Ayuso condiciona su reunión bilateral con Sánchez en la Moncloa a que no se hable de financiación

Desde primera hora de la mañana, todos los ojos de la cumbre del PP estaban puestos en Isabel Díaz Ayuso después de que Génova se desmarcase este jueves con rapidez del llamamiento de la presidenta de la Comunidad de Madrid a rechazar la invitación institucional de Pedro Sánchez a La Moncloa. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha rebajado el tono este viernes, después de que los dirigentes autonómicos del PP hayan evitado sumarse a la lid marcada por la baronesa madrileña. En su comparecencia en el foro autonómico organizada por la dirección del PP, Díaz Ayuso ha evitado hacer de nuevo una apelación directa a sus compañeros y tampoco ha confirmado si se entrevistará con el presidente del Gobierno. “Celebro este compromiso de no hablarlo en ninguna reunión bilateral para ser engañados”, ha explicado Díaz Ayuso tras el acuerdo suscrito entre los barones para no negociar por separado sistemas de financiación autonómica bilaterales. Pero no se ha quedado ahí: “Por supuesto que todos los presidentes y todas las comunidades autónomas tenemos problemas singulares y claro que quisiera que esto fuera atendido en La Moncloa, pero celebro que todo aquello que tenga que ver con la caja común solo se hable en un foro leal, con luz y taquígrafos y con todos juntos”.

En privado, fuentes del gabinete de Ayuso se mostraban reacios a primera hora de la mañana a que los presidentes del PP acudiesen a La Moncloa, incluso considerando el carácter institucional de la cita, por la excepcionalidad del “contexto” provocado por los últimos pactos de Sánchez. “Con la que hay montada”, señalan dichas fuentes, que recuerdan que Ayuso sí aceptó verse con Sánchez en otras circunstancias al tiempo que soslayan que entrevistarse con el presidente tras el pacto con PSC y ERC supondría legitimar su acción. Tras las palabras de Ayuso, que ha dejado en el aire su asistencia a La Mocloa, fuentes de su equipo explican que, por ahora, no hay nada decidido y que una de las condiciones para verse con Sánchez podría ser pactar un orden del día en el que quede descartado tratar sobre la financiación autonómica. Ya por la tarde, en una entrevista en La Sexta a cuenta de otro acto, Díaz Ayuso ha sido preguntada expresamente si responderá o no a la llamada de Sánchez: “Habrá que verlo, en fin, es que no se trata de decir ‘no’ al presidente de un Gobierno, se trata de decir que ‘así no se puede”.

El cambio de marcha de Díaz Ayuso ha llegado hoy después de que este jueves sí se pronunciase tajante: “Mientras no haya una conferencia de presidentes, no podemos sentarnos ante esta política mezquina a negociar nada”, subrayó la presidenta de la Comunidad de Madrid. “Yo le pido a los presidentes autonómicos que, si hay una reunión, sea para ir todos juntos porque este Gobierno va a intentar sobornarnos uno a uno en la Moncloa”, agregó.

Los presidentes autonómicos no han secundado a Díaz Ayuso y el formato del acto ha impedido que se pronuncien los periodistas pregunten sobre este tema porque se ha negado el turno de palabras a los medios de comunicación. Después de la intervención del líder popular, Alberto Núñez Feijóo, los barones han ido desfilando por dos atriles en comparecencias simultáneas en las que han reforzado el mensaje del líder. Todos se han mantenido en el guion diseñado por Génova para exhibir músculo y forzar el mensaje de unidad contra la financiación singular de Cataluña.

Pero hay quien sí se ha referido expresamente a la invitación de Sánchez. “Vamos a actuar con responsabilidad y con respeto institucional y el respeto institucional significa que nosotros vamos a hablar”, ha expresado el presidenta de la Junta, Juan Manuel Moreno. “Y Andalucía está dispuesta a dialogar con todo el mundo, y por supuesto a dialogar con el presidente del Gobierno. Pero vamos a hablar de lo que nos importa a los andaluces y a los españoles, que es la igualdad entre españoles y la solidaridad entre españoles, no vamos a entrar en ninguna subasta, ni vamos a blanquear las cesiones al independentismo para mantenerse en el poder”, ha remachado.

Hay una petición en la que tanto el PP como Génova coinciden: la convocatoria de una Conferencia de Presidentes. Sánchez ha asegurado que se celebrará en Cantabria, pero su intención es hacer antes una ronda bilateral con todos y, además, centrar esa cita en las políticas de vivienda.

“Decoro y valencianía”

Una de las comunidades autónomas con más problemas de financiación autonómica con este modelo es la Comunidad Valenciana. Su presidente, Carlos Mazón, ha pedido que se reforme el sistema de financiación autonómica a uno donde “no haya ganadores ni perdedores”. Mazón, al igual que otros compañeros de su partido, ha señalado que una desigualdad en la financiación supone una desigualdad “en servicios sociales, sanidad y educación”. Ha concluido su intervención pidiendo “decoro y valencianía” al PSOE y exigiendo un fondo transitorio de nivelación, que sea equitativo y transparente. “La negativa a esto no tiene justificación ni defensa”, ha sentenciado.

Ha utilizado el mismo argumento su compañera María Guardiola, presidenta de Extremadura, ha acusado a Sánchez de querer “convertir a España en los juegos del hambre” en la que los presidentes “se lancen a la arena buscando un poco de financiación”. Guardiola ha reprochado que el acuerdo de financiación singular “responda a intereses particulares”. “No se puede mercadear con la vida y los recursos de los extremeños”, ha señalado tajante Guardiola. Con un mensaje a los suyos: “Es el momento de la unión y la igualdad”.