Un juzgado investiga si el presidente de Murcia medió para adelantar una operación a un familiar de García Egea

Un juzgado de Murcia ha abierto diligencias previas contra el presidente de la comunidad autónoma, Fernando López Miras, y el secretario general de la Consejería de Salud, Andrés Torrente, a los que Podemos e Izquierda Unida denunciaron por cohecho por, supuestamente, haber mediado para adelantar los plazos de una operación quirúrgica a un familiar del secretario general del PP, Teodoro García Egea.

El Juzgado de Instrucción Número 7, sobre el que ha recaído el caso, ha pedido al ministerio fiscal que informe “acerca de la viabilidad jurídica” de esa denuncia “con carácter previo a decidir acerca de si se dirige formalmente o no el procedimiento contra los denunciados”, según informa el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia.

El caso salió a la luz a partir de una información publicada en el diario digital InfoLibre el pasado mes de junio, que difundió unas fotografías de un móvil que mostraba supuestamente una conversación en WhatsApp entre el presidente murciano y García Egea, amigos desde su juventud. En ella, López Miras señalaba la fecha de la operación prevista para el familiar del secretario general del PP. Según el medio digital, la conversación evidenciaba que se había mediado para adelantar la fecha.

Las imágenes se tomaron durante el transcurso de un pleno en la Asamblea Regional de Murcia y, desde entonces, fotógrafos y periodistas tienen vetada la entrada al salón de plenos durante las sesiones parlamentarias y solo se pueden tomar imágenes al principio de ellas.

El PP regional ha anunciado que interpondrá acciones legales por “esta denuncia falsa porque aquellos que atentan contra la dignidad de las personas deberán asumir las consecuencias de sus actos”, informa Elsa García de Blas. El secretario general del Partido Popular de la Región de Murcia, José Miguel Luengo, ha puesto las miras en Podemos, formación a la que acusa de usar la Justicia para sus fines políticos “sabiendo que la denuncia contra el presidente, Fernando López Miras, es rotundamente falsa”, según recoge un comunicado de los populares. La portavoz regional del PP, Míriam Guardiola, ha lamentado que la denuncia contra López Miras y García Egea solo “trata de manchar el honor y el prestigio de personas honradas” y la ha calificado de “una mentira” para “desprestigiar el buen nombre de políticos intachables”.

El hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, donde se llevó a cabo la intervención quirúrgica, también abrió una investigación interna al respecto, que determinó que el paciente había seguido los cauces habituales de transferencia entre centros (ya que ese centro no era su hospital de referencia) y descartó posibles tratos de favor. Además, el PP denunció al director de Infolibre y la redactora que escribió la información por un posible delito de revelación de secretos por haber difundido datos de una conversación privada y también datos médicos del familiar de Egea.

Para los dirigentes de Podemos e Izquierda Unida en la Región de Murcia, la apertura de diligencias previas contra los dos altos cargos del PP evidencian que hay indicios de una actuación irregular. “No es la primera vez que juegan con la vida de la gente. Las vacunas VIP a altos cargos en enero ya demostraron lo mucho que piensan en sí mismos y lo poco que les importan las vidas del resto. Este escándalo es una prueba más”, ha señalado el coordinador de Podemos en Murcia y diputado Javier Sánchez Serna, en alusión a otra polémica, la vacunación fuera de plazo del exconsejero de Salud, que terminó dimitiendo, y otros altos cargos de ese departamento.

Por su parte, el coordinador de IU en Murcia, José Luis Álvarez Castellanos, ha advertido de que “estos chanchullos tiene consecuencias fatales”, y ha recordado que dos médicos del Virgen de la Arrixaca han presentado también una denuncia por la supuesta manipulación de las listas de espera en cardiología, en la que advierten de que unas 30 personas pudieron haber fallecido al retrasarles su fecha de intervención en detrimento de otros pacientes.