El epicentro del terremoto se ubica en una región con un muy bajo porcentaje de registro de nacimientos, donde apenas el 33% de los menores de cinco años tiene un certificado de nacimiento, según datos gubernamentales. Esta situación dificulta las labores de reunificación familiar y abre la puerta al riesgo de explotación infantil y sexual y el posible tráfico de menores no acompañados, alertan organizaciones como Unicef o Save the Children.
Nurul Istikhoroh, de 15 años, alcanzada por el equipo de rescate en Palu, tras permanecer casi 48 horas bajo los escombros de su casa.