_
_
_
_

La Audiencia de Sevilla condena a seis años de prisión al exdirectivo de la Junta que pagó prostíbulos con dinero público

Fernando Villén y la exresponsable financiera de la fundación Faffe Ana Valls son condenados por malversación y falsedad

Fernando Villén, exdirector de la desaparecida Fundación Andaluza Fondo Formación y Empleo (Faffe), en los juzgados sevillanos en 2018.
Fernando Villén, exdirector de la desaparecida Fundación Andaluza Fondo Formación y Empleo (Faffe), en los juzgados sevillanos en 2018.PACO PUENTES (EL PAIS)
Javier Martín-Arroyo

La Audiencia de Sevilla ha condenado a seis años de cárcel al exdirector de la desaparecida fundación Faffe Fernando Villén por haber pagado 32.556 euros en prostíbulos con sus tarjetas oficiales durante 10 noches entre 2004 y 2010. Este exdirectivo de la Junta de Andalucía durante la etapa socialista tenía “una afición descontrolada” por los locales de alterne, según reza la sentencia difundida este jueves. Después de que un jurado popular lo encontrara culpable, ahora Villén ha sido condenado por un delito continuado de malversación en concurso medial —situación que se produce cuando un delito es un medio necesario para cometer otro— con un delito continuado de falsedad en documento oficial, en calidad de inductor.

“Prevaliéndose de su cargo, el acusado [Villén] llevó a cabo de manera continuada una disposición ilícita de los fondos de dicha entidad [Faffe], utilizándolos para abonar los servicios que había solicitado en distintos locales de alterne de Sevilla y otras provincias andaluzas, usando para ello la tarjeta que en cada momento dispuso como director contra las cuentas de su fundación”, sostiene el fallo sobre la operativa de pago en los burdeles por parte del exdirectivo andaluz condenado.

Junto al ex alto cargo de la Junta ha sido condenada la antigua responsable del departamento económico-financiero del organismo Ana Valls, por maquillar la contabilidad y simular que el dinero había sido devuelto a las arcas públicas. La magistrada Mercedes Alaya, ponente de la sentencia, ha condenado a Valls a cinco años y tres meses de cárcel, además de una multa de 5.840 euros. Villén debe indemnizar a la Junta con 27.279 euros, pagar una multa de 7.300 euros y será inhabilitado para ejercer cargo público durante seis años.

La sentencia achaca a Villén que no devolvió los gastos en prostíbulos con ninguna de sus cuentas bancarias ni tampoco en metálico: “No existe constancia alguna de que así lo hiciera, pues no recibió resguardo alguno de dichas supuestas entregas, ni quedó en la Caja documentación justificativa que acreditase la recepción por la acusada o por la cajera del dinero que hubiese recibido de manos” del exdirectivo. Alaya estima que Villén “solo devolvió parcialmente los gastos realizados los días 22 y 23 de marzo de 2010″ en un burdel.

Villén y Valls se concertaron para, “aprovechando el control y acceso” a la caja central de la Faffe, simular las devoluciones de los gastos que el exdirectivo hizo con su tarjeta “mediante el procedimiento del ingreso fingido de tales devoluciones en metálico” en esta caja central, según el fallo. Valls anotó dichas devoluciones en las liquidaciones de dicha caja, destinada solo a atender a pequeños gastos corrientes de carácter periódico, como gastos de transporte, comidas o material. Villén visitó los burdeles Don Angelo, Top show girls, La Casita, Bahía 2 y Sala Deluxe.

“La finalidad de este sistema ideado por los acusados era claro: evitar el ingreso de tales devoluciones a través de transferencias bancarias, que era la forma normal y razonable en la que tenían que haberse hecho” y que “hubiesen podido demostrar la cuantía, concepto y fecha de dichas devoluciones si se hubiesen realizado, así como la ausencia de estas en el supuesto de no verificarse”, detalla la sentencia.

Los días 22 y 23 de marzo de 2010 Villén gastó 14.737 euros en el club de alterne Don Angelo y para intentar devolverlo extendió dos cheques por 6.300 euros a cargo de la fundación en connivencia con Valls, y pidió el resto a un tercero, dinero que entregó a su chófer en un sobre para que lo llevara al prostíbulo y que así el dueño procediera a la devolución en la tarjeta oficial de la Junta.

Ambos condenados llevaron a cabo la anotación contable de “las inexistentes devoluciones” en el “libro diario” para que concordasen con los gastos de las tarjetas, con un decalaje entre gastos y anotaciones a veces de días y otras veces de meses. En su fallo, Alaya incide en “la gravedad de los hechos” y las decenas de veces que hizo pagos con las tarjetas oficiales: “En la persistente repetición de actos de apropiación de fondos públicos a lo largo del tiempo, pues si sumamos todos los pagos que realizó mediante la tarjeta de la fundación en los días que se han declarado probados, suman 40 pagos, esto es, 40 veces que se apropió de fondos públicos, realizando varios pagos en una sola jornada, llegando hasta nueve pagos en un mismo día”.

Los dos excargos de la Junta andaluza pueden recurrir la sentencia de la Audiencia sevillana ante el Tribunal Superior andaluz (TSJA).

La reacción al fallo desde el PP la ha transmitido este jueves el consejero andaluz de Justicia, Administración Local y Función Pública, Juan Carlos Nieto: “Nunca más el dinero de los andaluces puede ser usado de esa manera tan chabacana (...) Hay una determinación absoluta de perseguir de forma constante, permanente y rigurosa cualquier aspecto de corrupción”. Mientras, el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, dijo que esperaba que la sentencia cerrara un asunto “muy vergonzoso”. “Recibimos la sentencia con acatamiento absoluto”, subrayó el líder socialista sobre el caso de la Faffe, ariete político durante los últimos años para el PP en la arena política andaluza.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Javier Martín-Arroyo
Es redactor especializado en temas sociales (medio ambiente, educación y sanidad). Comenzó en EL PAÍS en 2006 como corresponsal en Marbella y Granada, y más tarde en Sevilla cubrió información de tribunales. Antes trabajó en Cadena Ser y en la promoción cinematográfica. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y máster de EL PAÍS.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_