Vuelve el crudo invierno, con nieve a 500 metros en el norte y heladas en casi toda la Península
El jueves se producirá un bajonazo en los termómetros, con hasta 10° menos que el día anterior en el norte y el centro
Dos fenómenos meteorológicos se conjugarán a partir de este miércoles para devolver a España al más crudo invierno cuando parecía encaminarse a una primavera adelantada. La confluencia de una depresión aislada en niveles altos (dana) y de una masa de aire muy frío provocará nevadas en cotas bajas de la mitad norte de la Península, heladas en la mayor parte del país y temperaturas diurnas por debajo de 10° al norte peninsular. Las mayores nevadas se producirán el jueves, día en el que también se producirá un bajonazo en los termómetros, con hasta 10° menos que el día anterior en el norte y zona centro. “Con los pronósticos actuales, no podemos hablar de una ola de frío porque no se superarán los umbrales de intensidad, persistencia y extensión, pero será un episodio de frío invernal adverso, con nevadas y temperaturas muy bajas después de unas jornadas en las que ha predominado el tiempo primaveral”, advierte Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). De momento, no ha habido ni una ola de frío en todo el invierno.
Como suele ocurrir con este tipo de fenómenos, la trayectoria de la dana —un embolsamiento de aire en capas altas— es “poco predecible” y su posición es “clave a la hora de determinar en qué zonas se notarán más sus efectos”, por lo que a partir del viernes hay incertidumbre sobre las zonas que resultarán más afectadas por el temporal.
El cambio brusco de tiempo comienza este miércoles, cuando el paso de un frente frío dejará “el camino abierto para la llegada a España de una masa de aire polar” ―lo que no quiere decir que venga del polo, sino de latitudes altas― al tiempo que se formará “una dana en niveles medios y altos de la troposfera”, que rondará el país los próximos. Con el paso del frente, aumentarán las nubes y habrá precipitaciones en el tercio norte de la península, que podrán ser fuertes y persistentes en el Cantábrico.
En el resto de la mitad norte, habrá posibilidad de chubascos acompañados de tormentas, que son “poco habituales en febrero, pero no insólitas”. Enero y febrero son los meses del año en los que hay menos tormentas. La cota de nieve acabará bajando a 600/800 metros en el tercio norte ―término que abarca Galicia, comunidades cantábricas, norte de Castilla y León, La Rioja, Navarra, norte de Aragón y norte de Cataluña― y a 1.000 metros en el resto de la mitad norte y la zona centro. Aunque la mayor parte de la nieve caerá en áreas de montaña, a últimas horas también podrá hacerlo en zonas más bajas. Hay avisos por nieve con alerta amarilla, el nivel más bajo de una escala de tres, en Asturias, Cantabria, Castilla y León, Galicia y La Rioja.
Esta situación “irá a más el jueves”, con la dana situada sobre el noroeste. Buena parte de la mitad norte, la zona centro y puntos del área mediterránea tendrán cielos muy cubiertos, con lluvias y chubascos localmente fuertes y persistentes en Galicia, comunidades cantábricas, alto Ebro y Pirineos. También habrá chubascos localmente intensos en Cataluña y algo más débiles en puntos de los sistemas Central e Ibérico, la Comunidad Valenciana y Baleares.
#ProbabilidadPrecipitación prevista de hoy martes 21 al viernes 24 de febrero pic.twitter.com/FYHXCvz0ik
— CésarRgzBallesteros (@crballesteros) February 21, 2023
Este día será el que más nieve. La cota estará “muy baja”, en 400/600 metros en Galicia, el Cantábrico y Castilla y León, en 500/700 en el resto de la mitad norte y zona centro y 600-800 en la mitad sur peninsular. “Los acumulados de nieve pueden ser importantes, superiores a los 10 centímetros en 24 horas en cotas bajas de las comunidades cantábricas, especialmente Asturias y Cantabria. También puede haber acumulaciones de nieve, en principio menores, en cotas bajas del País Vasco, Navarra, norte y este de Castilla y León y este de Galicia”, indica Del Campo. Habrá aviso naranja, el segundo nivel del sistema de Meteoalerta, por nieve en Aragón, Asturias Cantabria y Cataluña, mientras que será amarillo en Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia, Navarra, País Vasco y La Rioja.
El viernes “aumenta la incertidumbre”, pero es probable que “las precipitaciones queden más acotadas al tercio norte de la Península”. También podrá llover en Baleares y estos chubascos “podrían extenderse al área mediterránea peninsular y también a puntos del tercio occidental”. Las cotas, “todavía bajas”: 500/800 metros en el interior de la Península y más alta cuanto más al este. Las nevadas en cotas bajas del tercio norte “podrían continuar durante el fin de semana, con posibles chubascos también en el área mediterránea”, pero de momento no está claro.
No se espera que nieve en Madrid capital
Con estas cotas, ¿nevará en la capital? “Hay muy poca probabilidad”, responde el portavoz de Aemet, que detalla que la posibilidad de ver caer algún copo el miércoles es del 0%, el jueves entre 5% y 10%, el viernes de nuevo 0% y el sábado, aunque aún queda mucho, de un 10% a 20%.
El otro protagonista del episodio será el desplome de las temperaturas. “Aunque el miércoles ya habrá un descenso en el tercio norte, la bajada será más brusca e importante el jueves, cuando prácticamente afectará a todo el país y será acusada en el norte y zona centro de la Península, con temperaturas diurnas hasta 10° menos que el día anterior”, detalla el experto.
El jueves habrá heladas en buena parte del interior peninsular, de -8°/-10° en zonas de montañas y de -5°/-7° en el este de la meseta Norte y páramos del centro. De día, en el norte los termómetros estarán “claramente por debajo de 10°”. Las heladas se recrudecerán y se generalizarán el viernes, con -4°/-5° en buena parte del interior de la mitad norte y este peninsular. En ciudades como Segovia o Soria se bajará a -8° y las temperaturas diurnas seguirán por debajo de los 10° en la mitad norte. El fin de semana se irán recuperando las temperaturas, pero las madrugadas continuarán siendo muy frías, con heladas importantes en amplias zonas, mientras que el ambiente frío se mantendrá en buena parte de la mitad norte y del centro.
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