Un ataque con una granada en pleno centro de Bogotá deja tres muertos y al menos diez heridos

En la esquina de la carrera décima con calle cuarta, a pocas calles del Palacio de Nariño, el corazón político de Colombia, murieron tres personas y 10 más resultaron heridas en la noche de este miércoles. Dos hombres lanzaron una granada, según ha informado la Policía de Bogotá, que detuvo a los presuntos responsables. Las autoridades sostienen que el atentado se presenta en el marco de una guerra entre dos bandas delincuenciales que se disputan el control del tráfico de droga en el barrio San Bernardo: Los venezolanos y Los costeños.

Este es el tercer ataque con explosivos, y el más letal, de las últimas semanas en ese mismo sector. El primero, el 18 de febrero, dejó un muerto y siete heridos. El segundo, el 23 de ese mismo mes y con una granada, dejó dos personas afectadas. En la última década, el barrio San Bernardo, conocido como el ‘Sanber’, se ha convertido en un lugar donde confluyen la venta de droga, la delincuencia y la prostitución. También es el hogar de cientos de habitantes de calle, muchos de los cuales resultaron heridos tras el ataque. La mayoría, según informes de varios medios, prefirieron quedarse en la zona y no buscar atención médica; tampoco cuentan con un seguro.

Las calles cercanas fueron militarizadas, mientras la Policía promete que en los próximos días habrá noticias sobre capturas y extinción de dominio de los inmuebles utilizados para delinquir. De acuerdo con el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, el general Giovanni Cristancho, el hecho se debe a la confrontación entre esos dos grupos delincuenciales, pero también podría ser una respuesta “a las operaciones que hemos hecho en lo corrido del año”; señaló que justo en el momento de la explosión se estaba realizando un allanamiento en la zona por parte del comandante de la estación.

Es la misma narrativa del alcalde Carlos Fernando Galán, quien llegó a la jefatura de la capital colombiana con la bandera de mejorar la seguridad. Según publicó en la mañana de este jueves en su cuenta de X, “este nuevo ataque, igual que los anteriores en esa misma zona, es la reacción de bandas criminales que buscan sobrevivir al asedio sostenido de la Policía de Bogotá”. Y entregó algunas cifras. Asegura que en lo corrido de 2025 la Policía ha adelantado en el barrio San Bernardo “más de 15 allanamientos, logrando la captura de 120 personas, entre cabecillas y expendedores de droga, así como la incautación de más de 20.000 dosis de estupefacientes, además de granadas, municiones, armas y motocicletas hurtadas. No vamos a retroceder. Por el contrario, vamos a redoblar esfuerzos”.

Para otros, en cambio, el ataque es una muestra del fracaso de la estrategia del Distrito. Heidy Sánchez Barreto, concejal de Bogotá por la coalición de gobierno Pacto Histórico, indicó a través de un trino que “es obvio que hay una guerra entre bandas por el control de este territorio, lo que también es obvio es que la estrategia del Distrito, que anunciaron con bombos y platillos, no funciona. Dijeron que iban a hacer operativos constantes, hicieron una megatoma, dijeron ‘de aquí no nos vamos’ y todo sigue igual. Eso pasa porque las guerras entre bandas no obedecen a una dinámica puramente local, sino a una lógica nacional y transnacional”. Galán, que se ha presentado como una figura opositora al gobierno de Gustavo Petro, y cuya visión de ciudad pocas veces coincide con la del presidente, ha sido cuestionado por haber tomado un papel de crítico en lugar de trabajar de la mano del Gobierno nacional para avanzar en temas clave.

El ‘Sanber’ es hoy el foco de la delincuencia y el tráfico de drogas en la capital colombiana, cuyo accionar ha ido cambiando de epicentro —aunque siempre en la localidad de Santa Fe—, transformándose de acuerdo al accionar de las autoridades. No obstante, las operaciones policiales nunca han logrado disolver del todo estos escenarios de delincuencia, venta y consumo de drogas. En las décadas de los ochenta y noventa, funcionaba desde la calle del Cartucho, hasta que en la primera alcaldía de Enrique Peñalosa el barrio fue demolido para construir en su lugar el Parque Tercer Milenio. Entonces, sus habitantes migraron unas calles hacia el occidente, al sector conocido como El Bronx. Años después, cuando Peñalosa volvió a la alcaldía, en 2016 fue desmantelado en una nueva operación. Entonces sus habitantes volvieron a moverse, esta vez hacia San Bernardo, un barrio que a principios del siglo XX llegó a ser uno de los más elegantes de Bogotá, y cuyas casas de arquitectura colonial o estilo gótico hoy son utilizadas como bodegas de reciclaje, o como centros de operación delincuencial.