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Tribuna
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Pensamiento débil

No vamos a caer en la crispación y la sobreactuación que procuran los nacionalistas y las derechas

Líderes de Vox, Partido Popular, Ciudadanos, Foro Asturias, UPN y UPyD en la concentración del pasado domingo en la plaza de Colón de Madrid.
Líderes de Vox, Partido Popular, Ciudadanos, Foro Asturias, UPN y UPyD en la concentración del pasado domingo en la plaza de Colón de Madrid.Carlos Rosillo

Estamos en tiempos de crisis política, como significado de que lo nuevo no acaba de nacer y lo viejo no acaba de morir. Por ello, son malos tiempos para los expertos, para los veteranos políticos; tenemos realidades diferentes y necesitamos soluciones nuevas. Ante un contexto político multiforme, de nuevo cuño, es preciso, ante la duda, libertad y ante la certeza, unidad. Y la izquierda debe tener algunas certezas que nos permitan realizar una acción unitaria.

Una primera certeza es que España es una buena idea. Es el espacio más idóneo para promover la cohesión social y la igualdad de oportunidades. Un proyecto que brinda oportunidades y que tiene que proteger a los más vulnerables. Los socialistas siempre hemos defendido la idea de España como lugar común y de encuentro de todos. Una España dentro de una Europa Federal.

A España hay que defenderla con la razón, no solo con la emoción. La idea de España no se defiende con la exclusión o la división que alientan las derechas. Desde la izquierda española creemos que se debe utilizar el diálogo y la búsqueda del consenso. Aspiramos a un proyecto de país amable, mestizo, diverso y socialmente cohesionado.

El trío de las derechas entiende que el diálogo es debilidad, pero para nosotros es fortaleza. Debilidad es la unilateralidad y la imposición. Preferimos ofrecer la mano a abofetear, aunque estemos radicalmente en contra de algunos planteamientos. Dialogar no es necesariamente ceder y es perfectamente compatible con la firmeza en la defensa de nuestros principios. Pero dialogar resulta imprescindible para intentar resolver los problemas.

Los socialistas estamos comprometidos con Cataluña. Defendemos sin complejos la unidad de España y, por eso, no entendemos nuestro país sin Cataluña. Nadie puede negar la división en el interior de la sociedad catalana y la fractura de la convivencia. Y esto solo puede resolverse con diálogo. Siempre dentro de la Constitución y de nuestro ordenamiento jurídico, pero diálogo.

Echamos de menos más responsabilidad de la derecha. El PSOE apoyó al Gobierno del PP en la aplicación del artículo 155 ante el gravísimo desafío independentista, comportándonos como un partido responsable. No nos dolieron prendas hacerlo, como tampoco nos duele ahora hablar de la búsqueda de soluciones siempre dentro de la ley y de la Constitución.

Estos días hemos visto como algunos compañeros, que son o fueron en algún tiempo referentes de la izquierda, han aceptado el marco conceptual de las derechas. Pero no podemos compartir su punto de vista. Una vez que aceptas el discurso del adversario, muestras un pensamiento débil y subsidiario.

Los socialistas habitamos el espacio de progreso y de la izquierda. Nuestra convicción es que hasta la situación más adversa se puede superar con la inteligencia colectiva que procura el diálogo. Esta convicción es lo que nos hace seguir con el timón firme. Esta convicción es la que está mostrando el presidente Pedro Sánchez y el Gobierno. La ética de la convicción y la ética de la responsabilidad. Los problemas exigen coraje y argumentos.

No vamos a caer en la crispación y la sobreactuación que procuran los nacionalistas y las derechas. Además, sentimos el aliento y el ánimo en ese empeño de una mayoría ciudadana que de forma silenciosa, paciente y constante aspira a una España de progreso y convivencia.

Honestamente, creemos que la posición del PSOE y del actual Gobierno es el mejor intento de encontrar una solución al encaje territorial. Necesitamos tiempo y diálogo para encontrarlo. Necesitamos unidad y responsabilidad. Pero desgraciadamente, como dijo Azaña, algunos españoles utilizan la cabeza solo para dar testarazos, no para pensar.

Santos Cerdán León es Secretario de Coordinación Territorial del PSOE.

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