Ali Qaid se aproxima a una de las letrinas compartidas instalada en el campamento Al-Khuseif para desplazados internos en Marib, Yemen. Este hombre, su mujer y sus diez hijos fueron desplazados de la gobernación de Ibb debido al conflicto que asola Yemen y ahora vive en una pequeña tienda de campaña en Al-Khuseif.Hesham Al Hilali (MSF)Unos niños se sientan fuera de su tienda de campaña en el campamento de Al-Khuseif para desplazados internos, en Marib. En total son diez hermanos que viven con su madre y su padre, Ali Qaid. No disponen ni de baño ni de cocina. Miles de personas vulnerables en el campamento se ven afectadas por el miedo, los desafíos económicos y la privación de medios de subsistencia. Estas dificultades están afectando directamente su salud mental. No tienen comida para comer, ropa para vestirse ni espacios seguros para vivir con sus hijos. Esto conduce a efectos negativos en los planos físico y psíquico.Hesham Al Hilali (MSF)La esposa de Ali Qaid lleva pan preparado como desayuno para su familia, de 12 integrantes. La tienda en la que viven no tiene área de cocina, así que ella cocina la comida de la mañana en un área abierta al lado de la carpa sobre leña y fuego. Hay alrededor de dos millones de personas en Marib, residentes, desplazados internos e inmigrantes combinados.Hesham Al Hilali (MSF)El trabajador comunitario de salud mental de MSF, Waleed Ameen, organiza sesiones de juego con niños en el campamento Al-Khuseif. Los cooperantes organizan actividades psicosociales con niños de familias desplazadas internamente para promover su crianza natural, mejorar sus habilidades sociales y su sentido de cooperación en un entorno complejo.Hesham Al Hilali (MSF)Una enfermera de MSF limpia la herida de un niño, Mohammad, antes de aplicarle un vendaje en la clínica móvil del campamento de Al-Khuseif. La necesidad de atención a la psique de las personas en Marib es visiblemente alta, pero también es una de las áreas más descuidadas de la atención médica en general en Yemen.Hesham Al Hilali (MSF)Una niña camina de regreso a su tienda de campaña después de buscar servicios médicos en la clínica móvil de MSF en el campamento de desplazados internos de Al-Sweida. Este asentamiento alberga a cientos de familias desplazadas de todo Yemen debido al conflicto, que en marzo de 2022 cumplirá siete años.Hesham Al Hilali (MSF)Dos trabajadores sanitarios comunitarios de MSF caminan hacia el campamento de Al-Sweida. Estos cooperantes identifican casos de desnutrición, monitorean brotes de enfermedades y difunden mensajes de promoción de la salud a los residentes.Hesham Al Hilali (MSF)Clínica móvil de MSF en el campamento de Al-Sweida para desplazados internos en Marib, Yemen. El 70% de las personas que acudieron a consultas psicológicas individuales en estos centros entre noviembre de 2020 y noviembre de 2021 informaron de que los factores desencadenantes de su deterioro mental fueron los problemas relacionados con su nueva condición como refugiados.Hesham Al Hilali (MSF)Un niño juega con un globo en el campamento de Al-Sweida para desplazados internos en Marib, Yemen. La falta de necesidades básicas y las disputas no son las únicas razones por las que las personas buscan consultas de terapia. La pérdida de seres queridos durante el conflicto y el temor de que este pueda estallar nuevamente en cualquier momento hace que muchos de nuestros pacientes siempre se sobresalten, anticipando un desastre.Hesham Al Hilali (MSF)Una mujer vierte las últimas gotas de agua de una botella para preparar la comida junto a su tienda de campaña en el campo de Al-Khuseif. La familia trae agua potable en botellas desde lejos porque no hay en la zona.Hesham Al Hilali (MSF)Yahya Ahmed descansa fuera de su carpa en el campamento para desplazados internos en Al-Khuseif. Ahmed vive con ocho miembros de su familia en una pequeña tienda de campaña que no puede albergar a todos. Tampoco tienen cocina para preparar la comida.Hesham Al Hilali (MSF)El médico de MSF Abdul Malik examina a Mahsan, de un año, en la clínica móvil Al-Hussun en Marib, Yemen.Hesham Al Hilali (MSF)Una niña juega junto a la tienda de campaña de su familia. La guerra y el desplazamiento interno afectaron la estructura social y el sentido de comunidad en el campamento, que hoy se compone de una colección de extraños que vienen de diferentes partes de Yemen.Hesham Al Hilali (MSF)Ibrahim, un migrante etíope de etnia oromo, se sienta con dos hijos en su tienda de campaña en el campamento de Al-Ramsa en Marib, Yemen. Muchos migrantes africanos llegan a Yemen como tránsito en su camino hacia Arabia Saudí. En el camino, son víctimas de trata y, por lo general, enfrentan violencia durante su viaje. También luchan por cubrir sus necesidades más básicas como alimentos, ropa y un refugio seguro para sobrevivir. La salud mental no es una prioridad para muchos.Hesham Al Hilali (MSF)El enfermero de MSF, Abdul Majeed, mide la circunferencia del brazo de Suraiya, una niña a la que se le diagnostica desnutrición, en la clínica móvil de MSF en el campamento de Al Sweida para desplazados internos en Marib, Yemen.Hesham Al Hilali (MSF)Una vista de la residencia de Abdu Sabit en el campamento de Al-Khuseif para desplazados internos en Marib. La mujer vive con una familia de 31 personas en dos tiendas de campaña a pocos kilómetros del frente del conflicto.Hesham Al Hilali (MSF)Abdu Sabit, sentada junto a su tienda. Trabajar en primera línea del frente es la única forma de ganar dinero y sobrevivir. Por eso, los hombres eligen acudir allí y las mujeres viven con la constante preocupación y temor de perderlos en cualquier momento.Hesham Al Hilali (MSF)Yaseem, enfermero de MSF, revisa la temperatura de una paciente en la clínica móvil Al-Khuseif en Marib, Yemen. Tanto ella como su hermana tienen tos, diarrea y dolores de cabeza. Ambas son dos de las hijas de Abdu Sabit.Hesham Al Hilali (MSF)El consejero de MSF, Abdul Haq, entrega un globo a Aasifa para interactuar con ella como parte de la actividad de apoyo psicosocial y atención en la clínica móvil de MSF en Al-Sweida. Aasifa, de siete años, sufre problemas psicológicos causados por el conflicto.Hesham Al Hilali (MSF)Ahmad camina con jarras de plástico para recolectar agua de una fuente a cierta distancia de sus tiendas en el área de Al-Hussun en Marib, Yemen. La falta de agua potable es una de las principales dificultades a las que se enfrentan las personas que viven en los campamentos de Marib.Hesham Al Hilali (MSF)
