Gasolina a tres euros
Tras la noticia de que julio ha sido el mes más caluroso desde que hay registros, parece que va siendo hora de hacer algo. Y sobre todo, de dejar de hacer un montón de cosas. Imaginemos la cantidad de viajes absurdos, de compras inútiles, de gastos para nada que dejaríamos de hacer con una subida potente de los precios de los combustibles. ¿La economía se iría al traste? Seguramente, aunque esa subida en las tasas de las emisiones de CO2 se podría compensar con bajadas en otros impuestos. En fin, nada es perfecto y me temo que optaremos por la gasolina barata y por ese crecimiento económico que tan felices nos hace.
Miguel Rodríguez Méndez
Salamanca
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.