El Parlamento vasco aplica un cordón sanitario a Vox y reduce sus tiempos de intervención

Vox tendrá menos voz en su estreno en el Parlamento vasco. Todos los partidos políticos, salvo PP-Ciudadanos, han decidido aplicar un cordón sanitario a la formación de ultraderecha para que sus turnos de intervención en los plenos sean más breves, se reduzca su capacidad para presentar iniciativas parlamentarias y solo pueda contratar a un asesor de grupo. Una propuesta consensuada por el PNV, EH Bildu, el PSE-EE y Elkarrekin Podemos restará protagonismo al Grupo Mixto, en el que ha quedado integrado Vox tras lograr un solo escaño en las pasadas elecciones autonómicas.

El acuerdo político entre las cuatro principales formaciones de la Cámara, aprobado este jueves por la Junta de Portavoces, establece que el tiempo de intervención de la única parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, “será de un tercio del previsto para el resto de los grupos” en todos los debates plenarios. Su capacidad para controlar al Gobierno durante la legislatura también se verá restringida, pues solamente podrá registrar “una propuesta cada tres plenos ordinarios”, mientras que el resto tendrá la opción de presentar dos por sesión.

Las limitaciones que afectan a Vox se extienden al número de cargos de confianza de que dispondrá este grupo. El pacto para repartirse los 41 asesores a disposición de los partidos otorga un asistente por grupo, uno por portavoz y un número variable en función de su representación en la Cámara. De este modo, el PNV tendrá 13 asesores, EH Bildu contará con 10, siete el PSE-EE, y cinco cada uno Elkarrekin Podemos y PP-Cs. Vox, con un solo escaño adscrito en el Grupo Mixto, solo dispondrá de un asistente.

Tras consumarse este acuerdo, Martínez ha tachado de “cacicada” que, a su juicio, supone “una vulneración de los derechos políticos de un partido apoyado por miles de vascos”, y no ha descartado recurrir a los tribunales. “En 40 años de funcionamiento de este Parlamento jamás había ocurrido esto. De hecho, tenemos el antecedente de Gorka Maneiro (UPyD) en anteriores legislaturas, en las mismas condiciones que estamos ahora nosotros y, en ningún momento, se han coartado las libertades de la forma en que se ha hecho en este caso”, ha indicado. UPyD también tenía un solo escaño en la legislatura 2012-2016, pero dispuso de los mismos tiempos de intervención que el resto de grupos y contó con tres asesores.

Por otro lado, la presidenta del legislativo vasco, Bakartxo Tejeria, ha anunciado este jueves que el próximo 3 de septiembre se celebrará el pleno de investidura en el que, salvo imprevistos, saldrá reelegido lehendakari Iñigo Urkullu, del PNV, por tercera vez consecutiva. Es el único aspirante al cargo por el momento. EH Bildu decidirá el 24 de agosto si presenta como candidata a Maddalen Iriarte. El plazo para presentar candidaturas a lehendakari termina el viernes 28 de agosto al mediodía.

Urkullu contará previsiblemente con los votos de su partido (31 parlamentarios) y los 10 de los socialistas vascos, con lo que el dirigente nacionalista superaría holgadamente la mayoría absoluta y resultaría elegido en la primera votación. Estas dos formaciones mantienen abiertas las conversaciones para reeditar un Gobierno de coalición. Fuentes conocedoras del proceso de negociación aseguran que el PNV y el PSE-EE quieren dejar prácticamente ultimado el programa de gobierno durante la próxima semana y acordar posteriormente el reparto de las áreas. No se descarta que la secretaria general de los socialistas vascos, Idoia Mendia, pueda entrar en el Ejecutivo como consejera e incluso como vicelehendakari, un cargo del que no ha dispuesto Urkullu en sus dos mandatos anteriores.

Una vez designado lehendakari, Urkullu tomaría posesión de su cargo el día 5 de septiembre en la Casa de Juntas de Gernika después de ser nombrado oficialmente por el rey Felipe VI, con lo que en los primeros días de septiembre podría estar conformado el nuevo Gobierno vasco.