Mayank Amin, un farmacéutico de la ciudad de Filadelfia (Estados Unidos), ha administrado más de 4.000 dosis del inmunizante contra la covid-19 en su comunidad
En Schwenksville, Pensilvania, una comunidad en las afueras de la ciudad de Filadelfia, Mayank Amin se disfraza de Superman para llevar las vacunas contra la covid-19 a quien lo necesite.HANNAH BEIER (REUTERS)Todas las mañanas se coloca un Tilak Chandlo, símbolo de su fe BAPS Swaminarayan, una rama del hinduismo.HANNAH BEIER (REUTERS)Como parte de su ritual matutino, Amin reza en el altar de la casa de sus padres, ubicada en Landsdale, Pensilvania.HANNAH BEIER (REUTERS)Mayank Amin, farmacéutico de profesión, había solicitado ser distribuidor de vacunas y, en un par de días, la farmacia de su familia fue autorizada para hacerlo.HANNAH BEIER (REUTERS)Amin distribuye el inmunizante en una residencia de ancianos en Pensilvania.HANNAH BEIER (REUTERS)Amin ha colocado alrededor de 4.000 dosis desde febrero con la ayuda de un grupo de voluntarios.HANNAH BEIER (REUTERS)Amin reparte la vacuna con la ayuda de los trabajadores de su farmacia y otros voluntarios, como el departamento de bomberos de su municipio.HANNAH BEIER (REUTERS)Una mujer recibe la vacuna. Entre los pacientes de Amin se encuentran jóvenes con afecciones y hasta una pareja con más de 80 años de casada.HANNAH BEIER (REUTERS)El farmacéutico visita a su esposa embarazada solo los fines de semana, para evitar exponerla a una posible infección.HANNAH BEIER (REUTERS)La pareja espera a su primer hijo. Mayo, el mes para el cual esperan el nacimiento, también ilusiona a Amin porque para ese momento toda su comunidad ya podría estar vacunada.HANNAH BEIER (REUTERS)
