Sánchez abrirá el curso político con un diálogo con ciudadanos que han escrito cartas a La Moncloa

La Moncloa está cambiando por completo el mensaje y el formato de los actos del presidente, con la intención de mostrar mucha más cercanía, y este nuevo estilo quedará reflejado en una de las citas más importantes, la apertura formal del curso político, que se hará el lunes en La Moncloa. Si el año pasado Sánchez convocó en Casa de América a la élite del poder económico, con los máximos representantes de las grandes compañías del Ibex 35 sentados en primera fila y un único orador, el presidente, esta vez será algo totalmente diferente: media docena de ciudadanos anónimos, sin ninguna vinculación con el Gobierno ni militancia en el PSOE, según el equipo del presidente, intervendrán explicando sus problemas y sus reclamaciones en un acto en los jardines de La Moncloa que terminará con una respuesta de Sánchez, que explicará sus planes para este curso.

Esta media docena de ciudadanos tienen algo en común: son algunos de los 250.000 que en estos cuatro años han escrito una carta a La Moncloa lanzando preguntas, peticiones, quejas, dudas, o reflexiones de todo tipo. Es algo habitual, los presidentes siempre reciben miles de cartas. Lo que no se había hecho hasta ahora es seleccionarlas y elegir a media docena de sus autores para que expongan sus reflexiones ante el presidente. En el encuentro habrá unas 50 personas de esas 250.000 que han escrito cartas, pero solo intervendrán media docena. El acto, que será conducido por la periodista Carme Chaparro, es una forma de La Moncloa de ofrecer una imagen completamente diferente con la que quieren disipar el cliché que ha instalado la oposición de un presidente aislado en La Moncloa y subido en el Falcon.

Ya en los encuentros de partido, no de Gobierno, que tiene previstos casi todos los fines de semana, Sánchez también tiene previsto cambiar el formato con asambleas abiertas en las que los ciudadanos pueden preguntar. Este sábado en Sevilla se verá una primera prueba de este formato.

El acto del lunes no será como el programa de TVE “Tengo una pregunta para usted” al que se sometió José Luis Rodríguez Zapatero y otros políticos, y que tuvo mucha repercusión. No serán preguntas al presidente sino que cada ciudadano expondrá su caso o sus inquietudes y después Sánchez cerrará con sus reflexiones, pero sí es un formato que permite transmitir una sensación muy diferente a la habitual, cuando el presidente solo hace monólogos con sus ministros o miembros de la élite económica sentados en primera fila aplaudiendo. La clave estará en la selección que haya hecho La Moncloa de esta media docena de ciudadanos, que insisten en que no se trata de personas cercanas al Gobierno.

Este nuevo formato de Sánchez coincide con el llamado “proceso de escucha” que está poniendo en marcha la vicepresidenta tercera, Yolanda Díaz, y que hoy ha tenido un primer paso en Galicia. Los dos sectores del Gobierno parecen pues decididos a cambiar el estilo de comunicarse con los ciudadanos después del varapalo que ambos recibieron en las elecciones andaluzas. En el Ejecutivo está muy claro el diagnóstico del problema que les tiene por detrás en las encuestas: la gestión está bien valorada, pero el Gobierno no. El desgaste es importante y esta temporada electoral que ya prácticamente comienza el Ejecutivo se va a concentrar en explicar sus políticas y tratar de lograr más cercanía con los ciudadanos precisamente para darle la vuelta a esas encuestas.