Montero asegura que la financiación singular puede extenderse a otras comunidades autónomas

La vicesecretaria general del PSOE y vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, se ha empleado hoy a fondo en explicar lo que no es el acuerdo fiscal para Cataluña más que en detallar en qué consiste. Y lo ha hecho ante un foro de dirigentes curtidos que saben que la disciplina es un tesoro como es la Interparlamentaria del PSOE de Andalucía a la que pertenecen los diputados, senadores, parlamentarios autonómicos y europarlamentarios andaluces. Montero, que no ha aludido en ningún momento a la convocatoria del 41º Congreso Federal el próximo noviembre en Sevilla, se ha quejado de que “nadie se ha leído” el acuerdo entre ERC y el PSC que ha permitido la elección de Salvador Illa como presidente de la Generalitat de Cataluña. “Vamos a hacer compatible que Cataluña puede tener una financiación singular como lo pueden tener otros si quieren tenerla”, ha asegurado la vicepresidenta y vicesecretaria general del PSOE.

Tanto Montero como el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, se han esforzado en revestir de normalidad el pacto fiscal para Cataluña que cuando se culmine supondrá la salida de Cataluña del sistema de financiación que rige para las comunidades del régimen común (todas salvo País Vasco y Navarra) y que implicará que la Agencia Tributaria Catalana recaude todos los impuestos. También consagra el principio de ordinalidad, según el cual Cataluña no puede recibir menos de lo que aporta al conjunto. Los socialistas niegan que se trate de un concierto económico como el de Euskadi, una descripción que sí emplea ERC.

Esta propuesta ha alarmado no sólo a las comunidades gobernadas por el PP, sino también a las gobernadas por el PSOE como Asturias y Castilla-La Mancha. En el resto de las autonomías donde el PSOE está en la oposición, también se han alzado voces con distintas intensidades en contra del acuerdo. No es el caso de Andalucía, la federación más numerosa del PSOE, donde su secretario general, Juan Espadas, está totalmente alineado con el Gobierno de Sánchez. “La investidura de Salvador Illa en Cataluña, que termina con muchos años de gobiernos independentistas y que comienza hablando de Cataluña en España y de conceptos como el de financiación singular y solidaridad interterritorial al mismo tiempo, abre un escenario nuevo a un debate sobre el modelo de financiación autonómica bloqueado y en el que el PP está más cómodo en la confrontación que en el acuerdo. Andalucía debe aspirar a las mismas cotas de autogobierno que Cataluña, eso es nuestro estatuto”, ha dicho Espadas.

Montero ha defendido la apuesta que el Gobierno presidido por Pedro Sánchez ha hecho por Cataluña desde el mismo momento en que Illa fue designado candidato a la Generalitat. El propio Sánchez le debe su investidura a las formaciones independentistas, aunque la legislatura de incierta duración va a trompicones. La responsable de Hacienda ha reconocido que esta apuesta “ha sido incomprendida incluso” por dirigentes socialistas, pero que a su juicio ha tenido “éxito político”.

Ha dicho Montero: “Aquí hay un acuerdo que aquí nadie se ha leído. Escucho cosas que no están en ese acuerdo, escucho lecturas interesadas por parte de los de siempre, son erróneos los marcos mentales que intentan trasladar, intentan crear enfrentamiento con Cataluña, utilizar Cataluña solo para confrontar, para trasladar no sé qué privilegio”. Según la vicepresidenta primera, cuando se han aprobado acuerdos de financiación para Canarias o Baleares nadie hablaba de una financiación singular derivada de la insularidad, mientras que, según ella, el acuerdo con Cataluña pretende “compatibilizar lo que es común con lo que es particular en cada territorio y eso ha existido siempre”.

Montero ha pedido a los diputados andaluces que se lean, además del acuerdo en Cataluña, el Estatuto de Autonomía para Andalucía donde hay preceptos que “son idénticos”. Cuando fue consejera de Hacienda de la Junta de Andalucía, la sevillana llegó a un acuerdo con IU y el PP en el que se sentaban las bases para un nuevo sistema de financiación. En ese texto se defendía una inyección de 16.000 millones de euros al sistema de los que 4.000 corresponderían a Andalucía. A este pacto parlamentario, al que el actual presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, dio su visto bueno, se agarra ahora Juan Espadas quien considera “falso” que el sistema de financiación haga perder oportunidades a Andalucía, “sino la gestión nefasta de Moreno”. El PSOE andaluz, ha dicho, reclamará un “sistema justo” para Andalucía. El secretario general del PSOE andaluz, muy cuestionado internamente, ha lanzado varias puyas a los críticos a los que ha acusado de “entrar de cabeza en el relato mentiroso del PP”. Y en tono advertencia ha comentado: “O estamos o no estamos. No se puede estar en misa y replicando. Estamos en un proyecto colectivo”.

Solo la expresidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha pedido intervenir al término de la intervención de Espadas y Montero. Poco asidua a las reuniones internas, Díaz ha defendido el acuerdo de 2018 en el Parlamento andaluz que “no tiene nada que ver con el planteamiento de ERC”.