Una intensa granizada golpea tres municipios de Navarra

Varias localidades de la Ribera navarra sufrieron durante la madrugada del domingo un episodio de intensas lluvias y granizo que tiñó las calles de blanco y provocó numerosas incidencias. Los servicios de emergencia y protección civil están realizando una estimación inicial de los daños, pero todavía no disponen de datos concretos. Entre los municipios más afectados están Fitero, Corella y Cintruénigo. En algunos puntos, fue necesario incluso el uso de excavadoras para limpiar las calles, muy afectadas por la fuerte escorrentía registrada, según indicó la Policía Foral.

Las precipitaciones no limitaron a la Ribera. En la localidad de Irurtzun, en la Comarca de Pamplona, se alcanzaron 30 litros por metro cuadrado en apenas una hora, mientras que en Tierra Estella se superaron los 60. Estas fuertes tormentas que se suman a las precipitaciones registradas en la noche del viernes al sábado, sobre todo en la Cuenca de Pamplona, donde ha caído “más de la mitad de toda la precipitación otoñal”, según la Aemet.

El director general de Protección Civil y Emergencias, José Javier Boulandier, explicó que por la noche saltaron las alertas de preemergencia en algunos pluviómetros, pero que fue a las tres de la mañana cuando se activó el aviso naranja “por fenómenos observados y no por predicción”. En Fitero, una de las localidades más afectadas y que está celebrando sus fiestas patronales, al menos una persona fue derivada al hospital tras haber sufrido el impacto del granizo. El alcalde de la localidad, Miguel Aguirre, señaló a este periódico que la tormenta comenzó siendo seca, de granizo, y que “pudo con todo”. Los daños en la calle son palpables, con coches con lunas rota o abolladuras. Agricultores del pueblo han transmitido ya al consistorio que han perdido prácticamente todo.

En Cintruénigo, también en fiestas, registró igualmente numerosos desperfectos. Su alcalde, Óscar Bea, ha descrito en la SER que “ha sido una auténtica barbaridad”. El granizo era “demasiado gordo y se iba acumulando”, con lo que se estiman cuantiosos daños en los cultivos: “Hay campos que los ha destrozado: uva, almendras, oliva... Habrá que ir valorando daños a lo largo de esta semana. También en los tejados del casco urbano, donde suponemos que tenemos bastantes tejas rotas y bastante destrozos, pero hasta que no vayamos subiendo y comprobando, no vamos a saber el alcance. A nivel de calle, hay cristales rotos, coches abollados, árboles caídos, montones de pájaros muertos. Un auténtico desastre”.

Las imágenes y vídeos difundidos en redes sociales son llamativas, sobre todo las grabadas en el municipio de Corella. En la localidad, la tormenta se desató alrededor de las tres de la mañana y los servicios de emergencia recibieron alrededor de 40 llamadas telefónicas dando cuenta de diversas incidencias. El alcalde del municipio, Gorka García, ha detallado que se han constatado varios “garajes inundados, árboles caídos y alcantarillas levantadas”. García ha reconocido que el consistorio se ha visto “desbordado por la magnitud de la tormenta”, puesto que no se había “visto nunca esta cantidad de agua y de granizo en Corella.

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) activó este domingo la alerta amarilla por precipitaciones acumuladas y por tormentas en la Ribera de Navarra -se prevén 15 litros por metro cuadrado en una hora-. Las tormentas podrán ir acompañadas de granizo y rachas de viento muy fuertes. Esté previsto que el lunes, el grupo parlamentario de UPN presente una declaración institucional pidiendo que se declare zona catastrófica a los municipios de Fitero, Cintruénigo y Corella.