación en Sevilla el 26 de octubre para visibilizar su situación.

“Nos dimos cuenta de que no estaban saliendo plazas de refuerzo pedagógico porque la oferta en el SIPRI era la habitual en otros años y no había más cantidad”, explica Castilla. Los docentes no pueden distinguir qué puestos de los ofertados son para cubrir vacantes ordinarias y cuáles son de refuerzo pedagógico, porque no cuentan con un código específico, algo que sí ocurría en los años anteriores cuando su denominación estaba vinculada a los problemas de la pandemia, lo que dificulta aún más su rastreo. “La consejería alega que como entonces estaban financiados por fondos europeos era la forma de justificar el destino, como si no fuera necesario justificarlo por ser dinero de la Junta”, indica Carmen Yuste, responsable de acción sindical de USTEA.

La consejera de Desarrollo Educativo y FP, Patricia del Pozo, anunciaba a principios de septiembre que la Junta iba a mantener los 1.500 profesores de refuerzo “pese a no contar con financiación por la pandemia y perder casi 90.000 alumnos”, una cifra que finalmente se concretó en 1.235 en el acuerdo del Conejo de Gobierno del pasado 5 de septiembre con un coste de 62.183.766 euros. A finales de ese mes y a requerimiento de los sindicatos de enseñanza, confusos porque en la oferta de plazas no se apreciaba el incremento correspondiente a esos 1.235 docentes comprometidos y se habían ofertado las plazas habituales, la consejería reconoció que en los más de 1.700 puestos ofrecidos durante ese período estaban incorporados los profesores de refuerzo pedagógico.

“Una vez analizados los datos de las convocatorias de SIPRI y con la información que manejamos, entendemos que las 1.235 plazas no pertenecen a ningún refuerzo educativo, sino que no son más que la dotación ordinaria que necesitan los centros educativos”, señala Sandra Fernández, secretaria de Enseñanza de UGT en Andalucía. En USTEA han calculado que las vacantes convocadas en el sistema SIPRI a lo largo del pasado mes de septiembre entre infantil, primaria y secundaria ascienden a 1.619. “Si de allí descontamos los 1.235 que serían de refuerzo, resultaría que este año el reajuste por el arranque del curso escolar sería solo de 384, cuando cada septiembre se ofertan entre 1.500 y 2.000 vacantes que se tienen que abrir porque se jubilan los profesores, hay excedencias, salen más matrículas de las previstas…”, explica Yuste, para refrendar la impresión de que esos refuerzos pedagógicos no son profesores extra sino que forman parte del reajuste habitual. “Como no hay código específico, no hay manera de rastrear cuál es cuál”, abunda.

Desde Desarrollo Educativo se asegura que los 1.235 profesores están ya trabajando y asignados y que se mantendrán todo el curso escolar en los centros, según las fuentes consultadas. “Hay que tener en cuenta que se ha estabilizado a 10.000 y que el porcentaje de interinidad es cada vez más bajo. Además, las circunstancias del inicio del curso cambian cada año”, sostienen en la Junta.

“Desde que se abrió la bolsa a inicios del presente curso, lo que ustedes habían anunciado no se ha cumplido. Las convocatorias han sido raquíticas (las últimas, prácticamente nulas), siendo altamente llamativo ya que nos encontramos al comienzo del curso escolar”, indican los profesores en la carta remitida a la consejera a la que ha tenido acceso este diario. “Teniendo como referencia los últimos 10 años, es inaudito asistir a esta situación que nunca se ha dado en estas fechas (alrededor de 600 puestos por convocatoria durante otros cursos lectivos)”, añaden. Consideran que se “está poniendo en peligro la calidad educativa que prometen dar de cara a los medios de comunicación, algo que, indudablemente, no se corresponde con la realidad” y reclaman que “se cubran los puestos requeridos/necesarios y se convoquen/adjudiquen los refuerzos y puestos que en su día se prometieron dar”.

Recursos para parchear ratios ilegales

A las cuentas que no terminan de cuadrar también se suma el malestar por los criterios de asignación de esos profesores de refuerzo. La consejería ha distribuido a esos docentes para desdobles en grupos en primaria y cuarto de la ESO, y en el caso de los profesionales de orientación -maestros de pedagogía terapéutica y audición y lenguaje- se han destinado a centros con altas ratios de alumnos con necesidades educativas especiales y en las aulas específicas de secundaria. “Es el eufemismo para no decir ‘ratios abusivas e ilegales’”, alega Yuste. “Además se hace en sexto de primaria y cuarto de ESO, es decir en los cursos de final de etapa, para no tener que mantener el desdoble el próximo curso. Si se hubiera hecho en quinto de primaria o tercero de ESO, el desdoble se tendría que haber mantenido en el siguiente. Se trata de parchear ratios abusivas e ilegales de manera temporal”, abunda.

El acuerdo del Consejo de Gobierno en el que se aprueba la dotación de los 1.235 profesores de refuerzo pedagógico explicita que este cupo de nuevos docentes se “dedicará a tareas de refuerzo y apoyo con el objetivo de mejorar el rendimiento académico del alumnado y la reducción del absentismo”, unas funciones en las que, de acuerdo con las fuentes de la Junta consultadas, abarcan los desdobles: “Cuando desdoblas haces un esfuerzo porque creas un aula más, eso es un refuerzo”.

Gonzalo Pascal, nombre supuesto, lleva seis años como profesor interino en secundaria. A estas alturas del curso hace un año ya estaba trabajando como docente de refuerzo covid. “No solo no sabemos cuáles son las plazas de profesor de refuerzo, sino que las vacantes y sustituciones que se ofertan son mucho menores que las de años anteriores”, se queja. Esta es una percepción generalizada entre los docentes, pero que se explica en que los procesos de estabilización han reducido el número de vacantes para interinos. Yuste añade “el abuso de prácticas como el llamado 2x1 en primaria, profesorado especialista al que se asignan tutorías, y los horarios a 21 horas lectivas en secundaria, ambas permitidas como excepción, pero que cada vez es más la norma”.

Desde la consejería se indica que en lo que a sustituciones se refiere —que no tienen que ver con vacantes, la categoría en la que se engloban los refuerzos pedagógicos y que engloba las plazas que no tienen dueño―, este mes de septiembre se han incrementado considerablemente: se sustituyeron 63.207 jornadas, 5.262 más que en 2022. “También es cierto que la plantilla ha crecido en 6.800 profesores, y lógicamente hay más sustituciones”, apostillan las fuentes consultadas.

Pascal también trabaja en la Universidad a media jornada, con lo que su situación personal de momento es holgada. Castillo lleva varias semanas sin poder conciliar el sueño. “Se me acabó el paro en agosto, pero como, de acuerdo con las predicciones que se hacen todos los años, en septiembre siempre salen unas 900 plazas de vacantes, no busqué trabajo para no tener que dejarlo menos de un mes después porque contaba con incorporarme”. Este año para su categoría de infantil se han ofertado 202 plazas, de acuerdo con los datos facilitados por la Junta. En los foros de interinos se calcula que solo 18 corresponderían a profesores de refuerzo, por descarte respecto de otro tipo de vacantes. “Y además sin etiquetar, por lo que no podemos saberlo al 100%”, lamenta.

Quien ya ha empezado a buscar trabajo en un sector distinto al de la docencia es Lidia Valdés (nombre supuesto), interina de Infantil. “Cuando vi el anuncio de la Junta, tuve esperanzas, pero no se han ampliado los puestos y encontrar algo en la privada es complicado si no tienes padrino”, indica. “Llevo 13 años estudiando y cuatro oposiciones a mis espaldas, siento que estoy desperdiciando mi vocación”.

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Sobre la firma

Eva Saiz
Redactora jefa en Andalucía. Ha desarrollado su carrera profesional en el diario como responsable de la edición impresa y de contenidos y producción digital. Formó parte de la corresponsalía en Washington y ha estado en las secciones de España y Deportes. Licenciada en Derecho por Universidad Pontificia Comillas ICAI- ICADE y Máster de EL PAÍS.

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