El PSOE expulsa a tres concejales por dar una alcaldía a Vox con una moción de censura al PP
Los ediles socialistas de Villabrágima se alían con los ultras en una moción de censura
El PSOE de Valladolid ha echado del partido a sus tres concejales de Villabrágima (Valladolid, unos 1.000 habitantes) que han pactado con Vox una moción de censura para echar de la alcaldía al PP para entregársela a un edil del partido ultra que ya fue alcalde de este pueblo. Los socialistas de Castilla y León han fundamentado su línea política en atacar los pactos del PP con Vox, por lo que el movimiento de la citada localidad vallisoletana ha supuesto la expulsión fulminante de los concejales que han pactado con la formación de Santiago Abascal. La alcaldía recaerá en Víctor Arce, que antes de entrar en Vox fue durante ocho años de regidor por el PSOE, y ocupará así el puesto que aún ocupa Noelia García. Los dos representantes de Vox se van a desvincular de su partido y de este modo la corporación municipal quedará en manos de cinco concejales no adscritos, con tres expulsados del PSOE y los dos rebeldes de Vox, contra los cuatro del PP.
La jugada lleva meses cuajándose y no contaba con el apoyo de las direcciones de los respectivos partidos. Las pasadas elecciones municipales dieron el Consistorio al PP y a sus cuatro ediles frente a los tres concejales socialistas y los dos de Vox. Los conservadores consiguieron la alcaldía para Noelia García, en minoría, pero esta apenas ha aguantado un año al frente del pueblo tras la pinza ejecutada por sus adversarios. Los socialistas y Vox ya habían impedido que prosperaran iniciativas del PP al unir sus votos y tienen pactado llevar a cabo la moción de censura anunciada el próximo 21 de febrero. Entonces se votará en el Pleno y, salvo cambio drástico, Víctor Arce (Vox) recibirá el cargo de primer edil. Arce comenzará así su tercer mandato en Villabrágima, donde ya fue alcalde durante ocho años (2007-2015) aunque bajo las siglas del PSOE.
El secretario de Organización socialista de Valladolid, Francisco Ferreira, ha condenado el movimiento y ha anunciado la expulsión inmediata de los tres concejales, todo conforme a los estatutos de la formación. “Se han vulnerado e incumplido los acuerdos y decisiones adoptados por los órganos de dirección del partido, ya que el PSOE nunca pactará con la ultraderecha en ninguna institución”, ha insistido Ferreira, quien recalca que solo el PP, como en la Junta de Castilla y León, forma pactos con la ultraderecha.
El líder socialista en Castilla y León, Luis Tudanca, se ha expresado así en redes sociales: “A la extrema derecha se le planta cara. Punto”. Los dos concejales de Vox trataron de descabalgar al PP, pero su formación se lo impidió, de modo que esta misma semana se han desvinculado al partido para proceder a la alianza con los exsocialistas y cambiar el rumbo político de Villabrágima. Por tanto, la localidad la gobernarán cinco representantes no adscritos, sin vinculación alguna a partidos.
Según la versión de Vox, la moción de censura no lleva su firma, ya que los dos ediles presentaron este martes un escrito por el que informaban de su pase al grupo de “no adscritos” del consistorio. Fuentes del Ayuntamiento han informado a Efe de que el escrito de moción de censura se registró antes que este cambio de condición de los ediles, por lo que la moción sí que lleva la firma de los dos concejales de Vox y la de los tres del PSOE.
La actual alcaldesa, Noelia García, asegura el pueblo ha reaccionado “muy mal” a esta moción, que cree que ha sido percibida como una “estafa y una traición” a los votantes de ambas formaciones. La alcaldesa, que ha dado así por “rotas” todas las vías para buscar una solución antes de que se debata esta moción de censura, ha indicado que se irá a la oposición “con la cabeza alta” después de “muchos años de trabajo por el pueblo”, como su último proyecto de una residencia de mayores que, a la postre, ha sido el detonante de esta moción de censura, ha explicado. Por su parte, el presidente del PP de Valladolid, Conrado Íscar, ha tachado este pacto entre PSOE y Vox que arrebatará la alcaldía del municipio a los populares como el de la “vergüenza”; “es el todo vale y, tristemente, se ha producido algo que llevaban amenazando meses”, ha expresado a los medios de información.
La noticia se ha confirmado apenas dos días antes de que este sábado los agentes sociales, los sindicatos, los partidos de la oposición y más de 100 entidades sociales vayan a participar en una manifestación en Valladolid contra las políticas de la coalición PP-Vox en la Junta. El presidente de la Diputación vallisoletana, Conrado Íscar (PP), ha lamentado el “todo vale” de la moción de censura que planeaba sobre el pueblo tras estos meses de mandato en minoría de Noelia García, pues la oposición había votado negativamente al proyecto de una residencia de ancianos en el municipio y había mostrado sus coincidencias contra García. Íscar ha definido el acuerdo como “pacto de la vergüenza” y ha atacado a Óscar Puente, secretario general del PSOE en Valladolid y ministro de Transportes, preguntándole “qué le parece el apoyo a Vox” de sus excompañeros de formación.
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