10 fotosEl futuro del pueblo miskito en NicaraguaLa universidad nicaragüense implementa programas compatibles con la vida en el campo y en el idioma de los pueblos originarios para que los jóvenes indígenas puedan acceder a formación superiorIñaki MakazagaPuerto Cabezas - 11 feb 2019 - 07:41CETWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceLa Región Autónoma de la Costa Caribe Norte (RACCN) de Nicaragua es del tamaño de Cataluña y cuenta con más de 300.000 habitantes dispersos entre zonas boscosas y grandes extensiones de selva tropical. Una de los grandes frenos del desarrollo es su falta de infraestructuras y comunicaciones. Más de la mitad de la población tiene menos de 19 años y el 65% está en paro. Más de 420 jóvenes de 21 comunidades diferentes han participado durante los últimos cuatro años en un curso de liderazgo que les ha vuelto a conectar con la universidad y les ha ofrecido claves para trabajar de forma más productiva la tierra y los recursos naturales.Jerume Terrero, de 23 años, termina sus estudios en Sociología a la vez que trabaja como Agente de Cambio en temas LGTBI desde el Departamento de Estudio de la Mujer Multiétnica de la URACCAN. “Ser homosexual hoy en el Caribe supone exponerte a agresiones diarias. Toca denunciar y sensibilizar”.Berna Cárdenas vive en Sisin, aldea rodeada de selva y a tres horas en coche de la ciudad. Durante años ha ocupado el cargo de jueza comunal. “Vivo en contacto permanente con la policía. Las mujeres que sufren violencia en sus casas deben denunciarla. Debemos acabar con el machismo”. Su principal orgullo es hoy tener un hijo a punto de terminar Ciencias Políticas en la ciudad.La Universidad de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe Nicaragüense (URACCAN) es el primer centro universitario multicultural del país con planes de estudios adaptados a las lenguas indígenas y enfocados a su cosmovisión del mundo. El vicerrector del campus de Bilwi, Enrique Cordón, prepara ya la captación de nuevos alumnos. “La autonomía de la región está todavía construyéndose, es clave formar a los jóvenes para que sean capaces de quedarse en sus comunidades y desarrollarlas desde dentro”.Esta región del Caribe reúne el mayor número de reservas naturales de Nicaragua, así como grandes fuentes de agua y amplias extensiones de bosque.Los jóvenes del Caribe nicaragüense denuncian la falta de empleo y de oportunidades, así como la llegada masiva de colonos en busca de tierra que explotar de manera rápida. Por eso, son muchas las organizaciones que realizan convenios con las universidades para trabajar de manera conjunta el liderazgo, el emprendimiento y el fortalecimiento de redes que garanticen su seguridad.Mario Palma, de 21 años, ha vuelto a estudiar tras participar en un curso de liderazgo y pasar el último año como minero a 500 metros bajo tierra. “Aquí no hay más alternativas que el campo, migrar o resistir”.Los líderes proponen a los jóvenes más capacitados y comprometidos para que puedan acudir a la ciudad a estudiar y regresar después a incorporar la aprendido. De todos modos, tan solo un 30% regresa. Son tanto los que no consiguen terminar la carrera como los que no encuentran la manera de aplicar sus estudios en un trabajo convencional.Constantino Romel lleva todavía hoy alojada una bala en su tórax por denunciar el asentamiento de colonos ilegales en tierras comunales del Caribe. “No sólo nos abandona el Gobierno, sino que permite que nos invadan con total impunidad”.