La nueva gastronomía israelí
Cinco restaurantes de Tel Aviv para descubrir una cocina cada vez más rica e internacional
Aires de cambio. Así es como expresan la mayoría de sibaritas culinarios el momento actual por el que pasa el mundo gastronómico, no solo en Tel Aviv, sino en todo Israel. Con una cocina local caracterizada por el uso de productos naturales y sencillos, los últimos años han visto como la gastronomía del país se ha ido contagiando de la influencia de otros mercados gastronómicos, variando y mejorando su producción. Limitada hasta ahora, bien por la falta de algunos productos muy utilizados en la cocina europea y muy caros de importar, bien por cuestiones más relacionadas con el ámbito religioso (de ahí la siempre sorprendente falta de marisco, entre otros, prohibido por la normativa kosher), la escena culinaria israelí ha empezado a sofisticarse de tal modo que son ya muchos los que apuntan a Tel Aviv como uno de los próximos destinos gastronómicos del Mediterráneo. De hecho, la ciudad ha experimentado en los últimos meses un importante crecimiento en la demanda de nouvelle cuisine, que se ha traducido en la apertura de nuevos e imponentes restaurantes que utilizan el nombre de prestigiosos chefs para hacerse un hueco en la efervescente guía culinaria de esta urbe.
Hasta no hace mucho la dieta israelí ha estado marcada profundamente por tres estilos, todos ellos provenientes de las mayorías sociales del país, que trajeron con ellas además de sus formas de vida, una importante cultura gastronómica. En ese sentido, destacan la cocina sefardí, asquenazí y mizrají, que han asentado las bases de la actual cocina de Israel y que tienen en el schniztel, la shakshouka, las burekas o las ensaladas su máxima expresión. Además de estos, algunos elementos de la cocina árabe como el humus o el falafel han pasado a ser también platos típicos y muy del gusto de los israelíes, que los incluyen en buena parte de su alimentación.
De la premisa de cocina sana y sencilla se está pasando a una más vibrante y exquisita, lo que no significa que se esté perdiendo una de sus máximas virtudes: la frescura de los alimentos, especialmente de frutas y verduras. Así lo asegura Janna Gur, una de las cocineras y escritoras más populares del país: “Ya en 2008 se podía sentir el comienzo de un creciente interés en la cocina israelí. Hoy en día este interés ha aumentado y espero que aún aumente más". Según comenta, el éxito de la nueva gastronomía israelí se debe al hecho de que “captura a la perfección el espíritu de la época, que es ligero, vivo y fresco, lleno de sabor y muy informal”.
Janna Gur pertenece a la misma generación de chefs que Michael Solomonov, Ron Ben-Israel o Yonatan Roshfeld, todos ellos caras reconocibles de un cambio que también se hace notar en las preferencias culinarias de la población, cada vez más abierta a disfrutar de nuevos sabores y estilos. Esto es especialmente notable en la inmensa oferta hostelera de la ciudad, cada vez más rica e internacional. Y ahí van cinco sitios que dan prueba de este cambio:
Herbert Samuel
Con espectaculares vistas al mar Mediterráneo, Herbert Sameul (Koifman Street, 6) es un restaurante que se ha situado en poco tiempo entre los favoritos de la clase media alta de Tel Aviv. Este local, dirigido por el famoso cocinero Yonatan Roshfeld, fue de los primeros en apuntarse a la moda de las tapas, cada vez más habitual. Sin embargo, la carne, en sus diferentes cortes, es lo que ha hecho de este restaurante un sitio especial. Aunque no es lo único, una buena selección de mariscos y pescados, siempre cocinados al más puro estilo mediterráneo, atraen hasta aquí cada día a una clientela fiel y numerosa.
Haj Kahil
A pesar de que la historia de Haj Kahil (Raziel street, 18) se remonta a unas cuantas décadas atrás, es imposible no incluir este restaurante entre los estandartes de la nueva escena culinaria de Tel Aviv. Regentado por la familia del mismo nombre, Haj Kahil está situado en el puerto de Jaffa y desarrolla una carta típicamente árabe, salpicada de elementos de otras cocinas como la francesa. La esmerada presentación de sus platos y el entorno único donde se sitúa hacen de este lugar una parada obligatoria en la ruta gastronómica de la ciudad.
Tapas 1 Ha’am
El Tapas 1 Ha’am (Yavne Street, 26), restaurante del Hotel Boutique Alma, es uno de mejores lugares para perderse por el centro de Tel Aviv. Junto a una de las arterias principales de la ciudad, este pequeño restaurante de tapas está pensado para una cena íntima, tal y como indica el hecho de que no haya más de una decena de mesas en su espectacular y coqueto comedor. Inspirado en la cocina española, la carta de Tapas 1 Ha´am mezcla con gracia platos locales con otros tan típicamente españoles como la paella valenciana o los calamares en su tinta, una de sus especialidades.
Habesh Restaurant
A pesar de no ser muy reconocida internacionalmente, la cocina etíope disfruta de un buen momento en Israel. Y no es de extrañar, a tenor de la numerosa comunidad etíope que vive en el país. El Habesh Restaurant (Hanegev street, 8) es de los primeros en su especie y toda una sorpresa para los que gustan de la cocina exótica y diferente. Sin grandes aspavientos y más bien tirando a austero, no hay que dejar de probar cualquiera de sus exquisitos guisos de carne o pollo. No defraudará.
Taizu
Desde su apertura en 2012, Taizu (Menahem Begin Road, 23) ha pasado a ser uno de los restaurantes de comida asiática más populares de la ciudad, especialmente valorado por su cocina fusión de productos locales y asiáticos. Además, llama la atención de este lugar su espectacular barra, que hace las veces de bar, en la que se ofrecen cócteles naturales, elaborados con productos típicos israelíes como el licor de arak.
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