El culebrón malayo continúa: retan al rey de Malasia a someterse a una prueba de ADN
La exmodelo Rihana Oksana Voevodina insiste en que no está divorciada de Mohamed V de Kelantan y propone una prueba de paternidad sobre el hijo que tuvieron
El culebrón veraniego en el que se ha convertido el matrimonio –o lo que queda de él– entre Mohamed V de Kelantan y Rihana Oksana Voevodina continúa. Y lo hace siguiendo una fórmula clásica: introduciendo nuevos personajes en la trama. Después de que esta semana el abogado del monarca pusiera en duda la paternidad del hijo en común de la pareja, dos personas en el bando de Voevodina han levantado la voz. Por un lado, una amiga de la exmodelo rusa ha retado al rey a realizar una prueba de ADN, mientras que su abogado ha asegurado que la pareja "no se ha divorciado".
Para Liliya Nastaeva, autoproclamada mejor amiga de la protagonista, las declaraciones del abogado de Mohamed V son una "tontería". Nastaeva, de 32 años y antigua propietaria de un salón de belleza, ha lamentado que la casa real de Kelantan haya elegido a "un abogado tan parlanchín y poco profesional", al tiempo que aseguraba que "todas las personas cercanas a Oksana estamos esperando una disculpa pública por su parte". En su opinión, no hay prueba más concluyente que el rostro del bebé de la pareja, de nombre Ismail Leon, ya que "padre e hijo son como dos gotas de agua". Pero, por si eso no bastara, ha lanzado el guante: "Si tienen sospechas, siempre pueden hacer una prueba de ADN, Oksana está preparada".
Al mismo tiempo, el abogado de ella, Evgeny Tarlo, exsenador ruso, negaba la mayor: "Oksana es una mujer casada". En declaraciones al diario ruso Komsomolskaya Pravda ha asegurado que "no ha habido divorcio, puedo decírtelo con total responsabilidad", sin aclarar cuál es su papel en el entuerto de ser eso cierto. Tarlo se ha dirigió a su contraparte, el abogado Koh Tien Hua, para conminarle a "enseñar sus credenciales". "Este señor no sé quién y con qué derecho está realizando declaraciones sobre la vida de Oksana Voevodina", ha añadido.
Mientras todo esto ocurre, Voevodina hace su vida en una casa de campo a las afueras de Moscú. Su presencia en esta finca, propiedad de Mohamed V, da credibilidad a fuentes cercanas a la casa real que apuntan a que el rey estaría dispuesto a mantenerla económicamente, pero desheredaría al niño. La que fuera Miss Moscú 2015 no ha roto su silencio en ningún momento, y solo se ha expresado por medio de su perfil en Instagram, en el que cuenta con casi medio millón de seguidores. En un vídeo compartido la semana pasada se podía ver a la pareja hablando de su vida amorosa. En las imágenes, Mohamed V apuntaba que “la prioridad familiar número uno tienen que ser los niños, porque son los que mantienen tu legado”. No está claro que lo dijera pensando en el pequeño Ismail Leon, que acaba de cumplir dos meses.
La relación de la pareja ha sido muy polémica desde que se hizo oficial, hace siete meses, cuando contrajeron matrimonio en una ceremonia secreta en Rusia. Entonces, Mohamed V todavía era el jefe de estado de Malasia. Voevodina se convirtió al islam y adoptó el nombre de Rihana, pero ni siquiera eso consiguió aplacar la desconfianza con la que la población recibió su llegada. La gota que colmó el vaso fueron unas imágenes de su participación en un reality show ruso años atrás, en las que se veía a Voevodina manteniendo relaciones sexuales con otro concursante. A consecuencia de ello, Mohamed V se convirtió en el primer monarca malayo en abdicar, apenas unos meses después de acceder al trono. De momento, abandonar su matrimonio está siendo más complicado que abandonar la corona.
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