“En España hay una negación total del racismo que no se ve en otros países”
El investigador Ballet Djédjé incide en la necesidad de reconocer el problema y en educar a la sociedad
El investigador Ballet Djédjé (Abiján, Costa de Marfil, 42 años) eligió la Universidad Autónoma de Madrid para doctorarse en un tema que le afecta por partida doble: el racismo contra el colectivo LGTBI. Tras tres años y medio en España, aún le ocurren cosas que le sorprenden, como que en sus trabajos de campo le llamen “chocolatito” o que se empeñen en acariciarle la piel. Entre sus conocidos, da igual cuántas veces diga su nombre, él sigue siendo “el negro” e incluso en un restaurante en Palencia se negaron a atenderle. “La camarera ni siquiera quiso dirigirme la palabra”, recuerda.
El último episodio racista contra el delantero del Real Madrid Vinicius Jr. le hizo llorar, pero también reforzar su discurso sobre la necesidad de educar. El problema de España, considera, no es solo el racismo, sino negarse a aceptar que existe. “La gente no quiere entender o asumir que su comportamiento es racista. En España hay una negación total que no se ve en otros países”, afirma.
Djédjé, formado en Teología, ha estudiado en Reino Unido, en Alemania y ha vivido en Francia y Estados Unidos, países en los que el racismo se manifiesta con sus propias particularidades. La clave para Djédjé es la madurez de las sociedades para abordar el problema y lamenta que en España el debate esté en pañales. “Aún no hemos terminado de hablar de feminismo y se nota que no estamos listos para hablar de racismo”, mantiene.
En Alemania, ilustra Djédjé, se habla del asunto con mucha facilidad. “Es fácil discutir con un alemán sobre ello, aunque no esté de acuerdo conmigo. Pero la gente se ha informado, está más educada en el tema… Es una sociedad más consciente de lo que significa el racismo sistémico y tiene un conocimiento básico de la justicia social”, reflexiona. “Aquí, en España, un comentario ofensivo se disfraza de broma. No, no es una broma, estamos hablando de la autoestima de otras personas, se trata de cómo las personas son percibidas en la sociedad y de que se ven afectadas psicológica e incluso físicamente. Es algo que marca la vida cotidiana”, defiende.
El investigador, nacido y criado en Costa de Marfil, recuerda que el caso del jugador del Real Madrid no es aislado, ni nuevo. Y que va más allá del deporte. Celebra que pueda aprovecharse para profundizar en el tema. “El Estado tiene que incentivar acciones para educar a la población, pero no solo. También debe cambiar la visión del Gobierno, de la Justicia, de la policía, de la Universidad… No vamos a erradicar el racismo en un día, pero hay que formar a la sociedad en el respeto y hay países que ya lo están haciendo hace tiempo”, reclama.
Djédjé se detiene en la resistencia que observa en el mundo académico, su mundo, en la ausencia de personas no blancas impartiendo clase. “Estamos en 2023 y las materias sobre estudios africanos o estudios asiáticos solo las enseñan españoles blancos. Siempre me pregunto cómo un español blanco puede ir más allá del contexto histórico, y profundizar en el tema del racismo, del imperialismo, del privilegio blanco… Pero esto es algo que aquí aún no se cuestiona”.
España también tiene un contexto propio, más allá de ser una sociedad que asume con más resistencias su diversidad. “Hay una cuestión importante que son las dificultades económicas, el desempleo, un sistema de salud debilitado… Y cuando eso ocurre se empiezan a buscar culpables. Y la derecha y la ultraderecha lo va a aprovechar”, reflexiona.
La lectura positiva, concluye, es que hay “algunas personas” que “están haciendo su tarea, que están aprendiendo”, “que asumen que ante el abuso no puede haber silencio”.
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