El Tribunal de la UE mantiene a Junqueras fuera de la Eurocámara

El Tribunal General de la UE ha desestimado este martes la petición de medidas provisionales del líder de ERC Oriol Junqueras para poder ocupar su escaño en el Parlamento Europeo. El político independentista buscaba revocar temporalmente la decisión de la Eurocámara de poner fin a su mandato. La justicia europea ha rechazado concederle ese deseo, y ha sentenciado que no puede ordenar al Parlamento Europeo que adopte las medidas oportunas para garantizar sus privilegios e inmunidades. Se basa en un argumento: considera que ello supondría reemplazar al organismo en su función de adoptar decisiones para ejecutar una sentencia, lo cual conculcaría “el reparto de competencias establecido” en los tratados. Junqueras había realizado una triple petición a la justicia europea: que ordenara su libertad a España, protegiera sus derechos como eurodiputado y anulara la decisión de dejar vacío su escaño.

La negativa de la justicia europea no cierra el caso, solo la posibilidad de implantar medidas cautelares mientras se toma la decisión definitiva, dado que el Tribunal de Justicia de la UE todavía tiene que pronunciarse sobre el fondo de la cuestión. Los abogados de Junqueras presentaron el recurso ante la Corte de Luxemburgo el pasado 17 de enero, pocos días después de que el presidente del Parlamento Europeo anunciara que le retiraba el acta de eurodiputado en cumplimiento con lo que exigía el Tribunal Supremo español. Tras la sentencia de la justicia europea que rechazaba que fuera obligatorio acatar la Constitución española para poder ser eurodiputado y concluía que Junqueras gozaba de inmunidad como europarlamentario desde el día de su proclamación, la Eurocámara decidió en un primer momento reconocer al exvicepresidente, pero luego reculó y confirmó que su mandato había expirado, admitiendo su condición de eurodiputado entre el 2 de julio de 2019 y el 3 de enero de 2020, tiempo que permaneció en prisión al no autorizar el Tribunal Supremo su salida de la cárcel.

Fue entonces, al verse despojado de lo que consideraba sus legítimos derechos de eurodiputado, cuando Junqueras pidió medidas cautelares al Tribunal General. El líder de ERC solicitó que se ordenara a la Eurocámara adoptar todas las medidas necesarias para “proteger y hacer efectivos sus privilegios e inmunidades”. Sin embargo, el tribunal ha considerado que eso supondría “conculcar el sistema de reparto de competencias” fijado en los tratados, lo cual hace que la solicitud sea “inadmisible”.

El dirigente independentista también solicitó que se ordenara a España que lo liberase de inmediato para que ejerciera plenamente sus funciones en la Eurocámara. El vicepresidente del tribunal, no obstante, considera que un juez de medidas provisionales no puede dirigir tales órdenes a “entidades que no sean parte en el litigio”, como las autoridades españolas.

Por último, Junqueras pidió que se suspendiera la decisión del 13 de enero por la que se declaró su puesto vacante. Al respecto, la justicia europea cree que Junqueras “no ha logrado demostrar que, a primera vista, la concesión de las medidas provisionales solicitadas esté material y jurídicamente justificada”. El juez señala que la anulación del mandato de un diputado, que se deriva de aplicar la legislación nacional, implica “automáticamente la expiración del mandato del diputado”, así como la vacante de su escaño. “El Parlamento Europeo es simplemente informado de la expiración del mandato por las autoridades nacionales, y de la fecha de conclusión de este por su presidente”, ha explicado.