Castilla-La Mancha se suma a Madrid y se plantea pedir la declaración de zona afectada por emergencia por los daños de ‘Filomena’

El Gobierno de Castilla-La Mancha se ha sumado a Madrid y se encuentra recabando información de empresarios, sindicatos, tercer sector, diputaciones y entidades locales de la región para, una vez cuantificados los daños causados por Filomena, decidir si pide al Gobierno central que declare a la región como zona afectada por emergencia, figura antes conocida como zona catastrófica. Fuentes del Ejecutivo regional aseguran que probablemente adopten una resolución a finales de esta semana.

El consejero de Fomento, Nacho Hernando, se ha referido a esta cuestión durante la rueda de prensa que ha ofrecido este martes para hacer balance de la gestión del Ejecutivo ante el temporal, en la que ha indicado que en función de los “datos objetivos” recibidos, el Ejecutivo castellano-manchego puede plantear la posibilidad de remitir esa información al Ministerio de Interior, quien dictamina “si es factible o no dicha declaración”. “La declaración en sí no es importante, sino determinar qué daños materiales se han podido producir para que haya compensaciones”, ha defendido el titular regional de Fomento en declaraciones recogidas por EP.

El anuncio se produce solo dos días después de que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, mostrase su voluntad de pedir la aplicación de esta figura en la capital por los efectos del temporal Filomena. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, descartó esa posibilidad en un principio al considerar que no existían “daños importantes a bienes públicos ni privados”. Sin embargo, este lunes Marlaska abrió la puerta a la aplicación de la medida, aunque recordó que primero se tienen que cuantificar los daños y perjuicios producidos por la borrasca. La presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha insistido este martes en solicitar esta figura para Madrid. “La declaración de zona catastrófica es imprescindible para recuperar muchas localidades que están muy afectadas. Apoyaremos a cualquier alcalde, de cualquier municipio y de cualquier signo político que lo solicite”, ha señalado.

La declaración de zona afectada por emergencia supone la posibilidad de conceder, en la región o localidad afectada, ayudas económicas a particulares por daños en vivienda y enseres de primera necesidad, ayudas destinadas a establecimientos industriales, mercantiles y de servicios o subvenciones por daños en infraestructuras municipales, entre otras. Además, pueden extenderse medidas fiscales, como la exención de la cuota del impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) correspondiente al ejercicio presupuestario en el que haya acaecido la emergencia y las extinciones o suspensiones de los contratos de trabajo o las reducciones temporales de la jornada de trabajo que tengan su causa directa en la emergencia serán consideradas por causa de fuerza mayor.

Las consecuencias del temporal en Castilla-La Mancha han obligado al despliegue de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y de efectivos del Ejército de Tierra en la provincia de Toledo para realizar tareas de limpieza y de conexión de vías. Entre sus funciones, destacan despejar de nieve el centro histórico de la ciudad y garantizar el servicio del AVE Madrid-Toledo, suspendido por el temporal. La alcaldesa de la capital toledana, Milagros Tolón (PSOE), agradeció este lunes a todas las unidades desplegadas “la coordinación eficaz que ofrecen para superar el escenario insólito que azota el país” y advirtió este lunes de que las tareas se prolongarán durante varios días.

Además, la región castellano-manchega se ha visto obligada a suspender las clases este martes y sus carreteras son las más golpeadas por los efectos de la ola de frío que ha sucedido a Filomena. En la mañana de este martes, la CM-43 es intransitable a su paso por Illescas (Toledo), es obligatorio el uso de cadenas en la CM-41 a su paso por Cedillo del Condado (Toledo), y está prohibido el paso a camiones y vehículos articulados en la CM-41 a su paso por Valmojado (Toledo) y en la R-4 a su paso por Ocaña (Toledo). Además, ocho carreteras toledanas son transitables con precauciones.