Detenido en Benalmádena el líder de una banda motera incluido por Europol en la lista de los más buscados

La Policía Nacional ha detenido en Benalmádena (Málaga) al líder de la banda motera MC Comanches en España, buscado por su presunta implicación en una tentativa de asesinato en Rumanía, según ha informado este sábado el Ministerio del Interior. El fugitivo, que había sido catalogado por Europol como high value target (objetivo de alto valor, definición utilizada en la jerga policial internacional para referirse a los delincuentes más buscados), había heredado presuntamente el liderazgo de una organización criminal de narcotráfico asentada en la Costa del Sol después de que el anterior cabecilla fuese detenido a finales de 2023 en Marbella. En el domicilio del arrestado se ha encontrado un arma corta de fuego, 32 cartuchos, un machete, un hacha y documentación falsa.

La caída del líder motero se ha producido en el desarrollo de una operación abierta en 2023 para investigar a los responsables de la banda MC Comanches, a la que se consideraba integrada en una red de narcotráfico. Se dedicaban, presuntamente, a transportar estupefacientes en furgonetas desde España hasta el centro y el norte de Europa. Aquella investigación derivó en el arresto, a finales del año pasado, del entonces cabecilla del grupo, sobre el que constaba una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) por parte de las autoridades alemanas. Se le consideraba “directamente vinculado al tráfico de drogas”, según ha explicado la Policía Nacional en una nota. Arrestado en Marbella, fue entregado a la justicia de Berlín, pero antes de salir de España supuestamente tuvo tiempo de dejar el control de sus negocios ilícitos a otra persona que antes había liderado otra banda motera, Hells Angels.

Esa segunda persona pasó entonces a ser investigada también por la Policía. Al ser identificado, los agentes descubrieron que contra ella también existía una OEDE. En este caso, impulsada por las autoridades de Rumanía, que relacionaba al presunto cabecilla con un delito de tentativa de homicidio en aquel país. De hecho, Europol lo había catalogado por estos hechos como un objetivo de alto valor. Las posteriores pesquisas permitieron averiguar que vivía en la Costa del Sol y, en concreto, en la localidad de Benalmádena, donde no solo había fijado su residencia sino que desde allí también “coordinaba el transporte de droga hacia Europa”.

Además de la colaboración de las policías de Alemania y Rumanía durante las pesquisas, el operativo desplegado para proceder a su detención contó con la participación de miembros de los Grupos Operativos Especiales de Seguridad (GOES), especializados en el arresto de delincuentes potencialmente peligrosos. Tras su captura, los agentes registraron la vivienda y también la sede de una sociedad que había creado recientemente cuyo objeto social era el alquiler de vehículos. En ambos lugares se encontraron las armas y varios terminales telefónicos, así como material informático y documentación falsa a nombre de una tercera persona que era utilizada por el investigado. Además del delito de tentativa de asesinato en Rumanía, se le considera presunto responsable de los delitos de tenencia ilícita de armas y falsedad documental.

La presencia en la Costa del Sol de integrantes de organizaciones moteras vinculadas con el tráfico de drogas y otros delitos es habitual y cada año se desarrollan varias operaciones policiales para su desarticulación. En noviembre del año pasado, por ejemplo, cayó un integrante de la banda motera de origen danés Bandidos que formaba parte de un grupo criminal dedicado a supervisar y financiar la compra de hachís que luego se introducía por carretera en Dinamarca, donde también se distribuía. Y en marzo otro motero, esta vez de la banda Satudarah, fue también detenido en Mijas después de fugarse de su país —Dinamarca— condenado por apuñalar a tres personas en una discoteca.