Las mejores bicicletas para hacer ‘spinning’ en casa

Fomenta la tonificación muscular, activa el metabolismo, ayuda a mantener sanas y flexibles las articulaciones, fortalece el sistema inmunitario, impulsa la resistencia cardio-respiratoria, mejora la salud cardiovascular… Estos son solo algunos de los beneficios de practicar spinning de forma habitual, un deporte muy popular en los gimnasios (sobre todo por sus clases guiadas) que también contribuye a regular el estrés, potenciar las capacidades cognitivas…

Qué se necesita para practicar spinning en casa

Para practicarlo no es necesario ir a un gimnasio; puede hacerse desde casa cuando se cuenta con el equipamiento adecuado. Y el primer paso es disponer de una bicicleta estática. ¡Ojo! No vale cualquiera: los movimientos que se hacen en spinning (levantarse para ‘subir una cuesta’ por ejemplo) o los cambios de dureza de los pedales requieren modelos específicos. No es complicado encontrarlos, ya que muchas firmas disponen de sus referencias, que identifican como ‘indoor’.

Para esta comparativa hemos probado tres modelos: Cecotec DrumFit Indoor 7000 Magno (con una valoración media de 8,5 puntos), Mellerware Loopy Path (8) y Volava Smart Bike (9).

De estas bicicletas indoor se han valorado múltiples aspectos, que hemos englobado en cuatro puntos diferentes:

• Diseño. Empezando por los materiales empleados y la dificultad de su montaje, hasta la comodidad de su asiento, la posibilidad de regular sus componentes…
• Ajustes. Más allá de ajustar la altura del sillín, estas bicicletas también permiten elegir distintos niveles de resistencia para adaptarse a las necesidades de diferentes tipos de usuario. Así, ayudan a reproducir la dificultad de subir una montaña o un suave paseo.
• Seguimiento. Principalmente, los sensores que lleva incorporados (si es el caso) y cómo se muestran los datos en su pantalla (si la tienen) o si son compatibles con aplicaciones para llevar un registro más exhaustivo.
• Otros. Cualquier otro aspecto relacionado con su uso: compatibilidad con apps de terceros, estabilidad de la máquina, accesorios incorporados (soporte para dispositivos electrónicos, gomas para ejercitar los brazos…), etcétera.

La mejor bicicleta de spinning doméstica

Para probar estas máquinas hemos empezado por el principio: su montaje, ya que todas vienen por piezas. A partir de ahí, cada una de ellas se ha convertido en protagonista del entrenamiento diario durante un mínimo de dos semanas, una hora al día, 5 días a la semana.

La bicicleta estática indoor para uso doméstico es la Volaba Smart Bike. Es la más cara de la selección, pero a una buena calidad y fácil montaje añade la posibilidad de realizar entrenamientos guiados desde su app propia.

Volava Smart Bike: nuestra elección

Su montaje es muy sencillo, pudiendo realizarlo una única persona en menos de media hora; todo está detallado en su manual de instrucciones y viene con todo lo necesario, incluidas las herramientas. La única dificultad es quizá sacar de la caja la unidad central, muy pesada; una vez montada, tiene dos ruedas en la parte frontal que facilitan su transporte. Sus materiales son de buena calidad y ofrece múltiples opciones para regular sus elementos: sillín, manillar… tanto en altura como en profundidad. Sus pedales disponen de agarres para que no ‘baile’ el pie y su freno de emergencia es también el regulador de la resistencia. Como elementos adicionales cuenta con un soporte para pesas tras el sillín, un botellero y una superficie para colocar el móvil o tableta durante su uso.

Funciona conectada a la corriente y tiene Bluetooth para poder vincularla con el móvil o una tablet. Y es que su punto diferencial con respecto a otras propuestas es que ofrece un amplio ecosistema de clases de distintos deportes (incluidos spinning) para sacar el máximo partido al dispositivo: más de 60 clases en directo a la semana y más de 2.500 bajo demanda de diferentes niveles.

Para acceder a ellas es necesario una suscripción (hay dos tipos) pero se puede probar gracias a que incluye un mes gratis. Si se decide no contratar no pasa nada, puede seguir utilizándose (habría igualmente que iniciar la app y seleccionar ‘entrenamiento libre’), pero todas las estadísticas que registra —velocidad, distancia, calorías, potencia— se verían en directo, ya que luego no se guardan. También registra las pulsaciones, para lo que es imprescindible utilizarlo con un complemento como el Smart Pulse, que también hemos tenido oportunidad de probar. Con frenos magnéticos y correas de transmisión, es muy silenciosa y también muy estable, probablemente por su peso. Requiere poco mantenimiento previo y posterior a su uso.

Cecotec DrumFit Indoor 7000 Magno: la alternativa

Es estéticamente uno de los modelos más bonitos, y entre sus características cuenta con un sistema de resistencia magnética regulable, volante de inercia equivalente a 18 kilos, soporte para dispositivos, portabotellas, etc. Uno de sus aspectos más interesantes es su volante, ajustable en diagonal y con diseño deportivo resistente al sudor, que incorpora además unos sensores para medir el pulso durante el ejercicio. No es una de las soluciones más fiables, pero sí sirve como referencia para llevar un seguimiento del ejercicio. Se muestra, junto a la velocidad, el tiempo del entrenamiento, la distancia recorrida o las calorías consumidas en una pequeña pantalla LCD que funciona a pilas (vienen incluidas). Es básica y funcional, pero supone que no pueda conectarse a apps externas ni incluye programas de entrenamiento. En este caso, lo mejor es complementarla con un móvil o tablet, para los que tiene soporte.

Su sillín también es deportivo y está acolchado, y se ajusta en altura y profundidad. Los pedales, por su parte, tienen cintas para sujetar los pies y pueden sustituirse por calapiés (no incluidos). Por lo demás, destacar su funcionamiento silencioso y su pedaleo fluido, y que es adecuada para personas de hasta 190 centímetros de altura y 120 kilos de peso.

Mellerware Loopy Path: mejor relación calidad-precio

Con un volante de inercia de 22 kilos ajustable manualmente, a diferencia de otros modelos posee un sistema de transmisión de correa que hace que sea algo más ruidosa que la competencia y supone también un poco más de mantenimiento. Es adecuada para usuarios de hasta 125 kilos de peso: tanto su sillín como su volante se ajustan en altura y horizontalmente. En este sentido, además, tenemos que decir que el sillín, aunque es acolchado y antideslizante, no es uno de los más cómodos.

Gracias al monitor que lleva integrado, que posee una pequeña pantalla LCD, es posible ver en tiempo real la velocidad, la distancia recorrida, el tiempo empleado y las calorías quemadas. No hace falta pulsar para cambiar entre una y otra, porque va mostrándolas sucesivamente cada 4 segundos.

Su montaje es sencillo (muy detalladas las instrucciones) y, durante las pruebas, hemos notado que al levantarse y hacer mucha fuerza puede dar sensación de inestabilidad, aunque más que por la propia bici es por el manillar, que se mueve sutilmente.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 6 de agosto de 2022.

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