Un incendio daña la cúpula del Planetario de Pamplona, una de las más grandes de Europa
Las llamas se prendieron sobre las 7.00, momento en el que no había nadie en el edificio, por lo que no ha habido víctimas
Un ciudadano ha llamado a Policía Municipal de Pamplona pasadas las 7.00 para advertir sobre el humo que salía de la cúpula del Planetario de Pamplona. Los servicios de emergencia han acudido de inmediato, pero hasta las 10.30 horas los Bomberos de Navarra no han podido dar por controlado el incendio. La instalación estaba cerrada en ese momento y, afortunadamente, el fuego no ha causado daños personales, pero sí ha afectado de forma importante a la cúpula, el elemento más identificativo del inmueble. Se están investigando las causas de este incendio, que ha comenzado en la sala de proyección, en la denominada Sala Tornamira. Este es el espacio en el que se encuentra la cúpula, de 20 metros de diámetro y que es una de las mayores de Europa. A través de ella se pueden visualizar alrededor de 9.000 estrellas. La sala se encuentra en la primera planta del inmueble y, además del proyecto central, tiene otros 50 proyectores de transparencias y veinte de efectos especiales controlados mediante sistemas informáticos.
Todo ha quedado quemado, pero lo que más duele es la pérdida de la cúpula. “El desastre es completo porque es un poco el alma, el joyero que denominaron los arquitectos que hicieron el edificio. Era una especie de joyero de estrellas y se ha calcinado, se ha fundido directamente por las altas temperaturas”, ha expresado Javier Armentia, quien desde hace treinta años y hasta este pasado octubre había dirigido la institución. Ha sido el fin del planetario después de 31 años, ha apuntado, pero toca repensar el Planetario del futuro porque quienes trabajan en él siguen con ganas de mostrar “las 9.000 estrellas, acudir al inicio de la historia del universo, viajar por el espacio y con los nuevos descubrimientos... Las ganas que tenemos de seguir contando estas cosas la mantenemos todos quienes trabajamos allí”.
No obstante, antes de repensar el proyecto a futuro, toca conocer con exactitud los daños, ha afirmado en SER Navarra la consejera de Cultura, Rebeca Esnaola: “En cuanto a daños materiales, parece que la sala de proyecciones ha sido la gran afectada. Gracias a los drones de los que dispone Policía Foral se ha visto el estado de la cúpula, que es por donde ha empezado a salir el humo y parece que es uno de los espacios más dañados, pero habrá que ver el resto del edificio también en qué estado ha quedado. Los daños materiales, a priori, parecen cuantiosos, pero bueno, tenemos todavía que esperar un poquito para acceder al edificio y comprobar cómo está y conocer o intentar averiguar el origen del fuego”.
Una vez se puedan cuantificar esos daños, trabajarán en un nuevo proyecto: “Primero vamos a conocer en detalle los daños materiales y vamos a ver los diferentes informes que se van a elaborar para ver en qué estado ha quedado la cúpula y el edificio y a partir de ahí iremos tomando las decisiones más adecuadas, pero siempre pensando en que el planetario es un edificio emblemático en nuestra ciudad y en nuestra región, que realiza una labor esencial en la divulgación científica y que así ha de seguir haciéndolo. En cuanto podamos, nos pondremos manos a la obra pensando en este nuevo planetario”. Mientras tanto, Esnaola ha garantizado que la programación científica continuará: “El equipo va a trabajar ahora en la reordenación de estas actividades en otros centros del Gobierno de Navarra o de NICDO o de entidades asociadas o con las que colaboramos. Lógicamente, las proyecciones no serán posibles, pero vamos a intentar que programas tan emblemáticos como Escuela de Estrellas, talleres, etc., se retomen”.
El Planetario de Pamplona se inauguró en 1993 y hoy en día forma parte de NICDO, la Sociedad Pública Navarra de Infraestructuras de Cultura, Deporte y Ocio. Su actividad principal es la divulgación científica y buena parte de sus proyecciones son luego reproducidas en otros planetarios a nivel internacional. El edificio, de ladrillo rojo, es característico del paisaje urbano local y destaca por su forma cilíndrica y un paralelepípedo que tiene proporciones áureas. Muy próximo a la zona hospitalaria, está ubicado en el Parque de Yamaguchi, una zona de jardines nombrada así en honor a la ciudad japonesa, hermanada con Pamplona.
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