Un continente muy tentador

¿Se ha convertido el turismo en una amenaza? Hay ciudades en Europa que parecen saturadas, como si quisieran frenar la avalancha de visitantes: Venecia, Praga, Áms­­terdam o Barcelona, por ejemplo. A las ausencias de otros años entre los estands oficiales de Fitur (Francia, Alemania, Reino Unido, Suiza) se suman de nuevo los Países Bajos, que además anuncian que van a cerrar su oficina de turismo en España: buscan más turistas de cercanía, que no tengan que desplazarse en aviones o barcos contaminantes. En 2020 la ecología manda, junto a un auge de apuestas por lo selectivo o temático, bien sea en el campo del arte, la música, la gastronomía o el deporte. Europa diversifica y afina sus propuestas, que siguen conformando un catálogo tan extenso como tentador.

El Upfest de la ciudad inglesa de Bristol se ha convertido en el mayor festival de arte urbano en Europa

1 Los protagonistas

Algunos nombres propios van a marcar el año. Como Jan van Eyck (1390-1441), el pintor flamenco que empujó la pintura del gótico al renacimiento y que cierra el ciclo Maestros flamencos, tras Rubens y Brueghel en los dos años anteriores. El Año Van Eyck se celebrará con especial entusiasmo en Gante, donde el políptico La adoración del cordero místico será un eje temático y se abrirá un centro de visitantes en la catedral de San Bavón, hogar de dicho retablo, restaurado para la ocasión. En el Museo de Bellas Artes de la ciudad belga se podrá ver la mayor exposición de la historia sobre el pintor (solo se conservan 23 de sus cuadros y la mitad estarán en la muestra), bajo el título Van Eyck. Una revolución óptica, y dará inicio al año temático OMG! Van Eyck Was Here, que además brindará teatro, danza, diseño, moda, música y gastronomía; incluso han creado una cerveza aliñada con las hierbas que pintó minuciosamente en sus cuadros.

También de origen flamenco era otro de los protagonistas del año, Ludwig van Beethoven, de cuyo nacimiento se cumplen 250 años. Son las ciudades de Bonn (Alemania), donde el músico pasó su infancia y juventud, y Viena (Austria), donde vivió desde los 22 años hasta su muerte, las que van a tirar la casa por la ventana con centenares de eventos para celebrar la efeméride (webs del programa de Alemania y de Viena).

Otro rostro que asomará en los carteles de Fitur es el del pintor renacentista Rafael Sanzio (1483-1520). Se cumple el quinto centenario de su muerte, acaecida en Roma cuando apenas contaba 37 años. Fue enterrado en el Panteón, y este año habrá cada día sobre su tumba una rosa roja. La capital italiana acogerá la muestra más importante del aniversario, en las Escuderías del Quirinale, pero también habrá exposiciones y eventos en Milán, en la National Gallery de Londres, en el Louvre de París o en el castillo de Chantilly. Y, por supuesto, en Urbino, su ciudad natal, en la región italiana de Las Marcas, donde ha sido remozada su casa y el taller familiar. Menos conocido que Rafael, pero turbador y cada vez más apreciado, es Giovanni Battista Piranesi, que nació hace 300 años en Mogliano Veneto y cuyos perfiles como arquitecto, grabador y sobre todo visionario (con sus cárceles imposibles, o Carceri d’invenzione) van a proyectarse en varias ciudades europeas.

2 Baile de etiquetas

Las capitales culturales europeas son este año Galway (Irlanda) y Rijeka (Croacia). El lema escogido por la primera es “Deja entrar a la magia”, cosa que pretende conseguir a través de más de 900 eventos que incluyen espectáculos callejeros, teatro, danza, exposiciones, encuentros literarios, amén de la animación y música en vivo de sus pubs, o la tentadora llamada de las cercanas montañas de Connemara. En Rijeka, que ejerce de gozne entre el apéndice italianista de Istria y la luminosa Dalmacia, el lema es “Puerto de la diversidad”. Su reinado cultural se inaugura el 1 de febrero, aprovechando el carnaval, y cuenta con siete proyectos estrella, aparte de la creación o renovación de infraestructuras cívicas como el nuevo Museo de Arte Moderno y Contemporáneo, la Biblioteca Municipal, la Casa de los Niños o el nuevo centro cultural RiHub.

Italia ha elegido a Parma como su propia Capitale Italiana della Cultura 2020, bajo el lema “La cultura bate il tempo” (parma2020.it), lo que va a afectar a toda la región de Emilia Romagna. El título de Capital Verde Europea lo ostenta Lisboa, gracias a la creciente peatonalización del centro y el aumento de áreas verdes o a los avances en eficiencia energética; la capital portuguesa aprovecha la ocasión para promover lugares cercanos más descongestionados, como las bodegas históricas del vino carcavelos en Oeiras, las playas surfistas de Ericeira (entre las mejores del planeta, con reciente centro de interpretación), el cabo de la Roca en el fin del mundo, el real sitio de Mafra… Otro título reciente, el de Smart Tourism Capital, ha recaído en la sueca Gotemburgo —compartido con Málaga—, por su apoyo al talento local, la conservación del patrimonio o la accesibilidad. Y la francesa Lille ha sido designada como capital mundial del diseño 2020, título bianual que otorga la World Design Organization. La Metropole Européenne de Lille (MEL), que agrupa 90 ciudades y pueblos de la zona, acompasará sus propuestas a las cuatro estaciones, como metáfora del poder de transformación del territorio por parte del diseño.

Burdeos abre en abril un centro de arte digital de 42.000 metros cuadrados en una antigua base de submarinos

3 Ciudades ejemplares

Luxemburgo merece encabezar el cuadro de honor de ciudades excelentes: a partir de marzo, todos sus transportes públicos serán gratuitos. Sin contar con otro puñado de méritos, como su nuevo Lëtzeburg City Museum, la abundancia de jardines, parques y bosques, o su apuesta por edificios de vanguardia en el barrio europeo. Oslo es otro de los municipios europeos que en 2020 acapara focos: se va a inaugurar (¡por fin!) el nuevo Museo Munch, pegadito a la ya icónica Ópera y a otro edificio rutilante que se les une como un tres en raya, la biblioteca pública Deichman Bjorvika, que también se inaugura este año. Y al otro lado del fiordo de Oslo, a espaldas del Ayuntamiento, otro edificio que tal vez sea el más noble y hermoso de todos, el nuevo Museo Nacional, que esperan tener acabado en breve. Además, a unos 60 kilómetros al norte de la capital noruega, el reciente parque de Kistefos merece una escapada no solo por el singular puente-escultura-museo bautizado como The Twist, sino por el cúmulo de obras de artistas como Anish Kapoor, Tony Cragg y Claes Oldenburg esparcidas por un entorno natural de una belleza pasmosa. Al sur de Oslo, la finca de campo de Edvard Munch, llamada Ramme, se transforma en un complejo que incluirá hotel y granja-restaurante de comida orgánica.

En Francia, son varias las ciudades que destacan por sus novedades: Burdeos inaugura en abril Les Bassins des Lumières, con 42.000 metros cuadrados de superficie, el centro de arte digital más grande del mundo, en una antigua base submarina construida por los na­­zis. En Toulouse abrirá en junio el MEETT, centro de exposiciones y congresos proyectado por el arquitecto Rem Koolhas, y que sumará sus propuestas al ya clásico Matadero (Les Abattoirs), que cumple 20 años (turismo-toulouse.es). En Angers se abre al público como museo el palacio episcopal, que linda con la catedral; y en Nancy reabre tras su restauración Villa Majorelle, pieza maestra del art nouveau que levantó Henri Sauvage en 1902.

4 Más novedades

La República Checa celebra los 150 años del nacimiento de dos de sus creadores más universales: Adolf Loos, precursor del racionalismo en arquitectura, que dejó sus mejores obras en Brno —su ciudad natal—, Pilsen o Praga; y Alfons Mucha, uno de los más genuinos representantes del art nouveau cuya obra, además de en Praga, puede verse en el museo de su localidad natal, Chrudim, en la Bohemia oriental. Esta región, a una hora de tren desde Praga, se quiere dar a conocer; su capital, Pardubice, asombra con dos espléndidos castillos; Litomysl, con su palacio y urbanismo barrocos, escenario de un festival de ópera de alcance internacional, y la coqueta Policka, que celebra los 130 años del nacimiento de un músico cada día más reconocido, Bohuslav Martinu, a quien han dedicado un museo en la escuela que frecuentó.

El Reino Unido, además de las muchas citas culturales de Londres, celebra la Bienal de Arte Contemporáneo de Liverpool (de julio a octubre). Y en Bristol, el Upfest se ha convertido en el mayor festival de arte urbano de Europa. En Gales, 2020 será el Year of Outdoors, para reivindicar sus 1.400 kilómetros de costa, sus tres parques nacionales y no menos de 600 castillos. También Escocia apuesta por la naturaleza con algo parecido, su Year of Coast and Water 2020, además de festivales consolidados como el de cine en Edimburgo o el ecológico en Aberdeen, y varios aniversarios literarios: Dickens, Wordsworth, etcétera.

Suiza prepara una gran exposición sobre Goya en la Fundación Beyeler de Basilea, aparte de eventos ya consolidados como Art Basel o el festival de jazz de Montreux. Holanda cambia su marca Holland por Netherlands y celebrará en abril (en Ámsterdam, La Haya, Utrecht y otras ciudades) el Mes de la Libertad en los Países Bajos, por el 75º aniversario del final de la II Guerra Mundial; y en mayo, Eurovisión en Róterdam. En Grecia, la ciudad de Tesalónica acoge en junio el Euro Pride 2020, que supondrá un impacto para toda la región de los Balcanes.