El Congreso respalda la propuesta de rebajar a 0,2 gramos por litro la tasa máxima de alcohol en sangre

El Congreso ha respaldado este jueves a la propuesta de rebajar a 0,2 gramos el litro de alcohol la tasa máxima de alcohol en sangre permitida para todos los conductores y ha instado al Gobierno a implantar este cambio. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, adelantó la iniciativa el 12 de septiembre. “La sociedad está madura para este debate”, dijo. El grupo socialista la ha llevado a la Cámara baja como una proposición no de ley que ha sido validada por los partidos que apoyan al Gobierno, aunque con algunas pegas. Vox ha votado en contra y el PP, que no ha desvelado el sentido de su voto hasta el último momento, finalmente ha decidido abstenerse. El tope general actual es de 0,5 gramos por litro de sangre, por lo que la iniciativa supondría rebajarla en más de la mitad. En el caso de los conductores noveles y profesionales, la tasa máxima está ahora en 0,3. Suecia y Noruega, líderes mundiales en seguridad vial, ya han fijado la tasa para todas las personas conductoras es 0,2 gramos por litro.

La votación, en la que han participado 346 diputados, ha salido adelantes con 175 votos a favor, 138 abstenciones y 33 votos en contra. La idea del Ministerio del Interior, es incluir esta reforma en una modificación del artículo 20 del Reglamento General de Circulación, que establece las tasas de alcohol en sangre y aire espirado.

El diputado socialista Manuel Arribas Maroto, encargado de defender la propuesta en la sesión de este martes, enumeró una serie de noticias de accidentes de tráfico con conductores bajo los efectos del alcohol que destrozan a familias enteras. “Tenemos la responsabilidad de actuar porque no solo son titulares”, pidió a los diputados. “¿No les parece grave que en el primer semestre del 2024 el 56% de las personas implicadas en un accidente dieron positivo por alcohol?”, preguntó. “Este debate no es ideológico (...) Ha llegado el momento de ponernos en marcha porque numerosas entidades que trabajan por la seguridad vial, asociaciones y fundaciones, como Mapfre o Stop Accidentes, pero también colectivos, como la Guardia Civil, los Policías Locales, los enfermeros, los médicos, también nos piden que actuemos de inmediato y no podemos esperar más”, reclamó.

A pesar de mostrarse de acuerdo con la propuesta, la representante de Esquerra, Inés Granollers, incidió en que resultaba contradictoria e insistió en que la mejor medida es que la tasa de alcoholemia permitida sea cero. Lander Martínez Hierro, de Sumar, formación que está en el Gobierno con el PSOE, concedió que “la tasa cero sería la ideal”, aunque subrayó que la propuesta representa “un paso más” para acercarse a este objetivo.

Los populares cuestionaron que se pretenda hacer un debate serio y reclamaron la implantación de otras medidas para apoyarla, recogidas en una enmienda, como el refuerzo de las campañas específicas sobre los riesgos del alcohol al volante, un incremento de los mecanismos de sensibilización y que se definan estrategias concretas para los reincidentes, entre otras. “Los grandes asuntos requieren de grandes debates”, ha pedido Ángel Ibáñez Hernando, del PP. El partido de Santiago Abascal, que se mostró abiertamente en contra, consideró que se trataba de “una cortina de humo” para restringir derechos y recaudar con multas. Ángel López Maraver, de Vox, reclamó una reforma del Código Penal y consideró que se podría conseguir con educación y concienciación de la sociedad. También insistió en garantizar la libertad de quien conduce y de quien vende alcohol, quien vende alcohol, quien legisla y quien es víctima de un accidente. “Se trata de educar y concienciar a la sociedad para que desde la infancia sepan que no se puede conducir con alcohol”, insistió. “Proponen una tasa muy cercana al cero para confundir al usuario, pretenden hacer creer que se puede tomar una copa de vino, y cuando lo hagan, a pagar”.

La propuesta socialista destaca que el alcohol constituye uno de los principales factores de riesgo durante la conducción de vehículos y se ampara en una petición expresa realizada por distintas organizaciones sociales y científicas. Un 32,7% de los conductores fallecidos en 2023 tenían una tasa de alcoholemia positiva, según el último informe del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias forenses. . “A partir de 0,3 g/l y especialmente hasta 0,5 g/l (que son las tasas actuales en España) el riesgo de accidente se puede multiplicar por dos o incluso por tres. Hay motivos científicos para defender una reducción de la tasa de alcoholemia de forma generalizada y para todos los conductores de 0,5 g/l a 0,2 g/l”, defienden los socialistas.

Otra de las argumentaciones es la eliminación de los problemas de comunicación y confusión que supone tener normas diferenciadas para conductores noveles y profesionales. Para demostrar el apoyo ciudadano, inciden en que un 72,3 % de los españoles manifiestan un nivel de apoyo alto a una tasa de cero, citando la encuesta europea ESRA3, realizada en 29 países. El valor medio del apoyo europeo a esta medida es de un 65,8%.