9 fotosQueridos suicidas: una aproximación en diez librosUna selección de títulos de escritores que exponen sus razones para quitarse la vida o bucean en las vidas de otros que lo hicieronAloma Rodríguez22 may 2018 - 12:14CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceEste libro breve, publicado por primera vez en 2008, traducido en 2010 en 451 y rescatado ahora por Eterna Cadencia, es un testamento literario. Levé, pintor y escritor nacido en París en 1965, empieza hablando del suicidio de un amigo de infancia: cuenta su vida mientras trata de dar con el porqué. Lo que pudo pensar el amigo muerto se confunde con lo que debió de pensar el propio Levé, que se suicidó unos días después de enviar el manuscrito de 'Suicidio' a su editor.Traducción de Matías Battistón. Eterna Cadencia, 2018Cuando el escritor era un adolescente, en Murcia y a mediados de los noventa, su mejor amigo se suicidó, tirándose por un barranco, después de haber matado a su hermana, Rosi. Hernández vuelve a ese crimen para reconstruirlo y enfrentarse con el pasado. Sin embargo, en la novela se percibe el interés estético de Hernández y su preocupación por la representación y el arte. Por azar, descubre una foto en la que aparece Rosi, la hermana asesinada, ese encuentro casual le obliga a Hernández a reescribir su novela.Anagrama, 2018“Si acabo con mi vida, si acabo, solo es, pues, por amor a la vida”, escribía Antonio Amarayona en la última entrada de su blog. Amaroya era profesor de filosofía y activista –socio de ATTAC, Derecho a Morir Dignamente y Europa Laica–. Sergio del Molino, que fue alumno suyo, lo recuerda en este libro que empieza siendo un diálogo con el maestro para convertirse en una conversación con el pasado.PRH, 2017Para los que tienen la terrible desgracia de ver morir a un hijo no hay nombre, frente a los que sobreviven a sus padres (huérfanos) o a sus parejas (viudos). La escritora colombiana se enfrenta en este libro al tabú del suicidio a través del suicidio de su hijo, muerto a los 28 años. Como muchos de los libros sobre suicidas, no se trata tanto de saber por qué como de dejar un testimonio de quién fue el muerto. En este caso, era un pintor, desde niño perfeccionista, y en tratamiento psiquiátrico.Alfaguara, 2013La escritora encontró a su madre, Lucile, muerta en su casa. Todo hacía pensar en un suicidio. De Vigan inició entonces una investigación para desentrañar dos misterios: quién era su madre y por qué se había suicidado. Lo que descubrió es una memoria familiar que no está libre de secretos terribles. La madre de la escritora cerraba su carta de suicidio así: “Sé muy bien que os voy a causar tristeza, pero resulta inevitable antes o después y prefiero morir viva”.Traducción de Juan Carlos Durán. Anagrama, 2012En 2001, el 4 de mayo, el padre de Antonio Altarriba se suicidó tirándose desde la cuarta planta de la residencia geriátrica en la que vivía. La residencia solicitó el pago de los 4 días de mayo, 34 euros, y puede que en la indignación del hijo esté el germen de esta novela gráfica que es un homenaje a su padre, excombatiente del bando republicano, exiliado en Francia, empresario de galletas, y anciano con depresión.Ediciones de Ponent, 2009; Norma editorial, 2016La mañana del 27 de febrero de 1992, el escritor zaragozano Chusé Izuel se tiró por el balcón del piso que compartía con un amigo en Barcelona. Izuel escribía y había publicado artículos en la prensa, todavía ningún libro. Tenía 24 años y uno de sus mejores amigos era el escritor Félix Romeo. 'Amarillo' es una reconstrucción de esa amistad y de lo que esa muerte le supuso a Romeo, culpa y liberación. O mejor dicho: primero el alivio y luego la culpa. “Este es un libro sobre el crimen perfecto”, escribe Romeo. Dos años después de su suicidio, en 1994, se editó el único libro de Izuel, 'Todo sigue tranquilo'.Plot, 2008En un principio, iba a llamarse El pesimismo alegre, pero a Roorda le pareció que 'Mi suicidio' era un título más atractivo. Este libro es una nota de suicidio hecha de capítulos breves, reflexiones donde no queda claro dónde acaba la broma y dónde comienza lo serio. El último, “Últimos pensamientos antes de morir”, está lleno de aforismos involuntarios sobre la muerte, el amor y la vida, también recoge su último temor: “Será necesario que tenga cuidado para que la detonación no resuene demasiado en el corazón de un ser sensible”.Traducción de Miguel Rubio. Trama, 2014Este libro no es una nota de suicidio. Es un recorrido por el pensamiento filosófico alrededor de la idea del suicidio. El pensador británico pretende romper con el tabú occidental sobre el suicidio y despojarlo de la carga negativa que le imponen la ley, la medicina, la moral y la religión. Incluye también un capítulo con muestras de notas de suicidio y el ensayo de Hume 'Sobre el suicidio'. Es un buen complemento a la 'Historia del suicidio en Occidente', de Ramón Andrés (Acantilado, 2015), edición ampliada y revisada de la 2003.Traducción de Albert Fuentes. Alpha Decay, 2016