La Virgen: la única cerveza que se vende… a través del teletexto

Suena a broma, pero no lo es. ¿Sabes que hasta el 15 de junio puedes comprar las cervezas artesanas La Virgen a través del teletexto de tu tele? Sí, cerveza pura a domicilio a través de este vestigio de la era analógica que ya ha cumplido 31 años y que, aunque parezca mentira, consultan a diario 2,3 millones de personas. El 99,3% de los hogares en España tiene teletexto, y algo que ha sobrevivido a la era digital en plena forma merece todos nuestros respetos.

Es posible que no te hayas fijado, pero tu mando a distancia todavía conserva un botón con las letras TEXT que te dirige a un universo pixelado y vintage en cuatro colores. Busca la página 340 del teletexto de Mediaset (Cuatro, Telecinco, Factoría de Ficción) y, a través de esos cuatro botones de colores, podrás acceder a cuatro variedades distintas de Cervezas La Virgen: Madrid Lager (fermentada y madurada a bajas temperaturas durante más de 40 días y  3 veces premiada como mejor Lager de España por los World Beer Awards) Trigo Limpio (reconocida en los World Beer Awards 2017 como mejor cerveza de trigo estilo Hefeweizen de España), India Pale Ale (de intenso sabor a lúpulo y equilibrio maltoso) y 360 (de alta fermentación, que utiliza tres veces más de lúpulo que una cerveza normal). Después solo tienes que llamar al teléfono indicado y decir el código que verás en cada una de las páginas para comprar la mejor cerveza artesana a un precio muy competitivo. Además, podrás llevarte un regalo.

Porque esta es la única manera de anunciarse en televisión cuando se invierte todo en lo que de verdad importa, hacer más y mejor cerveza. El problema es que se han fundido todo el presupuesto de los inversores en hacer buena birra pero necesitaban aparecer en prime time. Y qué mejor que el teletexto, la última forma de conseguir anunciarse en horario de máxima audiencia 24 horas, siete días a la semana.

Cervezas 100% artesanas para todos los gustos

La historia de Cervezas La Virgen se remonta a 2011, cuando cuatro socios decidieron apostar todo a una carta. Aquel año se lanzaron en Madrid a una aventura empresarial arriesgada, aunque el plan se había fraguado dos años antes mientras compartían un despacho en una agencia de publicidad en San Francisco. Su intención: elaborar una cerveza artesanal solo a base de ingredientes naturales (agua, malta, lúpulo y levadura). Una cerveza sin aditivos ni productos químicos, sin pasteurizar y embotellada cada semana. Ni más ni menos.

Bajo esta filosofía nació una marca que hoy es toda una referencia en España en lo que a cervezas artesanas se refiere. No es casualidad que la idea de poner en marcha este negocio naciera en San Francisco. Allí el oficio cervecero es casi una religión, y los cuatro amigos (e incipientes emprendedores) lo tenían claro: ¿por qué no trasladar este concepto a su ciudad? Dicho y hecho. A los pocos meses de fundar la marca, abrieron su primera fábrica con un brewhouse (depósito de cocción) de 1.000 litros. En menos de tres años, la empresa ya contaba con una factoría capaz de producir más de un millón de litros de cerveza.

Situada en Las Rozas (Madrid), estas instalaciones son el verdadero corazón de Cervezas La Virgen, cuyo lema (“Sin trucos y sin prisas”), es toda una declaración de intenciones. Porque así son las cervezas artesanales que nacen aquí. El proceso de producción es 100% artesanal. Todo empieza con la molienda de los granos de malta de cebada en una elaboración tradicional en la que ni se filtra no se pasteuriza, respetando en todo momento los tiempos de fermentación y reposo. Una vez usado el grano, este se utiliza para alimentar al ganado local, por lo que se recupera y reutiliza gran parte de la energía usada en todo el proceso de producción.

De los depósitos de esta fábrica salen hasta 20 tipos diferentes de cervezas, tanto en envase de cristal como en lata. El objetivo de hacer y vender buena cerveza se cumple con creces. Algunas de ellas se elaboran todo el año, como la Madrid Lager, Trigo Limpio, Jamonera (tostada y de color rojizo, perfecta para acompañar un buen bocata de jamón), India Pale Ape, 360 y la Madrid Lager sin gluten, apta para celíacos.

También hay cervezas de temporada o estacionales: la Virgen Veraniega, para los meses de más calor; la 720 Imperial Ipa, de sabor fuerte gracias a su doble de malta y doble de lúpulo; Märzen, elaborada tradicionalmente en primavera y que se guarda hasta final del verano, especial para la época del Oktoberfest; Buena Esperanza, con una tirada limitada a decisión del maestro cervecero, y la Virgen de Castañas, elaborada mediante un proceso único con castañas asadas a fuego y peladas a mano, ideal para el invierno.

Además, se elaboran otras cervezas de edición limitada (solo 3.500 litros) como la de ciruela claudia; la de paraguayas y la de mora y frambuesas. Sin olvidar la gama de viejas glorias, también de edición limitada, que sorprenden por su originalidad y sabor. Es el caso de Chocobollo, chocolateada con cacao de Valrhona; Barley White, envejecida en botas de pedro ximénez; Turbock, con un extra de graduación y maltas; Marcian Pils, aromatizada con 200 kilos de cítricos; Gorila, en la que está presente el sabor del plátano de Canarias; Bomber Farmhouse, con frambuesa del valle del Jerte y hoja de lima limón de Australia; Cañonera, de color anaranjado y espuma blanca, y Carajillo Stout, con sabores a tostado, cacao oscuro, café y puro. ¿Por cuál empezamos?