Josefa Gutiérrez, memoria viva de EL PAÍS

La directora de Recursos Humanos de PRISA Noticias, Josefa Gutiérrez, ha cesado en su cargo tras 40 años dedicados a EL PAÍS y el resto de cabeceras de la unidad. La directora, que empezó como teclista, deja el puesto, que asume Mar Bueno, deseando que “las generaciones jóvenes y todas las que vengan cuiden la empresa y el producto como su propia casa”.

Su trayectoria en el diario empezó cuando tenía poco más de 20 años. Estudiaba la carrera de Sociología y pertenecía a la Liga Comunista Revolucionaria cuando llegó a la facultad la noticia de que pronto saldría un nuevo periódico. “Quería ser parte de él”, sostiene Gutiérrez. Un mes antes de la publicación del primer número de EL PAÍS -mayo de 1976- se incorporó al equipo del diario para trabajar como teclista. Su función sería la de transcribir las noticias que los periodistas redactaban para que estas pudiesen ser procesadas por las linotipias. Aquellas semanas de preparatoria “fueron un desastre” y los trabajadores tuvieron que indagar en formas de impresión más eficaces.

Solventados los problemas, llegó la noche previa a la publicación de EL PAÍS. La emoción embargaba a todos los empleados, que se mantuvieron hasta la madrugada en la redacción. “Fue una época fantástica que recuerdo con mucha añoranza, tanto la redacción como el taller eran un equipo muy involucrado”, rememora Gutiérrez sobre los primeros años.

Desde aquel momento su carrera profesional quedó ligada al propio desarrollo del diario. Al poco de entrar en plantilla, como miembro del llamado jurado de empresa, hoy comité de empresa, participó en la elaboración de la primera tabla salarial de EL PAÍS. En 1981 vivió la transformación tecnológica del periódico, lo que levantó a los sindicatos, pues temían que el avance de la mecanización conllevara despidos masivos. “Soy muy cuestionada entonces porque me paso a la patronal, pero intento, desde el primer momento, hacer un trabajo tan importante por los trabajadores como el que hacía desde los sindicatos”, defiende la ya exdirectora.

Algunos años después abandonó temporalmente EL PAÍS para trabajar como jefa de personal en la revista El Globo, pero en 1989 vuelve al diario ya vinculada a funciones de recursos humanos. Es en 2008 cuando accede al cargo de directora de Recursos Humanos de PRISA Noticias. Ese “punto de inflexión” dio paso a algunos de los momentos más complejos de su trayectoria profesional, al tener que ser “la conexión” entre la empresa y los trabajadores en el “duro” proceso de ERE que sufrió el diario en 2012. “Lo más difícil de estos últimos 10 años es que he tenido que actuar como directora de Recursos Humanos con gente con la que he vivido desde el minuto uno del periódico”, señala.

A pesar de las turbulencias de esta década, valora su carrera como muy positiva, desempeñando diferentes cargos, “siempre en progresión”, e intentando “ser útil a la casa”. “Todos son buenos recuerdos”, reitera en varias ocasiones. Enumera como algunos de los más apreciados las verbenas que EL PAÍS celebraba -y que ha recuperado recientemente- en el patio de su sede, donde el periódico se convertía en el centro cultural de Madrid. También la Navidad de 1983, cuando les tocó la lotería el día siguiente a que la selección española de fútbol ganase a la de Malta 12-1.

La directora de Recursos Humanos se retira del puesto con la redacción de EL PAÍS rebosante de jóvenes periodistas y la tecnología integrada en los procesos de trabajo. Gutiérrez espera que EL PAÍS y el resto de cabeceras de PRISA Noticias sigan siendo líderes en el sector con el compromiso de todos sus trabajadores: “Somos una casa de cultura, un altavoz, y tengo la sensación de que hoy somos tan importantes y necesarios como el primer día que salimos”.