Regreso al invierno con un temporal de frío, lluvia y nieve

La primavera meteorológica ―que comenzó el 1 de marzo, mientras que la astronómica lo hará el domingo día 20― ha llegado con un retorno al invierno. Tras dos meses de con escasas lluvias y temperaturas suaves, un brusco y significativo cambio de tiempo se producirá este mismo miércoles por la tarde, con la entrada de un frente atlántico muy activo por Galicia, que barrerá la Península dejando agua de noroeste a sureste a lo largo del jueves, avanza la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Una masa polar muy fría tumbará los termómetros el jueves, con desplomes de hasta 8º y las máximas entre 5 y 10º más bajas de lo normal, y nevadas en zonas altas del interior. A estos factores se unirá una borrasca que se formará en el Mediterráneo, que dejará chubascos y tormentas en amplias zonas de la mitad oriental. Además, el viento será intenso, por lo que el ambiente será “plenamente invernal” hasta el domingo en todo el país salvo en Canarias.

El frente es, en definitiva, “la antesala del cambio del tiempo que esperamos para los días siguientes”, explica Rubén del Campo, portavoz de Aemet. Por fin, se producirán precipitaciones generalizadas en la mayor parte de la Península y en Baleares, después de apenas tres episodios de lluvias escasas y dispersas en dos meses. “Puede dejar más de 50 litros por metro cuadrado entre jueves y domingo en puntos del Cantábrico, del Pirineo Navarro, extremo sureste de Castilla-La Mancha, sur de la Comunidad Valenciana y Murcia”, precisa el meteorólogo. En cambio, donde menos agua se espera es en el sur de Cataluña y puntos de Andalucía occidental.

Este miércoles por la tarde-noche, el frente dejará las primeras lluvias en Galicia, Asturias y noroeste de Castilla y León, mientras que en el resto del país aumentará la nubosidad. El jueves, con el frente atravesando la Península, se espera agua en amplias zonas de la mitad norte peninsular y, en menor medida, en el sur y en el este, sin descartar que alcancen Baleares. Las precipitaciones “se irán repartiendo primero por Galicia y comunidades cantábricas, donde pueden ser fuertes y localmente persistentes” y después, por el resto del interior peninsular. Puede haber tormentas en puntos del sureste.

Pero lo más destacado del jueves será “la entrada de una masa de aire polar, húmeda y fría ―que no quiere decir necesariamente que venga del Polo, sino de latitudes más altas―tras el paso del frente”. Esta masa hará descender de forma notable las temperaturas en buena parte de la Península, sobre todo en el cuadrante noroeste. La caída se estima en 6/8 grados respecto a los valores máximos del miércoles. Sin embargo, el ambiente será cálido en Andalucía y las regiones mediterráneas, con 20º en Almería, Granada o Girona.

Estas bajas temperaturas harán que caiga la cota de nieve a lo largo del día. A última hora estará en 700/800 metros en el norte y en 900/1.100 en la zona centro y mitad sur, por lo que en capitales como Segovia y Ávila pueden ver la nieve. El viento arreciará tras el paso del frente, con intervalos de fuerte, sobre todo en el Estrecho, mar de Alborán y zonas de montaña. Diez comunidades más Melilla tienen avisos activos, todos amarillos, que son de nieve en Aragón, Asturias, Cantabria, Madrid, las dos Castillas y La Rioja.

Entre la tarde del jueves y la madrugada del viernes se desarrollará una borrasca en la zona entre la Península y Baleares, lo que incrementará la inestabilidad en el este peninsular y en las islas. La borrasca cubrirá de nubes los cielos y dejará precipitaciones generalizadas en el sur de Aragón, este de Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Murcia, mitad oriental de Andalucía y Baleares, que pueden ser localmente fuertes y persistentes en Comunidad Valenciana.

El viernes seguirá lloviendo en Galicia, comunidades cantábricas y Pirineos, y, de forma más débil, en otros puntos del este. “Las precipitaciones tenderán a cesar a última hora salvo en Baleares, donde se prolongarán todo el día”, anota el experto. La cota puede bajar a 700/900 metros en la mitad norte y el este, mientras que las temperaturas continuarán despeñándose en la mitad oriental, con una caída de 8/10º en el sur de Castilla-La Mancha, Andalucía oriental y sur de la Comunidad Valenciana. A este cóctel se sumará el viento intenso, que incrementará la sensación de frío. Habrá heladas en el centro y norte de la Península.

El sábado aún seguirá lloviendo durante las primeras horas en Baleares, norte de Cataluña, Cantábrico y Pirineos. En el resto de la Península, aumentará la nubosidad y puede haber alguna precipitación débil y ocasional. La cota se mantendrá en 700/900 metros y las máximas, sin cambios, pero las mínimas caerán en buena parte del país, con heladas en el norte e interior de la mitad oriental. “En León, Ávila o Segovia los termómetros puede rondar los -5º”, destaca Del Campo.

El domingo volverá a haber heladas en la meseta norte, páramos del centro y zonas de montaña, aunque las mínimas subirán en la meseta sur. Se esperan cielos nubosos y precipitaciones débiles en el área mediterránea y extremo norte. No se descartan lluvias en toda la mitad oriental, aunque débiles y dispersas, que no habrá ya en el resto del país. Seguirá el ambiente frío, con máximas más bajas en la mitad oriental y sin cambios o con ligeras subidas en las demás zonas.

La semana que viene comenzará con un lunes sin lluvias pero, a partir del martes, vienen vientos del oeste, más templados y húmedos, lo que se traducirá en lluvia sobre todo en el noroeste, Cantábrico, Pirineos y Baleares. “Aunque pueden extenderse, no parece es que vayan a llegar al sureste”, lamenta el portavoz de Aemet. Las temperaturas se recuperarán, con de nuevo el sur y el este de la Península en la cota de los 20º.