Los mejores antifaces de gel para el rostro y el descanso de los ojos
Estos cuatro modelos ayudan a que el cansancio acumulado y las ojeras disminuyan, entre otros beneficios. El usuario aplica para ello sesiones de frío o de calor, según prefiera
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Nuestra experta ha elegido el modelo TheraPearl Eye-Essential Mask como el mejor antifaz de gel por la calidad de sus materiales, la experiencia de uso y una mayor sensación de relajación en la zona ocular.
El listado de productos destinados al cuidado y la salud del cuerpo es cada vez mayor. Así, por ejemplo, los hay dedicados a nuestros pies, manos, cuello, espalda u ojos. En relación con estos últimos destacan los antifaces de gel. Se trata de una máscara de ojos de fácil uso que dadas sus propiedades soporta cambios de temperatura —se pueden enfriar o calentar— con el propósito de rebajar ciertos síntomas como cansancio, hinchazón, bolsas y ojeras. Algunos usuarios, incluso, los utilizan para aliviar dolores de cabeza.
¿Cómo se usa el antifaz de gel?
La utilización de los antifaces de gel resulta muy sencilla. Si el usuario quiere aplicar calor, debe introducirlo en el microondas durante unos pocos segundos. En el caso del frío, puedes meterlo en el congelador o el frigorífico. En todos los supuestos, lo habitual es que los fabricantes incluyan en el manual de instrucciones de su producto algunas recomendaciones que siempre viene bien tener en cuenta.
¿Cuánto tiempo usar el antifaz de gel?
Depende de las necesidades de cada persona. Sin embargo, lo recomendable es establecer sesiones con una duración determinada y una rutina. Ser constante también es importante para empezar a notar resultados. En nuestro caso, por ejemplo, invertimos en cada una cerca de 20 minutos aproximadamente.
Comparativa de antifaces de gel. ¿Qué modelos hemos elegido?
Los modelos elegidos de antifaces de gel para dormir son los siguientes: InnovaGoods IG 117889 (6,25), Navaris (7,75), TheraPearl Eye-Essential Mask (8,25) y Vjoli Face Masket (6,25). Se ha valorado de cada uno de ellos los siguientes aspectos:
- Diseño: desde el punto de vista de la calidad de fabricación.
- Gel: la sensación que produce al entrar en contacto con la piel del rostro.
- Ergonomía: si el antifaz de gel es cómodo de llevar puesto.
- Experiencia de uso: ¿han cumplido con nuestras expectativas?
¿Cuál es el mejor antifaz de gel? Así los hemos probado
Hemos dedicado a cada una de estas cuatro propuestas una semana para comprobar su calidad y comodidad de uso, y lo que es más importante: la experiencia de uso que proporcionan. Sobre todo, hemos aplicado frío y de manera ocasional calor para verificar, por otro lado, si retienen bien o no este frío y calor y el efecto que producen. El momento elegido para las pruebas fue el final del día.
El modelo que ha obtenido la puntuación más alta ha sido el antifaz de gel TheraPearl. Destaca sobre el resto por su calidad de fabricación y experiencia, pues al final de cada sesión sentías una mayor relajación y menos cansancio en la zona ocular.
Antifaz de gel TheraPearl
Especializada en el desarrollo de productos relacionados con el cuidado del cuerpo como las cervicales y rodillas, la firma TheraPearl cuenta en su portafolio con esta máscara de ojos. Su diseño y fabricación es uno de los que más nos ha gustado. También el tacto de sus bolas de gel, que invita a toquetearlas continuamente, sobre todo las primeras veces que las tienes entre las manos.
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FICHA TÉCNICA
Uso: frío y caliente.
Dimensiones: 230 x 70 mm.
Otros: duración de las sesiones en torno a 20 minutos.
La máscara encaja perfectamente gracias a su diseño flexible y cuando los ojos entran en contacto se sienten cómodos y a gusto. No obstante, hemos echado en falta que su banda elástica no posea un sistema que ayude a ajustar esta correa al perímetro de la cabeza: hubiera permitido disfrutar de una mayor comodidad, pues en ciertos momentos la presión que ejerce se hace un poco incómoda. Este antifaz de gel tiene unas dimensiones de 230 x 70 mm.
En lo que respecta a la experiencia de uso, el antifaz de gel TheraPearl Eye-Essential Mask ha logrado una de las valoraciones más altas porque conserva (sobre todo) muy bien el frío acumulado. El calor también, pero en especial nos hemos sentido cómodos al someterlo a una baja temperatura en el frigorífico, pudiendo disfrutar de sesiones de uso de entre 20 y 25 minutos.
Nuestra elección
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Lo mejor: calidad de fabricación y experiencia de uso
Lo peor: la banda fija a la cabeza no es regulable
Conclusiones: se trata de un antifaz provisto de bolitas de gel que muestra un diseño agradable y cuidado que cumple con su cometido. Retiene muy bien tanto el frío como el calor que acumula y que luego se aplica a la zona ocular.
Antifaz de gel Navaris
Disponible en dos tonalidades (azul y rosa), esta máscara para ojos se siente ligera cuando la sostienes mientras que la calidad de fabricación (plástico y gel empleados) es bastante buena considerando su precio. El antifaz de gel Navaris viene en una pequeña bolsa de plástico con autocierre en la que, además, se incluye una segunda unidad.
Su diseño apuesta por la personalización no solo en lo referente al color: incorpora una correa ajustable para así adaptarse al mayor número de personas de la manera más cómoda posible. En concreto, esta correa puede ajustarse entre los 280 y los 430 mm gracias a un sistema que a priori parece resistente.
Aunque su gel está preparado para sesiones donde es posible aplicar tanto calor como frío, nos hemos centrado casi en exclusiva en esta última opción. ¿El resultado? La máscara ofrece comodidad de uso, se adapta al rostro sin problemas y la sensación de relajación resulta agradable a medida que pasan los minutos.
En este diseño, lo único que hemos echado en falta es que la parte de los ojos que queda al aire libre no se haya recubierto también para mejorar todavía más la experiencia. Aun así, el antifaz cumple con su función. Para aplicar el frío, lo introducimos previamente en el frigorífico unos 30 minutos.
La alternativa y mejor relación calidad-precio
Antifaz de gel Vjoli Face Masket
Difiere ligeramente del resto, ya que cubre completamente el rostro dejando visible la zona de los ojos, la nariz y la boca. En dos colores (azul y rosa), la impresión resulta un tanto extraña —sobre todo durante los primeros minutos— cuando te la colocas y ajustas la doble banda elástica que queda fija a la cabeza, aplicando de este modo una pequeña presión.
Al entrar en contacto con la piel, enseguida sientes las perlas de gel distribuidas por toda la máscara. La calidad resulta algo justa y la comodidad de uso mejorable; en nuestro caso, tuvimos alguna que otra dificultad para acoplarla y que permaneciera fija correctamente.
Al igual que el resto, está preparada para aplicar de manera indistinta calor (hay que usar el microondas como ocurre con las otras máscaras para ojos) y frío. Con el antifaz de gel Vjoli Face Masket percibes cierto frescor y calma sobre todo en la parte inferior de los ojos y pómulos, aunque si comparamos resultados a la hora de rebajar o relajar la fatiga ocular esta experiencia se queda corta en ciertos momentos.
Con perlas de gel uniformes
Antifaz de gel InnovaGoods IG 117889
Como sus adversarios, esta máscara de gel puede utilizarse aplicando de modo indiferente frío o calor, según prefiramos. En este caso, el gel que contiene es líquido y se reparte de manera uniforme en el interior. Fabricada en plástico, la calidad de sus acabados resulta algo justa y consigue la misma valoración que la máscara de Vjoli. Se acopla al rostro a través del sistema de doble cuerda que incorpora en la parte trasera.
Esta impresión se traslada también al confort y el alivio que se experimenta durante el desarrollo de cada sesión: aunque notas cierto descanso y relajación, esperas algo más. Lo mismo sucede con la ergonomía, pues no acabas de sentirte cómodo del todo.
Al aplicar el frío, y para que el antifaz de gel InnovaGoods IG 117889 no se quede completamente duro y pueda manipularse con relativa facilidad, lo aconsejable es guardarlo en el frigorífico y no en el congelador antes de usarlo.
El más económico
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¿POR QUÉ DEBES CONFIAR EN MÍ?
Llevo en el periodismo tecnológico casi dos décadas. En todo este tiempo, he tenido el privilegio de comprobar cómo avanza la tecnología para hacer que el día a día sea más fácil y contarlo en diferentes medios. Aunque ya he perdido la cuenta de cuántos productos han pasado por mis manos, confieso que las ganas y las sensaciones siguen siendo las mismas. Portátiles, tabletas, teléfonos, cámaras de fotos, pulseras de actividad, relojes inteligentes... No me pongo límites a la hora de elegir un dispositivo y exprimir al máximo sus posibilidades como buena consumidora de tecnología.
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