Volar en un ‘chaise longue’ o cómo un invento español está a punto de revolucionar el sector aeronáutico
Cada vez los pasajeros ven más complicaciones a la hora de coger un avión: menos espacio, más personas y asientos cada vez más incómodos. Alejandro Núnez Vicente ha diseñado el tercer prototipo que ya empiezan a demandar algunas aerolíneas
Cuando un pasajero se sube a un avión no espera grandes comodidades: asientos pequeños, cada vez menos espacio y la imposibilidad de estirar las piernas. Los turistas se han acostumbrado a que los nuevos cambios sean para peor. Volar en clase económica se ha convertido en una experiencia cada vez más incómoda para personas como Alejandro Núñez Vicente (Madrid, 23 años). Mide 1,90 metros y cada vuelo en el que se tiene que subir es como una tortura. Es por esto que lleva años trabajando en el desarrollo del Chaise Longue Economy Seat, que ya tiene tres prototipos y cada vez está más cerca de convertirse en una realidad.
Su idea es sencilla: no quiere meter más pasajeros en el avión, solo quiere que los que viajen lo hagan de la manera más cómoda posible. “Muchos piensan que va a ser para fastidiar más a los pasajeros y que las aerolíneas ganen más dinero. Nuestro objetivo es meter el mismo número de pasajeros, pero darles mucho más espacio y, por lo tanto, que el pasajero viaje mucho más cómodo”, explica a EL PAÍS el estudiante de Ingeniera mientras señala su último prototipo localizado en una nave de Madrid.
Pero, ¿y cómo se consigue ir más cómodo en el mismo espacio? Lo que Núñez quiere es renovar el interior de los aviones, pero solo las posiciones centrales: prevé una cabina de asientos en dos niveles, con filas en el suelo y otras elevadas. De esta manera, se maximizará el espacio y los pasajeros podrán estirar completamente las piernas, tumbarse e ir cómodos durante el vuelo. “Si quitas el compartimento superior de maletas, puedes meter asientos que son más altos y esto permite generar más espacio por pasajero sin cambiar la capacidad”, subraya su inventor. Una nueva propuesta que no suprime el compartimento para el equipaje, sino que lo ubica en otra localización bajo el asiento.
No podría haber llegado hasta aquí sin AIRE, una empresa española dedicada a los interiores de aviones que patrocina el prototipo. Después de presentarlo por segundo año consecutivo en la Aircraft Interiors Expo, una feria de mobiliario aeronáutico celebrada en Hamburgo, cuenta ya con propuestas de algunas empresas punteras del sector de la aviación para integrar sus propuestas dentro de sus aviones.
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