![](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/SBEX2Y4VUJKM3EGVGTXI6CSBOE.jpg?auth=c5a4790df08d2eb36f07460c7b7da4230497dd1d9930dd4801bfa46909893905&width=414)
¿Te imaginas ser refugiado en plena pandemia mundial?
¿Imaginas tratar de mantener la distancia entre el hacinamiento de un campo de refugiados? ¿Quedarte en casa mientras fuera es zona de guerra? ¿O lavarte las manos sin agua limpia ni jabón? No todos estamos viviendo de la misma forma las restricciones ante la covid-19
![<p>La vida de muchos de nosotros cambió en un instante cuando se declaró la pandemia de la covid-19. De un día para otro se nos aconsejó quedarnos en la seguridad de nuestras casas, nos pidieron mantener distancias de seguridad y ser cuidadosos con nuestra higiene. Pero para millones de personas que viven en contextos frágiles la inestabilidad, el conflicto y la violencia ya había cambiado sus vidas, y ahora, hacen frente a una situación sin precedentes: una crisis sanitaria y económica que pone en riesgo su futuro. Hay 25,9 millones de refugiados en todo el mundo, la cifra más alta registrada en la historia. No todos estamos viviendo de la misma forma las restricciones ante la COVID-19. Lo cuentan bien estas imágenes recopiladas por la ONG World Vision. </p> <p>Muombi, de 15 años, fue separada de su madre cuando su familia huyó de los combates en su aldea. Luego fue abandonada por su hermano mayor y ahora vive con amigos de la familia en el campamento de desplazados internos en Goma, República Democrática del Congo. Todos los días, Muombi va al bosque en busca de comida y se expone a riesgos como la violencia sexual y el abuso para comer. </p>](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/MNJS74GCSBNBZONGA36DD4SB2Y.jpg?auth=f00a9730ec02d82a0993c236b6b927c1f7d8a5519fe1cecfd6631849b316ad84&width=414)
La vida de muchos de nosotros cambió en un instante cuando se declaró la pandemia de la covid-19. De un día para otro se nos aconsejó quedarnos en la seguridad de nuestras casas, nos pidieron mantener distancias de seguridad y ser cuidadosos con nuestra higiene. Pero para millones de personas que viven en contextos frágiles la inestabilidad, el conflicto y la violencia ya había cambiado sus vidas, y ahora, hacen frente a una situación sin precedentes: una crisis sanitaria y económica que pone en riesgo su futuro. Hay 25,9 millones de refugiados en todo el mundo, la cifra más alta registrada en la historia. No todos estamos viviendo de la misma forma las restricciones ante la COVID-19. Lo cuentan bien estas imágenes recopiladas por la ONG World Vision.
Muombi, de 15 años, fue separada de su madre cuando su familia huyó de los combates en su aldea. Luego fue abandonada por su hermano mayor y ahora vive con amigos de la familia en el campamento de desplazados internos en Goma, República Democrática del Congo. Todos los días, Muombi va al bosque en busca de comida y se expone a riesgos como la violencia sexual y el abuso para comer.
Kayla Robertson (World Vision)![El campamento de desplazados de Mugunga 1 está a varias millas de Goma, en la República Democrática Oriental del Congo. Durante el último año ha aumentado de tamaño debido a un recrudecimiento de la lucha rebelde. Las condiciones en los campamentos son muy difíciles, especialmente ahora que el bloqueo y las restricciones dificultan a las familias la búsqueda de ingresos para vivir.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/CP35HZUYSZNOPB75QR5NK72XLQ.jpg?auth=53db9932212551a25caeb219b0a6d9477d947115073b623994877e8c87586be9&width=414)
![En el oeste de Afganistán, donde muchos puntos de salud han sido destruidos de forma intencionada por los grupos armados, los profesionales médicos que trabajan para organizaciones humanitarias tienen serias dificultades para tratar pacientes con alto riesgo de contraer covid-19.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/RQFW7QQ7FRIXPI5UOKHF2DBUWQ.jpg?auth=a77ba88404b1306e9314b8509398841f51c9f65a4cf9eefbe6e4a99e1bd4d172&width=414)
![Cerca de 200.000 congoleños huyen de Kivu del Norte, tras la captura de la región por parte de las fuerzas rebeldes. Además del miedo a la violencia se enfrentan a un miedo desconocido, contraer la covid-19. Si la pandemia de coronavirus los alcanza, podría tener efectos catastróficos ante la ausencia de suministros médicos.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/FWGETVNY3BMZ7IWYVTGAAR7USQ.jpg?auth=928498a8366c1834c5827030a9006223b02342100122be52f5f22c7f15048c0a&width=414)
![Innocent, tiene 11 años y es uno de los 200 huérfanos que viven completamente solos en el campamento de desplazados Mugunga 1 en Goma. La desnutrición y la falta de controles médicos comprometen su sistema inmunológico, haciendo que enfermedades como la covid-19 tengan peores consecuencias si se contagiara.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/JJQWUVBGH5PGRIW4OYAUQVG7RU.jpg?auth=f1dac30705686c2e3fb392a3f2f95bdbd0e05659ad5587d55bb172674f3a44f2&width=414)
![Las familias que viven desde hace años en los asentamientos de refugiados sirios en Bekaa, en Líbano, sentencian que este es el peor periodo por el que están pasando. Las medidas de prevención frente a la covid-19 y la falta de recursos hacen que algunas familias hayan tenido que reducir el número de comidas que ofrecen a sus hijos.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/KRKV4CBCPNPHLAXI2USHOT3QNI.jpg?auth=69e924eb61eed8e72a27c24f483c73685f35c1dee86cfe92b67750c4d205122f&width=414)
![Yasmine, de 12 años, vive con su familia en un hacinado campo de refugiados sirios en el valle de la Bekaa, Líbano. La incapacidad de distanciarse socialmente en asentamientos extremadamente poblados como este, pone a las familias en mayor riesgo de contraer covid-19.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/BL2YDWGCYVLSLGNKA4PI3XVAUI.jpg?auth=79a7a5b4682c83739d452fd2a82a455998a3eeb467ddde8e6747f284749e0167&width=414)
![“No recuerdo en qué mes llegué, pero sé que fue un sábado. Vine aquí con mi hermana, Aline, que tiene 16 años pero me dejó sola. Un día ella se fue, simplemente desapareció y nunca regresó. No tengo ninguna información sobre dónde está ahora, así que paso las noches aquí sola en mi tienda”, cuenta Fazili de 12 años. Al igual que esta niña congoleña, más de 200 niños viven sin compañía de padres o tutores en el campamento de refugiados de Mugunga.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/OPFWB44EMBOG3FIDIEOU5BY62A.jpg?auth=5b45c8bd259c63a0361de5b6e45bef07f3d47c575783443262683015f3308695&width=414)
![La ONG World Vision está distribuyendo 40.500 kilos de jabón a 150.000 niños refugiados y personas con necesidades especiales en el Nilo Occidental Uganda, para ayudar en la lucha contra la propagación del coronavirus.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/5JYYKGOLW5L35HMWZP5VKCPRXI.jpg?auth=2e4ca8bc85b9aed87c642131e549a7a8f57074e51910e8e13495e76910516468&width=414)
![La pandemia de covid-19 ha pillado a un gran número de refugiados venezolanos buscando refugio en países vecinos. Ahora muchas familias viven en refugios improvisados y ocupaciones espontáneas en Boa Vista (Roraima - Brasil) ante la falta de recursos. Estas familias se encuentran atrapadas en un país que no es el suyo, sin recursos ni medios de vida tratando de sobrevivir gracias a la ayuda humanitaria.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/3VXBWJSJSVKXJL4VYEAZ6EMOFU.jpg?auth=55fbc085d17f18b69fd1f723b6be403a2da1d048c330925d5293a252413b0d7a&width=414)
![Katiuska tiene 42 años y dos hijos, son de Venezuela y llegaron a Manta, Ecuador, poco antes de que estallara la crisis causada por la covid-19. Ahora sobreviven gracias a la entrega de las tarjetas familiares, un método de entrega de dinero en efectivo para ayudar a las familias migrantes venezolanas ante la falta de recursos a causa de las medidas de distanciamiento social.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/4IDWMKLPIJNH5NG5SJTM6AH2VQ.jpg?auth=c06d8330d28863ada8217a9b1c493e5dd924b861a32d0217f39ac7aac2b7e81d&width=414)
![Cuando el Gobierno de Ecuador anunció las estrictas medidas de seguridad frente a la pandemia de la covid-19 muchas familias venezolanas acaban de llegar al que esperaban que fuese su nuevo hogar. Ahora sin opciones de encontrar un trabajo o una fuente de ingresos se encuentran atrapados sin recursos para cubrir las necesidades mínimas de sus familias.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/FIYSOKAZNNOW5G2VMFBMKEIC4E.jpg?auth=cae03ec9792e8fc36eb1dfb832d87edd73aee81fc417845329f2e52001ca3234&width=414)
![Todo el mundo puede contraer la enfermedad de la covid-19, pero no a todo el mundo le afecta de la misma manera la crisis económica que acecha tras esta crisis sanitaria. Para las familias vulnerables de Florida y Copán Ruinas, en Honduras, el bloqueo ha provocado la ausencia de ingresos económicos por completo. Ahora dependen completamente de la entrega de alimentos y kits de higiene por parte de organizaciones humanitarias.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/7XHDPXLFBNPENCYDVLBYKGMTDA.jpg?auth=7bbf3ff87033664bf39b16c3a1f6d1318e2c982bda28666380c4199e408de2c0&width=414)
![La dificultad de acceso a algo tan básico como el agua potable, productos de higiene y alimentos pone en riesgo la salud de los migrantes y refugiados, por lo que la expansión del coronavirus podría suponer una catástrofe humanitaria en estos asentamientos. Ante esta situación una de las prioridades es dar soporte a las familias proporcionando medidas preventivas como estaciones públicas de lavado de manos, reparto de jabón, distribución de lejía, como la que sostiene esta niña de Líbano, y otros productos desinfectantes.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/C6DOZOJONRJU7DZY4IDVSVPCXE.jpg?auth=e756d4309ce45717bfb904dd1b12c747f85d4323ce08f4b1103f778ca1eb35af&width=414)
![Durante los últimos años, el valle de la Bekaa en el Líbano ha acogido a miles de familias de Siria después de que la guerra destruyera sus casas y pueblos. Nueve años después, la guerra sigue siendo brutal, y millones de niños siguen en movimiento. El hambre, el trabajo infantil, el matrimonio precoz, la falta de educación y la falta de una nutrición adecuada son problemas que afectan la salud y el bienestar de los más pequeños.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/KJPWUBQJQJNVVEW455X65LG5BE.jpg?auth=3711a73ec2c0c382cf0a3c58f2ba3868091e3271468cfe147f7280baf409a33b&width=414)