Ser niña, un derecho sin excepción
Qué bonito ser niña. Que te cuiden al nacer y te enseñen a cuidarte mientras creces. Ser niña es tener ganas de progresar y de aprender. Estudiar y trabajar. Ser generosa, valiente y divertida. Las niñas nunca nos rendimos: luchamos y nos hacemos escuchar. Somos todas únicas y especiales, y bonitas por nuestra manera de pensar. Ser niña es mágico. Es jugar, reír y caerse para levantarse con más fuerza. El jueves fue el Día Mundial de la Niña, sin duda un día para la reflexión en el que no podemos olvidar que hay personas que cada día trabajan y luchan por el empoderamiento y la igualdad de niñas que se encuentran en situaciones de discriminación. A todas ellas, gracias por vuestra labor. Y es que ser niña es un derecho, sin excepción. Y todas deberíamos tener las mismas oportunidades y disfrutar de una infancia y de una vida feliz y justa. Ojalá algún día todas las niñas del mundo puedan llegar a serlo de verdad.
Marta Navarro. Barcelona
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